El delincuente opositor Nixon Moreno, prófugo de la Justicia Venezolana durante casi siete años, reapareció públicamente este lunes en la ciudad de Mérida, acompañado por el otro delincuente Williams Dávila, quien dijo que la mayoría opositora que controla dos tercios de la Asamblea Nacional aprobará una controvertida ley de amnistía para políticos presos y exiliados, aun cuando se oponga el presidente venezolano Nicolás Maduro. ¡Este si no esta loco, se fumó una bosta de vaca!
Creo en Nixon Moreno, primer estudiante graduado en una Nunciatura Apostólica, ubicado en Caracas, que funge como sede diplomática de la santa sede del vaticano.
No Creo en Nixon Moreno, que por razones personales y de "seguridad" se fue a unir con los suyos, que no son otros que, los delincuentes prófugos de la justicia venezolana, que han desangrado a Venezuela y que se encuentran radicados en Miami.
Creo en Nixon Moreno, por agradecer el trato de "mayor respeto y dignidad" ofrecido por la delegación diplomática del Vaticano.
No Creo en Nixon Moreno, por ser un títere del imperio norteamericano igual que el partido político de la cúpula eclesiástica venezolana, y la Nunciatura Apostólica en Caracas.
Creo en Nixon Moreno, por estar acusado por la Fiscalía venezolana de homicidio intencional simple, en grado de frustración a un funcionario policial y de actos lascivos violentos contra la policía Sofía Aguilar en grado de cómplice necesario.
No creo en Nixon Moreno, por ser tan cínico, al llegar a Mérida y dar una rueda de prensa, como si nada, después de estar prófugo de la justicia venezolana, por intentar asesinar a una mujer merideña.
Creo en Nixon Moreno, porque estará siempre al lado de los fascistas.
No creo en Nixon Moreno, porque es aborrecido por mujeres, hombres, niños, simplemente porque su Cuerpo, su Espíritu, su Alma, están poseída por el Imperio.
Creo en Nixon Moreno, por no pagar en efectivo, y pagar con especie el alquiler de la habitación neoliberal de la Nunciatura donde habitó desde marzo de 2007.
No creo en Nixon Moreno, el que forzando uno de los cortinones de salida de la residencia de la nunciatura, salió clandestinamente en el curso de la noche hacia Perú, huyendo de la justicia venezolana.
Creo en Nixon Moreno, aquel que se excuso en reiteradas ocasiones como víctima de una persecución política, para libremente cometer sus fechorías.
No creó en Nixon Moreno, por ser un sádico capaz de desnudar a una mujer humilde bajo amenazas de muerte y agavillado con otros "estudiantes" delincuentes.
Creo en Nixon Moreno, por ser un parásito que duro diecisiete años en la ULA, a punto de jubilarse, antes del fraude cometido por la nunciatura para su graduación.
No Creo en Nixon Moreno, por ser un bizarro, que los medios golpistas, mostrando una vez más su torpeza, intentaron convertir en héroe.
Creo en Nixon Moreno, porque es un vulgar delincuente, que le espera la cárcel, que es el lugar natural de los sádicos y asesinos
No Creo en Nixon Moreno, por ser prófugo de la justicia venezolana, por andar huyendo cobardemente, por ser incapaz de afrontar la responsabilidad por sus hechos. Y por estar amparado por el imperio norteamericano, la Nunciatura Apostólica y la burguesía parasitaria venezolana. Amen
Solo el pueblo salva al pueblo.
Patria Socialista o Muerte… VENCEREMOS.