Verdaderamente tengo mucho coraje. Es decir mucha arrech…
(*)Médico Gastroenterólogo venezolano / Vocero de la CONAMEV / felipeguzman17@yahoo.esPara
pocos es ajeno el esfuerzo y la tenaz lucha que hemos realizado desde
diferentes sectores progresistas de la vida político-social del país, la CONAMEV
y en particular mi persona, en contra de la burla médica, la perversión
fiscal, la aberración legal y la complicidad en el robo al pueblo
venezolano, que han representado y aun representan, los Certificados
Médicos de Salud Integral para Conducir (CMSI) vehículo automotor.
Pensamos que la promulgación de la Ley de Transporte Terrestre, por parte de la Asamblea Nacional el 1º de agosto de 2008, daba por contados los días de las fechorías a la Federación Médica
Venezolana y Colegios Médicos a nivel nacional, para seguir vendiendo
el CMSI, peaje para conducir vehículos; ya que esta Ley, en sus
Disposiciones Transitorias, numeral SÉPTIMO, contempla y cito: “El
ministerio del poder popular con competencia en materia de salud,
pasará a ser el órgano encargado de la expedición del Certificado Médico
de Salud Integral (CMSI) para conducir tal como está previsto en al
artículo 63, y dicho ministerio dispondrá de un lapso no mayor de dos
(2) años para realizar la implementación de la prestación de este
servicio, a partir de la entrada de vigencia de esta Ley. De igual
manera, durante este período de transición, la expedición del CMSI
estará a cargo de los colegios médicos regionales en coordinación con el
ministerio del poder popular con competencia en salud”. Esta Ley entro en vigencia el 1º de agosto de 2008 y el lapso dispuesto expiró el 31 de julio de 2011. Esto define
una vez en manos del estado, la gratuidad del CMSI.
Se
desbordó la canalla. La expoliación vil y fraudulenta que al pueblo y
al fisco nacional azota, no cesa. Recrudece. Con esta Ley se desató una
escalada de economía informal médica (buhonero@s médic@s en centros
comerciales, plazas, avenidas, verbenas, botiquines y pare de contar).
Así como también, el feroz aumento de Bs. 60,oo a Bs. 150,oo, por un
papel plastificado que miente sobre la salud del portador, ya que pocas
veces refleja la realidad. Reputando a cantidad de psicópatas, enfermos,
disociados y desquiciados para conducir impunemente un vehículo
automotor, debilitando la seguridad ciudadana. Sin olvidarnos que lo que
si robustece, son las agendas golpistas desde el gremio médico burgués,
engordando las arcas de estos gremialeros-guarimberos, contribuyendo
sustantivamente con la inflación, en un aporte mas, desde esta
expresión de la privatización de la salud asumida por la “sociedad
civil”, promovida con mas fuerza desde los colegios médicos, que son
quienes reparten con la FMV el botín desde ese funesto 1º de agosto de 2008. Esto sin hablar de los Certificados médico-psiquiátricos para portar armas.
Imagino que el Ministerio
Público debe estar haciendo en estos momentos las diligencias
pertinentes para determinar el destino de esta fabulosa recaudación
fiscal en manos privadas, ante la violación de esta disposición legal.
Sueño con que el Ministerio del Poder Popular para la Salud
no desestime, al Certificado Médico de Salud Integral para conducir,
como una de las puertas fundamentales para ingresar preventivamente al
Sistema Público Nacional de Salud, a casi la mitad de la población
venezolana.