Hay que pensar en el país de una manera urgente para su recomposición y enfrentar la realidad para que la convivencia agrupe a los sectores desvanecidos y en situación de pobreza. Hay que tomar en cuenta la experiencia de quienes de una u otra forma ejercen su liderazgo en la comunidad para prepararlos al trabajo comunitaria y esbozar una nueva tesis de asociación para lograr la autonomía de los equipos y, que cada uno de ellos posean su propio sistema de autofinanciamiento. La ausencia de políticas y esquemas de trabajos organizativos, los han llevado a la indisposición y formulamiento de políticas públicas. Los paradigmas ideológicos se transforman en un contexto social, donde los grupos humanos, (primarios, secundarios), buscan puntos comunes de afirmación para cooperar con el nuevo cambio social que tiene un carácter global y, ese sistema comunicacional aminora la presión geopolítica y un nuevo país asume sus principios de crecimiento para lograr en términos aceptables el triunfo de éste proceso y el proyecto Simón Bolívar.
Nos enfrentamos a un acto gestual de la sociedad, debemos saber interpretar la capacidad de desarrollo de cada individuo para atenuar los conflictos y avanzar en la racionalidad del concepto fundamentalista de la concepción de un nuevo ideal lingüístico para conocer y saber utilizar la lógica en el pensamiento. Las actitudes han de gustar en factores positivos y cada colectivo debe trillar el camino en su género. En este caso, el dialogo es la mejor ruta para suponer el avances de una tecnología limpia y capaz de concebir un pensamiento único bajo un liderazgo común, asumiendo lealtad en el liderazgo común del líder que ejerce la función de comando y agrupa diversos sectores de la estructura social.
Los venezolanos somos de izquierda, Eso lo indica la historia, por eso el mensaje del presidente bolivariano y Teniente Coronel® Hugo Chávez Frías, resulta muy atractivo, el mensaje es claro, la igualdad social. El de la derecha es la libertad, pero en un ámbito netamente conservador. Ambos destinos tienen una orientación social basada en la lactancia materna, salud, educación y economía. De manera paralela corren en igual sentido, el suministro de agua potable, la vivienda y la seguridad. Hoy, tenemos una confrontación ideológica, pero, que luce vacío porque el movimiento de capitales daña la concepción de socialismo democrático y en el plano económico, la conciencia se hace menos participativa, resurgiendo organizaciones de centro derecha que aúpan el libre mercado en franco deterioro de la economía local. El sistema económico viene abrazando las corporaciones mercantiles haciéndolas gigantes y muchos de sus directores juegan a la traición política al carecer de ideología, las gobernaciones y alcaldías confrontan algunas alteraciones en su composición, lo que refleja coyunturas a resolver en un tiempo muy limitado y cuyo espacio se presta al oportunismo político e ideológico. Siempre, debe existir un signo de lealtad al liderazgo, la traición no beneficia a la lucha ideológica y social.
