Esa cosa de capitalismo popular me sacó la piedra. Lo busqué por toda la web y por todas las enciclopedias de esas gruesitas de cien tomos que duermen en los estantes de las bibliotecas públicas y no lo encontré. Me fui a los libreros de libros de segunda por todo el país y en arrumes de obras clásicas y sensacionales y nada. Lo busqué y lo busqué en las bibliotecas de varios países y sus universidades físicas y en línea y no apareció. Lo busqué en libros místicos y religiosos y no lo encontré. Creí que en Encarta o wikipedia era posible porque de seguro de ese recurso digital lo usó maría corina y ná. Les pregunté a los abuelos de las esquinas que jugaban dominó y me trataron de loco.
Tengo amigos en varios países muy estudiosos y les mando correos y chateo preguntado esa vaina y me sacan por la tangente cuando les toco el tema del populacho capitalista. A quienes les pregunto por Email se hacen los suizos y me amenazan con el spam y con los que chateo me desconectan.
Con disimulo me levanté a las tres de la mañana para ir donde la señora que me recomendaron con esas cosas de las cartas o con la bola de cristal porque la vieja es famosa y me vio las cartas y me vio la bola y no me paró bolas cuando le pregunté la cosa esa y sólo me dijo que una tal María le pidió consejo y ella le dijo que popularizara todo lo que se le apareciera. Y me dijo que la tal María le dijo que ni por el carajo le dijera a nadie de su recomendación.
Pero a la señora yo le caí bien. Me invitó a un café verde que tomaba y yo medio miedoso agarré la taza y me zampé un trago y la señora lo notó. Y sin darme tiempo para decir algo del café me dijo: mira mijo, ese café es popular, todo lo que tú ves aquí es popular. Y la sifrina que vino a pedirme consejo me ilusionó tanto pero tanto tanto, que yo la convertí en la más popular y me contó su sueño popular. ¿Y qué soñó? pregunté intrigado y popularizado ya con el ambiente.
Bueno mijo, me dijo que soñaba con los buhoneros vendiendo plátanos y chancletas en el capó de sus limusinas y en sus humer vendiendo chemises y CDs piratas. Me dijo que soñó con vendedores ambulantes que tenían letreros en sus tarantines y decían los letreros “Juan del pueblo CA & Cía. Ltda.” “Josecito Pérez importaciones y exportaciones CA.” y otros por el estilo. Me dijo que en sus sueños veía a los abuelos y abuelas del populacho vendiendo acciones en la bolsa de Caracas. Que los taxistas ya no se llamarían taxistas sino limusineros. Que los albañiles tenían ayudantes gringos, alemanes y españoles. Y me prometió popularizar mi trabajo con oficina en el Hilton de Caracas.
Popularizado yo con tanta popularidad, pagué la vista de las cartas y al menos me contenté al saber qué significaba el capitalismo popular. Más todavía me pregunto cómo llamarlo. ¿Capitalismo popular? ¿El popular capitalismo? ¿Capital y populacho? ¿Capitalismo popó-lar? ¿O cómo es la cosa?
*Periodista
¡Venceremos!