En Colombia, la fuerza laboral es de 18
millones y solo hay sindicalizados el 5 % o sea unos 900 mil trabajadores; esto
debido a múltiples factores, entre ellos el hecho de que no existe un lugar en
el mundo donde el oficio del sindicalismo sea tan peligroso como en Colombia,
dicen que es menos peligroso ser guerrillero que sindicalista; para que tengan
una idea vean las siguientes estadísticas de dirigentes asesinados: Año:
2002:48, 2003:94, 2004:96, 2005:70, 2006:72, 2007:39; y lo que va del 2008: 28
Dirigentes sindicales asesinados; (Fuente: Escuela Nacional
Sindical de Colombia), en total; 2.312 trabajadores y trabajadoras asesinados en
Colombia entre 1991 y 2008, de los cuales un 97 % fue asesinado por actores
militares o paramilitares, con un 3% por la guerrilla u otros actores.
En la
última década, el movimiento sindical ha sido víctima de la más atroz campaña
de detenciones, desapariciones, torturas y asesinatos, decenas sindicalistas,
se encuentran desterrados del país, y otros desplazados de sus regiones donde
viven y laboran; podríamos decir que la historia comenzó en 1928, cuando el Ejército
colombiano al servicio de la Unita Fruid Compan, asesinó a varias
centenas de trabajadores que se encontraban desarrollando una huelga para
obligar a la empresa a discutir un pliego de peticiones. El 23 de febrero de 1963 se
repitió la historia, la empresa de Cementos El Cairo, ubicada en el Municipio
de Santa Bárbara, Departamento de Antioquia, ordenó al ejército por intermedio
del Gobernador de Antioquia Fernando Gómez Martínez, disparar a los
trabajadores que se encontraban ejerciendo el derecho de huelga consagrado en la Ley. Murieron 13 obreros y varias decenas quedaron
heridos. Durante el gobierno de Uribe, la masacre ha sido permanente, las
estadísticas que nos da la Escuela Nacional Sindical son patéticas; Más
alarmante aún, es que hasta el momento de escribir esta nota ninguna
investigación se ha realizado para encontrar a los culpables y mucho más allá
ningún organismo internacional se
prenuncia ante este genocidio, en ocasión de nuestra visita a la Organización Internacional del Trabajo (O.I.T) en la
ciudad de Ginebra – Suiza, vimos con mucha pena la indiferencia de este organismo,
que contrariando la posición de todos los representantes de los trabajadores
del mundo, quienes pedían que se llevara al gobierno de Colombia al banquillo
de la comisión de normas, encargada de revisar la aplicación de normas y
convenios suscritos en materia laboral ante ese organismo de las Naciones
Unidas, y por contrario en la 96
conferencia de la OIT el año pasado se ejecuto la propuestas de los empresarios
Venezolanos de llevar a Venezuela a esa comisión por supuesta violación de la
Libertad sindical, esta contradicción evidencia la decadencia de los
procedimientos de esta organización internacional, que es incapaz de pronunciarse ante un hecho terrible como
este, es increíble que sea el propio congreso Norteamericano el que reaccione
retrazando la aprobación del TLC con
Colombia hasta tanto no se determine las causas y los autores de estos
asesinatos, es importante que la dirigencia sindical del mundo se sensibilice
ante esta tragedia que viven los compañeros de Colombia, desde La Unión de Trabajadores Bolivarianos del Estado Falcón-Venezuela, Levantamos nuestra voz de
protesta ante los asesinatos, persecución y reprensión a los dirigentes
sindicales de Colombia y de cualquier parte del mundo.
(*)Francisco García.
Dirigente Sindical Presidente de UTRABEF