La imitación parece el recurso más novedoso de los señores opositores quienes hoy día no han podido convencer (engañar) al elector, y es que el pobre es un hueso duro de roer para los señores capitalistas. Es evidente que el marketing publicitario no resulta efectivo a la oposición en momentos de campaña, por lo que ahora ven en la imitación la posibilidad real de influir mediante el engaño y la emulación del discurso revolucionario sobre las rebeldes mentes culturalmente chavista.
Llama poderosamente la atención como luego de tantas elecciones perdidas por la oposición al fin han encontrado la mejor campaña; ¿Psicoterror? No, ¿guerra de cuarta generación? No, resulta claro que la campaña más efectiva de la oposición en los últimos años es la imitación; así es, la imitación del discurso revolucionario y las tácticas de la maquinaria roja le han brindado a la tolda burguesa una contundente influencia sobre el electorado. Hemos visto como se chucean los temas promocionales de los partidos de la revolución, los símbolos, las consignas, se atribuyen los logros del gobierno y ahora con no tanta sorpresa vemos como estos oportunistas de la vieja política han tomado como suyos las bases de datos del 1 x 10 y hasta se dan el lujo de llamar a cada integrante de las patrullas en un intento desesperado por chulearse la movilización de la maquinaria chavista, aunado a esto cumplo con informar a la opinión publica del chavismo que la oposición está tocando luchadores sociales de los frentes revolucionarios y otras organizaciones de base para captarlos, utilizarlos y luego desecharlos como es su costumbre.
Pero aunque parezca una simple campaña electoral (y en esto creo que la dirigencia chavista luce peligrosamente apática y descuidada) no podemos quitarle la atención a semejante adefesio que es un burgués disfrazado de pueblo.
Todo está ocurriendo mientras algunos de nuestro lado están pensando aun en si participan o no en una campaña electoral que ya termina.
Perder las elecciones no es tan dramático, como perder la revolución. Ellos, los señores capitalistas han logrado filtrar las capas del estado revolucionario y tienen ya en construcción un estado “para lelo” que dicho sea de paso controlan la economía e inducen la inflación con el objetivo bien definido; desmontar el estado. Debemos tener claro que si la revolución no elimina el estado burgués ellos al contrario no dudaran en eliminar de un zarpazo el estado socialista que por temor al que dirán no termina de nacer.
A ellos –los capitalistas- les digo que hacen bien en imitar al chavismo, es buen ejemplo a seguir, ojala imiten también los valores de la cultura chavista, su filosofía, su ideal, para que un mundo mejor sea posible, pero además sepan nos deja muy bien parado que alguien nos imite en un intento por ganar, ese solo hecho nos convierte en ganadores.
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