El titulo de este artículo nos recuerda, sin lugar a dudas, al folleto del mismo nombre escrito por el genio de la teoría y práctica revolucionaria V.I.Lenin entre 1901 y 1902 y que se había originado precisamente como un artículo para el legendario periódico Iskra bajo el nombre: ¿Por dónde empezar?. En esta obra, que constituye un clásico de la literatura marxista-leninista, Lenin aborda candentes y necesarios problemas concretos sobre la forma y la táctica de una organización revolucionaria que trascendiera en sus métodos, consignas y principios el “economismo” paralizante para platearse de una manera absolutamente revolucionaria la necesidad del poder.
“Debían haber sido su tema principal los temas planteados en el artículo ¿Por dónde empezar?, a saber: el carácter y el contenido principal de nuestra agitación política, nuestras tareas de organización y el plan de crear, simultáneamente y en distintas partes, una organización combativa de toda Rusia”, nos dice Lenin en el propio prologo del folleto; sin embargo, debió en definitiva abordar el tema del “economismo” por el avance de este pernicioso elemento en el seno del movimiento revolucionario de la época.
Sin lugar a dudas esta obra de Lenin señala importantes rasgos de la socialdemocracia rusa, va perfilando el deslinde definitivo de 1903 en el Congreso del POSDR que abrirá paso al Partido Bolchevique (Comunista) que en 1917 tomará el poder como instrumento de vanguardia de la clase obrera para iniciar la era del transito del capitalismo al socialismo; y es precisamente el nombre y contenido de este importante folleto, a través de la profunda sencillez de su pregunta, quien plantea la permanente cuestión de todo movimiento y proceso revolucionario que hoy, como nunca antes en estos 14 años de proceso bolivariano, cobra enorme vigencia.
Es evidente que el momento por el que hoy atraviesa nuestro proceso político, debido a la enfermedad del Presidente Chávez, debe plantearse candentes preguntas para encontrar acertadas respuestas a los grandes retos que tenemos por delante en el corto, mediano y largo plazo; todos los revolucionarios apostamos, por humanidad y por necesidad política, al retorno del Presidente Chávez y a que este continúe al frente del poder ejecutivo nacional, pero los momentos vividos han hablado muy claro: debe constituirse cuanto antes una dirección colectiva revolucionaria del proceso bolivariano indistintamente del tiempo de recuperación del presidente.
Esta línea de acción, y materia pendiente del proceso, ha sido una solicitud y propuesta permanente de los comunistas venezolanos, ella permitirá abordar no solo el tema de los “relevos” en cualquier espacio que sea necesario, las ausencias imprevistas y por causa mayor, sino fundamentalmente servirá para atender planteamientos de fondo de los cuales hasta ahora sigue careciendo el proceso bolivariano para avanzar, con todo el potencial que tiene para ello, hacia estadios superiores en el surgimiento de una nueva sociedad.
El que hacer de esta hora venezolana, para los sectores revolucionarios, debe abordar también sin demora, y con grandes niveles de sinceridad, el carácter, el alcance, los métodos y el programa común de la amplia alianza patriótica que acompaña al proceso bolivariano; lo cual debe llevarnos de una manera eficiente y eficaz a enfrentar con mayores signos de éxito al flagelo de la inseguridad, el sabotaje contrarrevolucionario y oportunista, entre otras cuestiones.
Solo respondiendo de manera colectiva, aguda, profunda y revolucionaria a nuestro qué hacer estaremos blindando contra múltiples asechanzas al proceso bolivariano que es faro y esperanza de pueblos enteros en todo el mundo.
Militante del PCV
@edgarmelendez79