Si ustedes pensaran señores de la oposición, se darían cuenta que la vida es hermosa y que reconocer que estamos en el lado opuesto de los que piensan distinto no es motivo para aborrecerla. Bastaría con un gesto de respeto por nuestros muertos, no importando raza, credo, color o parcialidad política, bastaría con una tregua como en las peores guerras entre seres civilizados para llorar la partida del ser amado, bastaría con un silencio en vez de risas, bastaría con una plegaria en vez de circo.
Si ustedes pensaran, se entristecerían por el dolor de los familiares del caído en combate de una guerra por la vida, como las personas de los pequeños peñeros, de los que salieron a disfrutar en la Isla de margarita y terminaron regados en el camino, de los que rescatando victimas de algún siniestro cayeron en plena labor, de los que en funciones de gobierno o en funciones de oposición perecieron y como tal serían recordados…..si
ustedes pensaran.
Si ustedes pensaran señores de la oposición, comprenderían porque se alejan cada vez sus esperanzas, porqué sus marchas y partidos políticos se desintegran en polvo cósmico comprimido en frágiles envases de muerte y destrucción, porqué sus periódicos son cada vez mas reducidos, su tinta se ha vuelve vulgar y los tinteros que ayer florecieron en quijotescas imprentas como la del Correo del Orinoco, hoy vomitan el negro pestilente de un oposicionismo acéfalo incapaz de pensar.
Si ustedes pensarán, se darían cuenta que los invitados y moderadores de Globovisión, parecen momias enfermas cuyos jugos fomólicos hacen estragos en sus maquillados rostros que envenenados se tornan rojos y los gestos con ojos desorbitados y manos trémulas, acompañan algunas intervenciones terroríficas. que casi siempre terminan aludiendo a su pesadilla mayor, la culpable de su mala salud: Hugo Chávez Frías.
No hay propuesta, no hay salida, no hay vida, no hay rating…..solo salir del coco.
Si ustedes pensaran señores de la oposición, comprenderían porqué un ladrón debe ser juzgado, un terrorista debe ser encarcelado y un difunto debe ser honrado. El ladrón de cuello blanco impune disfruta los bienes que a otro ha robado en playas paradisíacas dejando en la miseria a otro ser humano, el terrorista puede volver a colocar bombas hasta debajo de tu asiento sin preguntar si eres escuálido y el difunto merece el respeto del prójimo que impaciente espera su turno, aunque busque la muerte en las miserias de una vida inútil.
Patria, Socialista o Muerte……Venceremos
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