"Voté por Keiko para que no nos pase lo de Venezuela", palabras de una humilde peruana que luego no supo explicar qué estaba pasando en Venezuela, repetía alocadamente "no quiero dictadores en mi tierra". Se le salió a la ciudadana peruana de ascendencia y vida muy pobre, la reciente xenofobia, aunque en arranque de sinceridad afirmó tener una vecina venezolana muy servicial y buena gente, pero afirmaba casi gritando que "los venezolanos están robándole puestos de trabajo a los peruanos".
La historia política en naciones al sur del Río Grande es lúgubre por la ignorancia sembrada y el cúmulo de politiqueros ladrones, corruptos, sinvergüenzas, tránsfugas, vendidos y arrodillados a los explotadores de USA –United States of América-. No superan la borrasca acomplejada del progringuismo que los acompaña desde el nacimiento, y la falsa ilusión de mejorar si se mudan a EE UU, donde sufrirán maltratos masoquistas, sin levantar la cabeza para no perder oportunidad de obtener la green card que les dará ciudadanía, como si la de su país de origen no existiese.
Más de ocho millones de votos por la nisei peruano-japonesa KEIKO princesa del mal, ignoran que Venezuela y otros 30 países sancionados ilegalmente por Estados Unidos, tienen muchas más dificultades que Perú para adquirir fármacos. Excluidos del sistema financiero internacional somos víctimas de medidas coercitivas unilaterales de extorsión y chantaje, exigiendo cambio de régimen donde no son sumisos a los EE UU. En el caso de las vacunas que cada peruano debe pagar, la Covax surge como aliado de maldad internacional.
Covax es el mecanismo de la Organización Mundial de la Salud OMS, para garantizar acceso equitativo a las vacunas. Venezuela ha explicado que de los pagos necesarios para adquirir inmunizadores anti-COVID-19, varios nos fueron bloqueados por el banco UBS, pese a que se han hecho desde el 13 de abril 12 transacciones por 109 millones de dólares y consta en documento suscrito por Santiago Cornejo, director de Compromisos con los países de Covax. El banco UBS bloqueó pagos y no ofreció detalles acerca de las razones.
Qué van a saber los votantes por la derecha que los explota y veja por ser pobres, que Venezuela el 31 de mayo pasado solicitó a Covax un reporte del estatus de la negociación y no hemos recibido lo pactado. No se preguntan los desasistidos de América por qué en sus países son negocio las vacunas, y en Venezuela es totalmente gratuita. En el interín la burocracia de la OMS se vuelve cómplice, el director de Preparación para Emergencias y Desastres aseguró que estaban asignando vacunas a Venezuela, que decidiría si aceptaba o no y fijar las cantidades.
Este 10 de junio las irregularidades de funcionarios de la OMS fueron expuestas en magistral intervención por la vicepresidenta venezolana Delcy Rodríguez, en la conferencia académica «Medidas Coercitivas Unilaterales: Irrespeto al Derecho Internacional y Generación de Graves Consecuencias Humanas», denunciando el bloqueo de fondos y la desigualdad en el acceso a las vacunas. Por cierto, el 87% de todas las dosis está en manos de apenas 10 países encabezados por EE UU, Washington pretende el objetivo de cambio de régimen en donde los gobiernos no sean sumisos a ellos y a sus aliados.
Agradecidos a Don Patrón por extraerles el fruto de su trabajo pocas veces bien pagado por el capitalismo sin conciencia ciudadana, no conformes con las supra ganancias que goza el capitalismo venezolano, si los ponen en el trance de corromperse y corromper son KEIKO, que buscan gestores como lo hicieron los integrantes de la Asamblea Nacional venezolana Poder Legislativo nulo del 2016 al 2021. Cuando lo comprendan los millones de estafados en su plus valía laboral, se acrecentarán los triunfos socialistas, bolivarianos y chavistas, cada vez menos temerosos de la inmunda bota capitalista que nos inunda.
