La mala leche barinesa
Octavio Marcelino José Parra Parada (Catire Parra)
No sería malo recordar que en los acontecimientos más importantes de la República, Independencia y Federación, Barinas aportó a estas causas contingentes de hombres, algunos con la estatura de los dirigentes caraqueños. El aporte en comida para las tropas prácticamente salió de nuestra región.
Sin contradecir el liderazgo en la actividad agropecuaria de nuestro estado, donde iniciaron un paro agrícola y utilizan cifras y problemas, que en muchos de ellos, concordamos.
El número y tamaño (ha) de las unidades de explotación en los sectores vegetal y pecuario, de acuerdo al registro único nacional obligatorio para productores y productoras agrícolas (RUNOPPA, 2015) muestra un total de 721.652 unidades de explotación, de las cuales 350.613 corresponden al sector vegetal y 371.039 al sector pecuario. 495.362 (68,65%) de las unidades de explotación de ambos sectores tienen menos de 50 hectáreas (ha); mientras que 8.620 (1,2%) propietarios, acaparan lotes de tierra con más de 1.000, 2.000 y 5.000 ha.
En el sector vegetal, 255.411 (73,27%) unidades de explotación tienen menos de 25 ha; y en el sector pecuario, 205.819 (55,48%) tienen menos de 50 ha. En ambos sectores, los campesinos pobres, semi-proletarios y pequeños productores, constituyen alrededor de 461.230 (63,91%) de las unidades de explotación del país.
Para el sector pecuario, en Barinas del total de explotaciones, 36,2% tienen menos de 25 ha y un 58,8% menos de 50 ha; mientras que para el sector vegetal, del total de explotaciones, 54,4% tiene menos de 25 ha.
Desde nuestro punto de vista la urgencia es revisar la tenencia de la tierra en nuestro estado, donde existe toda clase de contradicciones, que van desde el "rescate" de tierras adquiridas por el Estado y son echados pequeños productores. Otros casos, en abundancia, es la existencia de bandas disfrazadas de "campesinos", que luego de invadir predios agrícolas se negocian a lavadores de dinero provenientes del narcotráfico y la corrupción.
Esta anarquía, agregada a exagerados precios de los insumos utilizados normalmente en todas las unidades de producción pequeña, mediana o grande, repitiendo lo que muchos sufren.
En este sentido y a pesar de tener en nuestro estado instalaciones para generar electricidad, aquí vivimos de apagón en apagón, las colas para el suministro de gasolina y gasoil son descomunales y agregándole la guinda a la torta el robo de ganado y asalto a unidades de producción son el pan nuestro de cada día.
Tal vez somos el segundo productor de leche del país y tenemos instalaciones pasteurizadoras y fábricas de queso y sus derivados, privadas y públicas, en varias localidades de la geografía del estado Barinas. Aquí la leche se la pagan al productor el litro, aproximadamente, entre 600 y 1.300 bolívares y el pago es hecho a dos y hasta cuatro semanas posteriores a la entrega, igualmente a algunos les pagan con alimentos provenientes de entes gubernamentales, caso de referencia, aceite comestible a 15.000 Bs.S. y arroz y harina de maíz a 10.000 Bs.S.
La contradicción capitalista es que el consumidor paga, por ejemplo, la cantidad de 19.000 Bs.S. por 1800 cc (Parmalat) y otras pasteurizadoras locales la venden a 12.340 Bs.S Algunas de ellas en alianza con el gobierno local.
Tenemos la presunción que por la carencia de políticas agrícolas, el paro iniciado en Socopó, municipio Sucre del Estado Barinas y por la reducida cantidad de hectáreas cultivadas en el estado Portuguesa por carecer, los grandes productores de ese estado, de la semilla transgénica, y de la abultada cantidad de fertilizantes que usan indudablemente es una suma al paro. Y seguramente, otra región como la zuliana estará sufriendo las mismas calamidades que sufren todos los productores del país.
Tenemos entendido que Lácteos Los Andes tenía una capacidad instalada para producir leche en polvo de 1.300.000 litros diarios. Quién dará cuenta de esta empresa?. El señor Concho Quijada, en la finca El Choro, en Acarigua, producía 30.000 litros de leche diaria, nos dicen que ahora no llega ni a 300 litros diarios, qué pasará?.
Nos atrevemos a afirmar lo que siempre decimos: un país que no produzca sus alimentos es fácil instrumento de las grandes potencias.
El fracaso del modelo agrícola mundial que agrede al medio ambiente, ya que los pesticidas y fertilizantes contaminan la atmosfera en mayor proporción que todos los carros del mundo, es tanta la agresividad del cambio climático que los únicos que ignoran este problema son el presidente de los EEUU Donald Trump, por supuesto nuestro estado Barinas que era y es un desbastador de bosques con la complacencia de políticos ignorantes y una cojitranca justicia regional. Sería interesante que estos "políticos" se leyeran la encíclica papal del Papa Francisco "Laudato si" que enriquece el conocimiento del daño ocasionado a la humanidad con el modelo agrícola fracasado mundialmente con el uso indiscriminado de fertilizantes y agroquímicos que dañan al ser humano y a la Pachamama.
Por todas éstas y otras causas más, nuestra carencia de comida, en pocos meses será fatal y haciéndome eco del refranero popular: deseos no empreñan y unos publicitados programas agrícolas que no los nombro porque veo que han puesto un gran empeño en lograr un objetivo y me gustaría equivocarme y pedir disculpas por haber dudado que incapaces y corruptos sean exitosos y beneficien realmente al pueblo venezolano.
La mala leche es que los verdaderos productores agrícolas del campo venezolano, pequeños, medianos o grandes, se nos oiga, puesto que muchas veces el gobierno se reúne con los representantes de Fedecamaras disfrazados de federaciones agropecuarias.
La mala leche es que con corruptos e incapaces del gobierno y oposición nunca sacaremos la agricultura adelante.