El próximo domingo 7 de octubre, deberás elegir entre un modelo político Eco Socialista, que respeta y coadyuva a salvaguardar el Medio Ambiente, así como promueve: la inclusión social, el humanismo y reivindicar los derechos de la clase trabajadora venezolana; o por el contrario, alentar a ciegas ese infame modelo Neoliberal que sitúa al Hombre y la naturaleza, como una mercancía que rentabilizar para el usufructo de las empresas y trasnacionales que sólo les importa el lucro propio por encima del bienestar social de toda la Sociedad.
Ejercer el derecho al voto, más que una posibilidad es un privilegio en los caminos democráticos del Mundo. La búsqueda del consenso público genera un clima de libertad ideológica que se deja entrever al votar por la propuesta socio-política acorde a cada quien, siendo una fuente de racionalidad amén de la decisión electoral conllevada por los venezolanos. El Consejo Nacional Electoral (CNE), emerge como un árbitro capaz de generar el criterio veraz, legal y logístico, que garantice al pueblo el respeto a los resultados.
Como defensores de la Ecología, hemos visto el interés del oficialismo y su gesta revolucionaria, en crear políticas públicas ambientales, que van de la mano con la gente, al establecer una Teoría que legisle y una Praxis que infunda el "deber ser" en materia Pro conservacionista. La aprobación de leyes por la Asamblea Nacional, las Misiones “Verdes” y los mecanismos para denunciar oportunamente al infractor, son normativas ya descritas en anteriores artículos y que se erigen para evitar la Impunidad para con nuestro planeta Tierra.
En cuanto a las leyes, tenemos que nombrar la “Ley Orgánica del Ambiente” y la “Ley Penal del Ambiente”, ambos instrumentos legales que exhortan a los individuos a preservar los recursos naturales, cuidar el Hábitat de Vida y denunciar los hechos punibles. La “Ley del Agua”, hizo que el vital líquido se emancipara como un bien de dominio público no privatizable. Mientras que la “Ley de Bosques y Gestión Forestal” junto a la “Ley para la Protección de la Fauna Doméstica, Libre y en Cautiverio”, aseguran que nuestras áreas verdes no serán del libre albedrío ecocida y que la fauna criolla será protegida de quienes atenten su genuina paz.
A su vez, la Misión “Luciérnaga” y “Árbol Socialista”, han sido referentes en la necesidad de crear una cultura ecológica en la gente, mediante la colocación de bombillas ahorrativas en los hogares, campañas para no malgastar el agua, recuperar espacios deforestados y llevar el mensaje humanista y de inyección de valores a los privados de libertad, como mecanismo de reinserción social. También se cuenta con el 0800
AMBIENTE (0-800-26243683), una línea telefónica directa para denunciar cualquier delito ambiental que se presencie o sospeche.
En la actualidad, se traza un Plan Integral entre el gobierno de Hungría y Venezuela para resolver el problema de la Crisis Energética en nuestro país, mediante el transferir de energía solar fotovoltaica desde el país europeo hasta territorio criollo. El proyecto bilateral intenta generar una política ambiental cónsona con el cuido del Medio Ambiente, utilizando energías renovables y “amigables” para el planeta Tierra. Vale resaltar, que la iniciativa es subsidiada por el Tratado de Kyoto, al que Venezuela pertenece y tiene el aval del Estado Chino, como parte de las alianzas comerciales estratégicas entre las naciones.
Lograr un Desarrollo Ecológicamente Sustentable, requiere de la voluntad desinteresada de toda la ciudadanía, en generar cambios drásticos positivos en la interacción Hombre-Medio. El Programa Húngaro arrojará líneas de producción en Venezuela, que serán de provecho en la calidad de vida del pueblo, que a diferencia de la Energía Eléctrica tradicional, no deberán pagar mensualidades para disfrutar del servicio. Además, la energía Solar se puede usar en caso de un Estado de emergencia, que devenga por apagones o fenómenos de la Naturaleza.
Se espera que la implementación del mencionado proyecto, sea una verdadera revolución Eco socialista y potenciará el compromiso del Gobierno por un mundo más “verde”. Ya se han venido atesorando esos planteamientos, al incluirse la necesidad de “Salvar a la Tierra”, como parte de los Grandes Objetivos Históricos a consolidar por el Plan Bolivariano Pero, para que esas intenciones sean una agradable realidad, habrá que asistir todos juntos a la cita electoral del 7 de octubre y votar por seguir apoyando a una Venezuela ecológica.