Los sueños de oposición venezolana constituyen un enigma para el país, ya que nadie sabe acerca de la inversión dada por Estados Unidos a favor de una destabilización ideológica y, así darle paso a una colonia extranjera, controlada por los viejos dirigentes y de paso junto a un colectivo anacrónico que solo percibe una subestimación de los sectores populares. Es un tema para debatir, las locuras del abogado Henri Ramos Allup para enseñarnos como se sentencia a un presidente acudiendo a preceptos religiosos sustentados por algunos fanático protestantes y, quienes desean sustentar los designios del poder. Simplemente, nos encontramos frente a un método de oscurantismo del deseo de optar al control del poder popular. El discurso es fatalista y los dogmas capitalistas constituyen un falseo de una realidad que ya no tiene la posibilidad de una rectificación. En el fondo del asunto, los opositores a Chávez no desean salir de ésta guerra contra el oficialismo, les ha dado resultado éste ataque verbal, para excluir la base política de las antiguas facciones partidistas. Las organizaciones, solo la controlan ellos y se encuentran presididas por ellos. El pueblo opositor no tiene en lo absoluto una participación ideológica.
El Proyecto Bolivariano, nadie lo detiene. Se encuentra en evidencia desde 1975 y, esta conformado por una pluralidad de personas – derecha e izquierda- que se encuentran alejados del poder y solo escriben sus teorías para implementarlas con estrategias políticas, asentadas a una opinión común líderizada por el Comandante Hugo Chávez Frías. Muchos de éstos seguidores están en silencio. ¿ Contradicción ideológica?. No. Respetan los principios democráticos y reconocen que el Capitalismo como método debe romper con su propia estructura económica y avanzar hacia el Socialismo del Siglo XXI, donde existen unas concepciones del mundo anglosajón ya climatizadas, teniendo presente el nuevo orden mundial
Los sistemas políticos en Venezuela se están integrando en una sola cosmovisión, donde, el clima político parte de una utopia hacia una estructura organizada de poder. Allí, se articulan ideas extensibles a una realidad para concebir un Estado de Derecho. Es la manera como se alimenta el sistema, hasta lograr parir al nuevo Estado con un estamento popular, solamente que a los súbditos hay que enseñarles ideología.
El Proyecto Bolivariano concibe la libertad como un bien colectivo, tiene sus bases en Las Comunas y los pilares centrales en el Poder Popular. De esta manera, el presidente puede movilizarse en los centros de poder sin dificultad y restablecer el pluralismo en el país, una vez establecidas las fuentes del poder, con la participación abierta del pueblo Es un conjunto de acciones que interpretan un sentimiento común reflejado en Las Cartas del Libertador Simón Bolívar.
Por eso, los gerentes corporativos que activan las Misiones y los centros de operatividad energética como Hidrología, Corpoelec, el gas y Petróleo deben respetar los decretos presidenciales y cancelar en el tiempo previsible dado por el Presidente. En este caso, la figura presidencial no puede ser burlada, ya que estamos en un Estado transitorio que verá su primer fruto en el 2012. Es una lucha férrea, donde la figura de los alimentos y el comercio son los valores de una Sociedad Mercantilista. Hay que batallar para romper con esta barra metalizada del Método Capitalista.
Esto lleva su tiempo, pero, sin ideología no se hace nada. Las Librerías del Sur venden textos económicos que nos dan a entender una realidad continental y los seminarios que dan algunas academias especializadas.
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