Colombiches, venecos, sudacas, palabras comúnmente utilizadas para referirse despectivamente a los venezolanos, colombianos o sudamericanos el el caso de Europa (España). Hay quienes piensan que la palabra en sí, no es ofensiva, sino la forma como se utilice, otros incluyéndome entre ellos, pensamos que el solo hecho de pronunciarlo ya es peyorativo, y si lo unimos al momento que está viviendo Venezuela, pues nos queda clarito cual es la intención al decirlo. ¿Podríamos nosotros pensar que Ocariz usó estás palabras en señal de afecto? O que cuando habló de los negros sudados, era una forma cariñosa de referirse a ellos? Eso nos aclara porque tiene el Municipio Sucre en tal abandono. Gran parte de la población petareña, son colombianos, y muchos de ellos negros, ¿Qué pensará hacer el heredero de la supremacía blanca ante esa situación? Hundir más el Municipio si llega a gobernador, sería como llevarlos a una muerte anunciada. No es la primera vez que estos personajes demuestran el desdén por todo lo que huele a pobreza, a pueblo, y por si fuera poco muestran su lado despreciable; el racismo, que tampoco es nuevo para ellos, lo tenemos aquí cerquita y fresco en la memoria, ¿Cuántos blancos quemaron vivos en las guarimbas y quienes apoyaban estos actos aberrantes?. ¿Cuántas veces se burlaron de los desdentados de Chávez? ¡Por Dios que nos asombra!, por el contrario a muchos nos molesta que hayan personas humildes que les sigan votando, y que se presten para declarar a favor de ellos, que primero: No conocen la pobreza, y segundo: Después de darles un abrazo para la foto, los llaman hediondos. Tomaré las palabras del candidato a gobernador Rafael Lacava, pareciera que a la gente le gusta que les estén dando palo carajo. Esperamos que este insulto cariñoso de Ocariz hacia nosotros pueblo humilde, no importa el color ni la nacionalidad, haga despertar a muchos, que todavía andan buscando líderes en ese sector..
A Chávez también le pusieron mil apodos, ¿Por qué? Por ser zambo, pero un zambo que ninguno de ellos pudo ni podrá igualar, en inteligencia, sabiduría y personalidad. Un zambo libre que nunca se arrodilló ante nadie para hacerse notar, que nunca se fijó en colores, ni nacionalidades, apoyó y ayudó a todos por igual. Y a cuatro años de su partida física, todavía los sigue teniendo tan locos como antes. Todavía se siguen preguntado ¿Qué tenía ese zambo, que logró enamorar a media humanidad?
Chávez tenía algo que ellos jamás podrán tener, y es humildad, humanismo y muchos deseos de un mundo mejor, con igualdad de condiciones. En cambio los políticos que rechazan la nacionalidad y desprecian el color, siguen apegados a ese sueño imperial, de supremacía, a creerse superiores, a sentirse con derecho a asfixiar a muchos, por defender los intereses de unos pocos. Más sin embargo están claros que necesitan de esos rechazados para poder mantenerse en el poder, aunque parezca ilógico, pero sin ese pueblo, humilde, pobre, negros y colombiches como Ocariz los define, ni él ni lo suyos, podrían aspirar puesto político alguno. Somos nosotros los que cometemos el error de darle poder a quien luego será nuestro verdugo.
Y lo más despreciable de todo, que con todo y su actitud arrogante, con ese aire de colonizador, luciendo su mejor estilo ku kux klán pide el voto y ofrece cosas que nunca otorgará.
Y por último. Ya quisiera Ocariz tener el honor de llevar en su sangre, un poquito de sangre, de nuestro ilustre Negro Primero.
