Planear Magnicidio perdón, conspiración perdón, golpe de estado perdón , desestabilización perdón, goloboterror perdón, terrorismo mediático perdón, desinformación al pueblo perdón, atentar contra la industria petrolera perdón, acaparar la comida y especular con los precios de los alimentos perdón
Ya basta de tanto perdón a todos esos hechos relacionados con una conspiración permanente, que se tiene en Venezuela desde el mismo momento en que se daba ganador al Cdte. Hugo Rafael Chávez Frías en las elecciones del 6 de Diciembre de 1998. Desde esta misma fecha se puede decir que son varios los abortos de conspiración que se han tenido en Venezuela, pasando por golpe de Estado, golpe petrolero, golpe económico, guarimbas, terrorismo mediático, desinformación y mentiras al pueblo diseñadas como matrices de opinión, canal de televisión convertido en partido político y un enjambre de mal informadores de la comunicación que ofenden a las instituciones e insultan y despotrican de nuestro Presidente sembrando odio y se comportan como defensores de los intereses de trasnacionales y de los EEUU. Sin embargo a todo esto pareciera que se tiene como norte un perdón, porque para algunos es mejor hacerse el pendejo y que todo siga igual, hasta que vuelvan a joder, la justicia parece que cuesta llegar y aquí como dice un refrán no ha pasado nada. Llegó la hora de que se recuerde un pensamiento de El Libertador que dice así: “Si a cada conspiración le sigue un perdón, a cada perdón le sucede una nueva conspiración”, o el que se refiere al castigo, sobre el cual escribe Simón Bolívar que: “El que hace una vez un escándalo, debe ser castigado para que no lo siga otro” de allí que se hace obligatorio que los propios organismos del estado encargados de hacer cumplir las leyes, lo hagan de verdad, basta de tanta blandura, de tanto guabineo, que pague por los platos rotos el que los rompe, pero que pague, todo aquel que atente contra el Estado, contra las instituciones, que participe en un golpe de estado, en guarimbas, que cause daños al patrimonio de Estado o que intente con un plan golpista acabar con esta democracia o contra la propia vida del presidente de la República Bolivariana de Venezuela, debe saber que tiene que correr con las consecuencias y asumir su responsabilidad, así como lo hizo nuestro Comandante el 4 F de 1992. Ante la gravedad de un plan de magnicidio para intentar segar la vida de nuestro máximo líder, debe investigarse esa matriz de mala información trasmitida por Globoterror, que busca desnaturalizar la denuncia hecha por Mario Silva, para que pierda efectividad el hecho ante lo condenable que debe resultar el mismo. Aquí tiene que tener metida la mano el imperio y esto no debe ser un secreto para nadie, de allí que algunos actúan como envalentonados porque para eso el Departamento de Estado Norteamericano invierte millones de dólares, de allí que no nos extraña para nada el comportamiento de algunos que dicen ser venezolanos, pero que lamentablemente están vendidos al gobierno de los EEUU y por eso se les califica de vende patria y de pitiyanquis. Ahora bien, ante tanta ambigüedad y perdón se impone la organización y movilización revolucionaria y que el pueblo y la fuerza armada Bolivariana y Revolucionaria implementen la vigilancia revolucionaria. La conspiración no ha dejado de tener cabida en nuestro País y ahora más que la Revolución de Venezuela se ha extendido por toda Latinoamérica, el imperio se las juega porque se le hace difícil la manutención de la sociedad norteamericana para los próximos 100 años, si no logra conseguir países sumisos y entreguistas que les regalen las materias primas que ellos necesitan y sobre todo lo que tiene que ver con energía y otros recursos minerales y energéticos que en ese país del norte no tienen, incluyendo ahora el agua, por eso el imperio no descansa. Aquí la hermandad y solidaridad de los pueblos de Centro América y América del Sur se impone como una necesidad revolucionaria para defender lo nuestro con dignidad y decoro como lo soñaron y pensaron nuestros libertadores. Basta entonces de tanto perdón y guabineo y que se castigue a los culpables de este plan de magnicidio. Por eso hoy más que nunca, todos debemos estar claros con la consigna de: “Patria, Socialismo o Muerte, Venceremos”.