Todo indica que el gobierno bolivariano ha optado por negar la realidad como un mecanismo que les permite superar los problemas (creen ilusamente ellos).

• Si te haces el ciego, sordo y mudo ante las denuncias por la desaparición de Alcedo Mora, es probable que la gente se olvide de él, como lo intentó Lorenzo Fernández en 1973 (ministro del interior de Rafael Caldera) al dudar de la existencia de Noel Rodríguez y sugerir que podía haberse ido a Chile y morir durante el golpe contra Salvador Allende.

• Si te haces el loco ante los precios de las viviendas (de cinco millones en adelante las casitas más humildes en cualquier barrio del país), de los vehículos, de los electrodomésticos, de la ropa, del calzado, de la comida no regulada y de cualquier otra cosa imprescindible para que pueda subsistir una familia, es probable que el pueblo no se dará cuenta y seguirá votando por nuestro partido.

• Si finges no saber que el sueldo promedio de un educador es de menos de 10 mil bolívares, y una computadora cuesta más de 200 mil (herramienta imprescindible para todo maestro y profesor), puede ser que nadie se entere.
• Si se niega la existencia de Marea Socialista como corriente de izquierda que propone la rectificación urgente de muchas políticas de gobierno, pues terminará pareciendo que Marea no existe, y nadie se enterará que ordenamos al CNE negarle cualquier legalización como partido político.

• Si declaras frases radicalotas contra los rectores burgueses de las universidades autónomas, es probable que el pueblo bolivariano no se entere que por 16 años le has otorgado y aumentado cada año generosos presupuestos a esos mismos rectores, y tampoco nadie sabrá que por la ineptitud de diputados y ministros se han desperdiciado tres periodos de mayoría parlamentaria y no se ha aprobado una nueva ley de universidades (la vigente es la de Caldera de 1970), lo que ha conducido a las gestiones infinitas de estas autoridades burguesas que ya han duplicado su período y parece que se les permitirá morirse en el cargo de rectores y decanos.

• Si repites todos los días que este es un gobierno obrerista, nadie sabrá las intromisiones fascistas que viene haciendo el TSJ suspendiendo elecciones sindicales como la de Sidor, y tampoco se enterarán de las detenciones y persecuciones contra los líderes obreros clasistas y revolucionarios, como está ocurriendo con Marco García en la alcaldía de Libertador.

• Si insistes todos los días en la pretendida unidad de la dirigencia psuvista, nadie se percatará de las profundas divisiones, de los grupos y mafias que pululan en su interior, nadie sospechará del encubrimiento que se realiza hacia funcionarios que todo el mundo sabe que son corruptos o ineptos y que deberían ser expulsados por el pueblo de las filas revolucionarias. Mantén la unidad, hasta que el tipo se vaya del país con su maleta de dólares, y ya no se pueda ocultar su mal desempeño en la administración pública.

• Si repites que este gobierno reivindica los derechos de los pueblos indígenas, la gente se olvidará del asesinato de Sabino Romero, Alexander Fernández y de una decena de líderes Yukpas que luchaban por hacer valer sus derechos constitucionales que consagró este proceso, y no exigirán que se haga justicia contra los asesinos materiales e intelectuales de Sabino.

• Si insistes en repetir que los problemas de escasez e inflación se resolverán en uno o dos meses, pues probablemente te pedirán el cargo al cumplirse ese lapso, pues todo lo que vemos a lo largo de la geografía nacional es el agravamiento continuado de todos los indicadores económicos.

• Si sigues diciendo que si hay colas es porque hay productos, en este caso, creo que el pueblo mismo terminará llevándote a un siquiátrico, para que no continúes repitiendo incoherencias.

• Lo mejor para el gobierno es negar la existencia de páginas como Aporrea, pues de esa forma se mantiene viviendo en Disneylandia y evita responder a las múltiples y masivas observaciones, denuncias y críticas que centenares de activistas bolivarianos de las bases populares escriben diariamente a través de este medio verdaderamente revolucionario.

Niega la realidad, miente descaradamente, sigue ejecutando lo contrario de lo que dices y de lo que está definido en el plan de la patria, ignora el llamado de Chávez al golpe de timón, mantente en el limbo que allí nadie te sacará de tu pureza revolucionaria y nadie podrá dudar de tu condición de "hijo legítimo de Chávez y prócer indiscutible" de la revolución. Dios nos agarre confesados.

Maracaibo, Tierra del Sol Amada. 12 de junio de 2015