Hemos insistido en varias oportunidades en alertar, sin resultados concretos, sobre la problemática que pesa sobre algunas empresas ganadas para la idea de reimpulsar el desarrollo económico de la región y que tanta falta hacen para el transito saludable hacia el socialismo. Saludamos en su momento la creación del Ministerio de las Industrias Básicas (MIBAN). Lamentablemente el Estado burgués y la burocracia enquistada en la CVG; echo por tierra cualquier iniciativa loable que este novel ministerio hubiese traído entre manos y a la larga se convirtió en más de lo mismo. Esperamos que no pase lo mismo con el recién creado Ministerio para las Industrias Básicas.
Es bueno que el gabinete económico dedique voluntad política y le ponga el pie en el acelerador al análisis y a la solución de las necesidades mas sentidas; fundamentalmente en la creación de ese andamiaje de empresas que le vendrían a dar valor agregado a la materia prima que aquí se produce. Tenemos el caso de TAVSA, de Tubos sin Costura, de Aceros el Alba, MINERVEN, FERROCASA, CABELUM, CERAMICA CARABOBO, CEMEX, IRON MINES, SIDETUR (que no termina de definirse su situación) ALCASA, VENALUM, etc. Existe por otro lado el Plan Guayana Socialista; elaborado para ser puesto en práctica en otros escenarios y con mayor viabilidad de llegar a feliz término. El problema actual es que estamos ante una dicotomía que no terminamos de dejar atrás como es el capitalismo que todavía nos acogota; ahogados por el marasmo y una crisis que poco hacemos para salir de ella. Además con una venda ante los ojos que no permite ver la realidad y una tendencia de maquillar y edulcorar informes que hacen llegar al alto gobierno; impidiendo de esta forma realizar una fotografía de lo que realmente esta pasando. Todo esto ha conspirado para que este Plan Guayana no hubiese allanado el terreno con mayor efectividad.
La medida ésta, de la creación de este Ministerio reclama con urgencia inmediata, rauda y veloz; un análisis empresa por empresa, costos de producción, como engranar cada una de ellas con las diferentes misiones y el proceso productivo. De qué manera cada una de ellas van a dar su aporte en el desarrollo de estas empresas aguas abajo. Manuel Figuera ya nos decía por este medio …”¿Por qué el aluminio de Guayana esta fuera de los planes de la misión vivienda? Es que acaso las mafias de las transnacionales in visibilizan el aluminio y las bondades que se pueden producir como perfiles para ventanas, puertas, vigas, laminas para techos y otros accesorios que componen una vivienda. La nacionalización del aluminio la entendemos como el uso de este metal por nuestro pueblo para que sea utilizado en transformar su entorno”. De ahí la necesidad y con carácter perentorio el estudio empresa por empresa.
La CVG debe desprenderse de una vez por todas de las empresas básicas, retomar un nuevo camino, desalojar de sus instalaciones la burocracia campante que la mantiene inmovilizada. Debe ser un organismo con otros objetivos. Debe incorporarse al desarrollo de Guayana. Darle otra connotación a esta parte del país. Mientras continúe siendo sostenida por los actuales pilares, no le auguramos un atractivo futuro.
Por ahí han venido apareciendo aquí en Guayana un grupo de individualidades, comprometidos con el proyecto de refundación de la Republica, dispuestos a asumir tareas concretas que están dispuestos a dar un paso al frente y cerrar filas a la orden del líder de esta revolución en defensa de las empresas instaladas en esta parte del país.