Las lecturas entre líneas de los discursos delatan la opinión y estrategias de la oposición. Es menester revisar cada planteamiento para desnudar sus pensamientos, estrategias y capacidades, porque guerra avisada no mata soldados. La oposición no es tonta. En el supuesto negado que ganara en las elecciones del venidero mes de Diciembre, debe crear estrategias para supuestamente desarmar la rebeldía revolucionaria.
El candidato opositor ha planteado un plan de seguridad, que ha sido trunco en su nivel inferior (gobernación), so excusa de falta de apoyo central también la complejidad delincuencial que trasciende los límites estatales. Además cita como causa a la dispersión institucional, aceptando de hecho la propuesta nacional de unificación policial, cosa que desdice en el transcurso del discurso en apoyo a la atomización policial en gobernaciones y alcaldías. Esto es congruente y encaja con una campaña de los medios de comunicación subrayando en forma sistemática los hechos delictivos como parte del fracaso de la gestión rrréégimen.
Ante la inseguridad del rrréégimen le salen al paso con un plan de seguridad. Pero ¿es un plan de seguridad solo para la integridad social? Es de seguridad, sí de seguridad que a ellos como en un supuesto negado gobierno no les va a pasar nada. Las premisas ellos la han dado a conocer, el amor al pueblo no es precisamente una de sus fortalezas. Las manifestaciones a través de los medios de comunicación en el proceso derrocatorio 2001-2003 desataron desde simples desprecios hasta nominarnos como lumpen, hasta con palabras altitonantes, agresiones y muerte de compatriotas.
Ellos suponen que la gente de los sectores populares que apoyan con votos a la candidatura de Chávez ha sido provista con armas por el rrréégimen. La otra premisa de su propuesta es que esta gente al tener una condición miserable que, según ellos, no se les quita a pesar de las misiones, cinco millones de bolívares les parecerá una fortuna. En conclusión, para seguridad y resguardo del supuesto negado gobierno de oposición, a los sectores populares hay que desarmarlos con una propuesta atractiva y que los convierta en amigos de su institución: cinco millones por el buche por cada arma.
Se acusa a la oposición de seguir patrones para reensamblar en nuestro territorio, de hecho fue el modelo de desarrollo industrial de los cuarenta años cuando mandaron. Evidencia de patrones monetaristas de los jefes extraterritoriales de la oposición existen. Amnistía Internacional recientemente ha acusado de “tráfico de terroristas”, indicando que la mayor parte de los secuestrados (“presos” para el gobierno de Estados Unidos) en Guantánamo, son capturados por enemigos de los talibanes aliados a la fuerza invasora de Afganistán, basados en la palabra del captor, a cambio le dan cinco mil dólares. Esta estampa de acabar con la inseguridad a fuerza de dólares, es una guía a seguir para su seguridad, comprando planes preestablecidos y auspicios aprobados del el Congreso de Estados unidos. La compra de armas del plan de seguridad opositor: una “Brattonada” más.