El otro trasfondo de las "cacareadas" reservas internacionales es que toda esa masa de dinero supuestamente represada en bóvedas extranjeras bajo el dominio imperial de Wall Street, como tal, significa una contracción inducida de la OFERTA de dólares, los cuales ha emitido la Reserva Federal de EE UU sin medida ni control internacional alguno.
Es bueno divulgar y aclarar de una vez por todas que la deuda doméstica de USA, o su propia "Deuda Pública Interna", no es tal, sino que es el artilugio político y financiero del que se han valido los gobiernos imperiales para acrecentar sin medida ni consideración alguna la tributación real que pesa sobre sus propios conciudadanos, los trabajadores norteamericanos, digamos por caso, y aparentar así con fines obviamente políticos que la carga tributaria teórica de ellos es baja.
Basta preguntarse, ¿acaso algún gobierno en funciones de EE.UU. se va a autopagar dicha "deuda"?; en el supuesto negado que lo hiciera, bastaría con solicitar un refinanciamiento para poder factibilizar contablemente dicha cancelación, lo que significaría reciclar la deuda y con intereses in crescendo. Se trata, pues, de simples sustracciones al Erario Público y evasión o distracción de dichos fondos para fines bélicos y de dominación imperial como los hechos lo viven confirmando.
De manera que , por favor, no darle el mismo tratamiento lineal a la Deuda Pública de USA (que es una artilugiosa manera de pechar al Erario Nacional), con la Deuda Externa Pública de los países súbditos y prestatarios de ese imperio. Es simplemente una máscara cuantofinanciera para esconder la perversa e incontenible tributación que el gobierno de este país aplica a sus súbditos
Si la Deuda Pública de nuestros países se cancelara, obviamente dicha oferta e inventario mundial de dinero en dólares crecería peligrosamente en contra de la paridad de esa divisa, ya devaluada en sí misma en buena parte, a pesar de este represamiento de su masa con el mecanismo de las tales, cacareadas e "inamovibles"Reservas Internacionales -a juicio de algunos Nobeles de la Economía burguesa-.
Aquí radica la otra verdad de las "ayudas" financieras que alimentan in crescendo esta inútil, para nosotros, pero vital para el imperio industrial a cuya cabeza está EE UU. Son esos países hiperindustrializados los que están saturados de inventarios industriales, son ellos los que necesitan darle empleo lucrativo a sus ociosas existencias que al no generar ganancias, dan pérdidas. Así es el capital burgués: o explota trabajadores o irremediablemente se pudre. Todo lo demás son cuentos de hadas debidamente editados y empastados en la bibliografía pseudoeconómica de Harvard y de institutos como el "IESA" de Venezuela, del cual, por cierto, son excelentes empleados algunos ministros como el devalucionista Nóbrega, entre otros servidores del actual gobierno bolivariano, aunque nos duela reconocerlo. Amor y que no quita conocimiento