Con una sonrisa cautivadora, no sé si cinematográficamente estudiada y practicada, pero ciertamente mejor que la de muchos de los mas prestigiosos actores americanos, con unos largos y ritmicos pasos y con un impecable traje oscuro, y animado por el sonido del carrillón del Ayuntamiento y las trompetas bellísimas que anunciaban "humo blanco" y un "habemus nobel prisen", apareció Obama a recibir incrédulo su Nóbel de La Paz. Su discurso fue como dardos guerreristas lanzados a las conciencias de los académicos del Comité quienes creen haberlo endulzado con el premio, y lanzas envenenadas en contra de quienes no se alinien con su gobierno, amenazas de usar la violencia para erradicar la violencia, el derramamiento de sangre justificado por lo que él llama MORALy, como amenaza eterna sentenciar que él no acabará con "el conflicto violento" durante su vida.
Él, el Premio Nóbel de la Paz, ante quienes se lo regalaron, dándole una bofetada al mundo, justificó todo lo que su "bendito imperio" ha hecho por estas calles de Dios : "Habrá momentos en que las naciones.....encontrarán que el uso de la fuerza no solo es necesario sino que está justificado moralmente." Y uno, un simple mortal, con la enseñanza de nuestros padres de no usar la violencia, con aquella frase metida en el coco de que "la violencia genera más violencia", se queda petrificado al oir de uno de estos adalides de la paz, tal expresión; hábil manipulador del discurso, mete en el saco a todas las naciones. Debió haber dicho " ha habido muchos momentos en que mi nación ... ha encontrado que el uso de la fuerza....."
Él, el Premio Nóbel de la Paz, acepta cínicamente el carácter violento de sus invasiones: "un movimiento no violento no podría haber detenido a los ejercitos de Hitler. Las conversaciones no convencen a los líderes de Al-Qaeda para que depongan sus armas." refiriéndose claramente al conflicto que ellos han originado en Afghanistán, en búsqueda de una organización llamada Al-Qaeda, responsable (según ellos) de cuanta explosión, atentado, secuestro, violación o desestabilización suceda alrededor del planeta.
Él, el premio Nóbel de la Paz, les miente a todos en sus caras, al decir que "Estados Unidos ayudó a reescribir la seguridad global....con la sangre de nuestros ciudadanos y la fuerza de nuestras armas." ¿Dónde Mr Obama? ¿En Irak? ¿en Afghanistán? ¿en Colombia? ¿en Pakistán? ¿en Guatemala? ¿en Nicaragua? ¿Dónde, Mr Obama, la fuerza americana ha sembrado la paz?
Los olvidos.
1.- Retórico, cínico, prepotente, desafiante ante el mundo, Obama no mencionó para nada lo que le incrimina y le hace in merecedor de ese premio: el reguero de Bases Americanas por nuestra América Latina que amenazan con usar la fuerza, justificada por esa filosofía de juguete de "las imperfecciones del hombre y los límites de la razón." ¡Por Dios bendito! Ahora este señor nos salió peligrosamente filósofo y da rienda suelta para que algunos locos mundiales se apoyen en las IMPERFECCIONES DEL HOMBRE Y LOS LÍMITES DE LA RAZÓN para cometer cualquier tipo de aberraciones. Pregúntele, Sr Obama, a todos los Colombianos a todos los Latinoamericanos si es verdad que ellos estan LIBRES DEL TEMOR y tienen la libertad para querer, y así, usted se dará cuenta que lo dicho en Noruega no tiene asidero.: "Porque una verdadera Paz no es solo estar libre del temor sino tener libertad para querer""
2.- Filosofó, coqueteó con el lenguaje, poetizó la guerra, pero para nada mencionó la situación en Afghanistán, que ahora con 30.000 soldados americanos más, seguramente estará llena y pletórica de PAZ; esos 30.000 hombres seguramente serán destinados a BUSCAR no se donde (porque ya todas las cuevas han sido voladas) a Osama Bin Laden y quizá lo encuentren algún dia, total, él cree que no erradicará el conflicto violento durante su existencia. Aunque creo que un día de estos saldrán con algun cadaver árabe, maquillado, para decir que es Osama Bin Laden, y así burlarse otra vez de la ONU, LA OEA, el Consejo de Seguridad, la Agencia Internacional de Energía, y de todos nosotros. Para mí, Osama Bin Laden es el HOMBRE INVISIBLE.
3.- Olvidó (a propósito) a Irak; no habló de la destrucción de toda una cultura de miles de años en Baghdad; ni mencionó los miles de mutilados Iraquies y americanos; no habló de las mujeres viudas, de los niños sin padre, de las madres sin sus hijos, de los niños sin futuro; no habló de las calles y avenidas destrozadas por su maldita imperfección y lo limitado de su razón.
4.-Se olvidó del criminal bloqueo a la noble Cuba que él, Premio Nóbel de la Paz, debiera FINALIZAR YA y así traer de regreso la armonía a la zona.
5.- No mencionó que es su Gobierno el mayor CONTAMINADOR del planeta y que ellos son los únicos que no firmaron el Protocolo de Kioto y que no harán nada por rebajar el uso de contaminantes.
6.- De Honduras y la injerencia del Imperio que él lideriza en el golpe de estado, nada, nada de nada.
Así acabó esa tragicomedia en el Salón del Ayuntamiento en la bella Oslo. Barack Obama cautivó a los noruegos, les mintió, les filosofó, les escondió la realidad del imperio, y se fué rápidito con su cheque en la mano. Dejó en el salón lo amenazante de su filosofía y lo amargo de su premio. Otros, tal vez otros, algún día estarán de acuerdo conmigo en la gravedad de sus palabras, que justifican la GUERRA y EL USO DE LAS FUERZAS y de LOS EJERCITOS, y EL SACRIFICIO DE LOS JÓVENES. ¡ÉL, el premio Nóbel de la Paz, filosofando para la guerra!
(*) Prof:
IUTE. Ejido. Mérida