La elocuencia nacionalista independiente de un digno Ministro de República Dominicana le propina una soberana bofetada, al presidente quisqueyano Luis Abinader quien postrado a Washington recibe lección de coraje por uno de sus más cercanos colaboradores titular del Despacho de Políticas de Integración Regional, Miguel Mejía, quien expresó "Ninguna fuerza exterior, por grande o poderosa que se considere o que sea, tiene el derecho de inmiscuirse en los asuntos de otra nación soberana"
El repudio se dio luego de las expresiones de Luis Abinader el Jefe del Estado, firmando una «Declaración conjunta sobre Venezuela» junto a la Unión Europea y una veintena de países liderados por Estados Unidos cuestionando resultados publicados oficialmente el 2 de agosto 2024 por el Concejo Nacional Electoral. Para Mejía la decisión del jefe del Ejecutivo dominicano fue un error, actitud propicia a caer en "una posición de injerencia restándole autoridad para abogar por la paz y el buen entendimiento con los venezolanos".
El documento firmado el 16 de agosto en Santo Domingo, realiza además una serie de exigencias en cuanto a la publicación de los resultados, sobre los cuales la oposición de extrema derecha venezolana e internacional sin tomar en cuenta sino su plan desestabilizador, se arrebuja como es costumbre bajo las enaguas de su madre patria gringa. El ministro Mejía señaló "cualquier insatisfacción del gobierno o la oposición son asunto a ser gestionado dentro del marco de normas y leyes en soberanía absoluta. Ninguna fuerza exterior, por grande o poderosa que se considere o que sea, tiene el derecho de inmiscuirse en eso".
Puso en relieve que, los partidos de oposición participantes en la contienda aceptaron como árbitro al Consejo Nacional Electoral, por lo cual si los resultados no son favorables a ellos no pueden venir a desconocerlo porque ellos le dieron legitimidad al participar del proceso electoral y el organismo de arbitraje de común acuerdo con todos, aceptaron es, el Consejo Nacional Electoral. A criterio de Mejía, el presidente Abinader "debió preservar y no comprometer al pueblo dominicano en una visión particular de él", tomando partido del lado de los opositores" a Mejía sólo le faltó agregar lo descarados y vende patria pitiyankys ciudadanos del poder con apellidos clasistas en Venezuela, encompinchados con el bandidaje internacional y nacional autor de atentados contra la vida del Presidente reelecto Maduro Moros.
"Esa parcialidad compromete al pueblo dominicano, y eso no es el sentido del pueblo dominicano»", insistió enfático el Ministro Mejía, el posicionamiento del primer mandatario Luis Abinader puede llevar a «una ruptura de relaciones diplomáticas entre los dos países y los naciones amantes de la paz deben abogar por soluciones pacíficas dentro del marco de soberanía e institucionalidad, sea el diálogo, sea la parte diplomática y abogar por un proceso de paz y de buen entendimiento".
Por algo la dignidad y soberanía venezolanas superan a favor de Maduro su reconocimiento oficial en las respectivas naciones y lo han hecho saber, al CNE y a la Venezuela republicana e independiente aplausos, los escuálidos incorregibles mostrarles su reiterado descalabro diario, ocultos y arrebatados entregados a los desinformadores medios sinvergüenzas y manipuladores, convertidos en medios vergonzosos al servicio de yankylandia, más de cien países reconocen la reelección de Maduro con algo más de un millón de sufragios de diferencia con el candidato preferido de la oligarquía y el imperio gringo, EE UU a no dudarlo les dará el premio de tratarlos como he dicho en anteriores ocasiones, tirarlos a la basura por estar los U S A necesitados del petróleo venezolano, el más cercano a las costas gringas.
Venezuela, es decir, el gobierno presidido por Nicolás Alejandro Maduro Moros, no solo realiza manifestaciones multitudinarias diarias de apoyo pacífico a su gestión, sino que, responde a ese centenar y pico de gobiernos que, en la ONU, reconocen a Maduro reelecto y a las reglas perfectamente legales de nuestra Carta Magna bolivariana aprobada años atrás por el pueblo en votación, donde se establece un mes para dar el definitivo resultado, (hasta el 28 de agosto), lo cual por cierto cumpliendo con la revisión y auditorías de las cajas de votos, hace el Tribunal Supremo de Justicia en análisis comparativos con los sufragios emitidos, la presencia de observadores extranjeros y venezolanos; más democracia imposible sin los desquiciados escuálidos hipnotizados por la mediática nacional e internacional de la derecha.