No descalifico; sirvo a mi país

¿Quien podía en la IV-R tener la valentía de decir algo contra un Presidente o un dirgente adeco, o un ídem copeyano sin que los esbirros, primero de la Digepol y depués de la Disp no les hiceran una visita a su apartamento, su casita o su rancho con ánimo de aplicarle las mismas torturas que dicen ellos, los adecos, aplicaba Marcos Pérez Jiménez. No seamos inocentes y cobardes. tenemos, gracias a esta libertad de expresión que ellos niegan, que decir la verdad para que quienes aun andan atados a esos macabros partidos de oposición se despohjen de las cadenas.

Yo reitero ante cualquier tribunal del mundo que AD llegó al país a sembrar la inmoralidad y que junto a Copei formó una dupla cruel y asesina que no dejaba espacios a otros partidos politicos o gente que quisiera formar cualquier grupo social y democrático. AD fue artífice en callar las voces de los jóvenes en los años sesenta y la palabrita que inventó el criminal y metirosos Rómulo Betabncourt "disparo primero y averiguo después" no puede quedar solamente  como una mamadera de gallo: era tan cierta como que la señora Serra Carmona Presidenta del criminal partido adeco, vive un mundo utópico tratando de llenarle la cabeza a través de sus escritos en ÚN , al pueblo venezolano.

Cuando se marchó la SN con sus esbirros los venezolanos creíamos que la represión se esfumaba como su fétido aliento. Marcos Pŕez Jiménez desde Madrid se quedó estático cuando observó, gracias a sus medios de información, que el partido AD en el poder, creó una policía política que nada tenía que envidiarle a la Gestapo Alemana. Debo escribirles la verdad a mi gente, a mi pueblo por el cual soy capaz de morir si fuera necesario. No puedo permitir que estos criminales intenten cerrar la página de la historia desde 1959 hasta 1998, cuando llegó la revolución.

Vamos a estar claro: miles de hombres y mujeres que hoy militan en el PSUV eran de esos partidos, escuchaban a Rómulo, a Leoni, a Cap, a Lusinchi, a Velásquez y creían que esos hombres estaban practicando la democracia de verdad, pero cuando llegó Chávez y se comenzaron a ver las misiones, cuando se comenzó a observar que la cuota del presupuesto nacional iba con mayor énfasis para la gente de menos recursos, entonces  estos compatriotas gritaron al unísono que había llegado el verdadero líder que piensa en el pueblo, porque el pueblo es la base de la sociedad. No hay engaño, al soberano no pudieron seguirlo engañando los demagogos productores de las trapisondas más descaradas que se practicaron contra la patria bolivariana. Me gustaría que el señor Barbosa y la señora Carmona e igualmente el periodista Omar Pérez, me dijeran, ¿de dónde salieron tantas urbanizaciones al este de Caracas? ¿Vive allí el pueblo? "Con la verdad ni temo ni ofendo", dijo el pensador y es lo que hago.

Ellos siempre acuñan la palabrita: "resentido social" igual que la iglesia católica le dice a los feligreses que "al morir alcanzarán la gloria", ¿por qué no la alcanzan en la vida?  Les pido a mis lectores, perdonen que me los adjudique, que analicen con mucha atención las canciones del inolvidable Alí Primera: son gráficas de un tiempo , de un holocausto, creado por AD y Copei al pueblo venezolano. Por eso, siempre estaré en esta trichera, para difundir aquella masacre social e inhumana  que llegó a Venezuela escondida en el disfraz de una Caperucita, llamada ADELA DE COPEI Vulgares especímenes del engaño, la burla,  el timo la grosería,  la maldad.

Nos acercamos a un momento clave en la vida de la República Bolivariana. No hay temor, no existen angustias, creemos en la sabiduría del pueblo, en su madurez, en su inteligencia y en su visión inocultable de toda esta metamorfosis que ha venido viviendo la nación, después que la revolución, aupada por la mayoría llegó a la dirección de la patria, no hay vuelta atrás. Retroceder es volver a pisar el terreno de la grosería, de la abulia, de la indiferencia. El futuro es in situ. La patria nos pide sinceridad, confianza. La revolución Bolivariana es un hecho histórico, que nació de las entrañas del luchador más insigne del pasado. No caigamos en las barrabasadas de unos curas que al perder su poder económico, intentan ser dioses para adormitar mentes y provocar caos. Los curas son tan humanos como el cauchero que arregla una tripa, como el albañil que coje un remiendo, como el mecánico que arregla un motor; no hay en un cura alguna fuerza especial que nos lleve a pensar que proviene de una galaxia gloriosa, tiene que hacer su trabajo, encaminar la fe, y no envilecer al pueblo.

La lucha es dura; pero sin logramos que todo el pueblo y hasta aquellos que todavía se aferran al pasado criminal de AD, se unan en un solo proyecto que se llama patria, es posible que los demagogos de profesión, los farsantes y las farsantas que se valen de una página de un periódico  con fines intolerables para mentes lúcidas, se vuelvan sobre sus mismos pasos para que entiendan que ni AD ni Copei, ni los golpistas, Julios Borges, Blyde, Ocariz, Rosales, Mendoza,Serra Carmona, Barbosa, Pérez, Willian Ojeda, López, Radonski, Ravell . Granier, van a enturbiar el agua que ahora sale para todos de las colinas más grandes de la vida: la colina de la honradez

Dejemos que la historia continúe. Tengamos dignidad y no obviemos el pasado. Sí lo hacemos entonces no nos daremos cuenta que en 1958 fue el génesis para que comenzara una nueva vida en Venezuela, pero lamentablemente los trogloditas adecos llegaron con sus lágrimas y sus discursos de buenos profetas a mentir, a causar malestar, a embriagar a la nación con mentiras y aberraciones inmorales. Yo escribiré siempre sobre el tema, porque viví esa época y porque quiero que ustedes, hermanos, sin que por esto se vayan a inscribir en el PSUV, sepan quien abrió el nefasto prólogo de los Posadas Carriles, de las inmoralidades, del robo, del cuanto hay pa eso. Cualquier reclamo sin sello ni metáforas.
 

aenpelota@gmail.com



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Ángel V. Rivas

Limpiabota, ayudante de pintura, articulista, Productor Nacional Independiente, editor de El Irreverente. Animador del programa Gigantes del Romance, autor del libro Pacto Satánico y poeta en estado de frustración.

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