Trampas y más trampas prepara el comando electoral de la contrarrevolución para tratar de alterar los resultados de la masiva votación chavista en apoyo al camarada Nicolás Maduro este 14 de abril. En efecto dentro de la campaña sucia diseñada entre otros por J. J. Rendón desde Colombiana y de las letrinas y cloacas del terrorismo cubano/mayamero controlados por Jhon Negroponte, Otto Reich y Roger Noriega como representantes de la CIA y el Departamento de Estado en la conspiración contra Venezuela.

Desde las campañas a través del twiter, la mensajería de texto hasta la temeridad de sabotear el acto comicial depositando dos papeletas, los grupos de agitadores, el regreso masivo de los “exiliados” que viven en Miami, otros estados de la Unión norteamericana e incluso de otros países, muchos han sido y serán los intentos de sabotear el proceso.

Guerra de alta intensidad es la que se viene utilizando desde prácticamente el inicio de la campaña electoral comenzando con los ataques arteros del CNE, a su presidente, con la complicidad del rector quinta columnista Vicente Díaz, militante de la contrarrevolución. Pero ahora, ya finalizada la campaña, arrecia la ofensiva publicitaria de la derecha fascista no para repotenciar al escuálido candidato que todos saben derrotados sino para frenar, contener o desdecir el triunfo que el pueblo le va a dar al candidato de la Revolución, gritando ¡fraude!

La estrategia derechista tiene varias escalas o diversidad de acciones, una es tratar de mover al extremo sus votantes, trayendo incluso desde los Estados Unidos del Norte a grupos de escuálidos como los de Miami (los mismos que celebraron la muerte del comandante Chávez) quienes contaron con la “oferta” de pasajes de ida y vuelta de la línea Avior a precio de gallina flaca. De otros países arriban a Venezuela “exiliados” a reforzar el voto derechista.

No nos referiremos a la variante paramilitar y terrorista que viene siendo conocida, los grupos de mercenarios y terroristas salvadoreños que escondió Briket y Primero (In) Justicia. Los paramilitares colombianos apresados vestidos con el uniforme de nuestra FANB, con sofisticado armamento, explosivos C4 o los detenidos en la Base Aérea de Palo Negro en Maracay. Golpes contundentes al crimen internacional y faltan otros con seguridad.

Dentro de la tupida madeja golpista ya internacional está el diputado fascista boliviano Adrián Esteban Oliva, uno de los “líder” de la siniestra Alianza Parlamentaria Democrática para América Latina ADPA. A su lado está la ultra derechista y conspiradora diputada María Corina Machado. Esos siniestros personajes introdujeron el 8 de abril, ante el Consejo Nacional Electoral de Venezuela una carta exigiendo respetar los resultados electorales. Maniobra que busca crear una matriz de opinión que les permita este domingo 14 a la oposición venezolana cantar fraude, desconocer los resultados, imputar la legitimidad constitucional del presidente Maduro, ignorar las estructuras de gobierno venezolanas, fomentar el caos, provocar la violencia interna y desestabilizar a Venezuela.

A eso se agrega la internacional anti Venezuela reunida en la ciudad de Rosario, Argentina.

Es significativo que María Corina Machado haya estado en la ciudad de Rosario, Argentina, participando del evento ultra derechista convocado por la Fundación Libertad y a donde acudieron los más destacados pensadores neoliberales norteamericanos, ultraderechistas de las FAES, liderados con nada menos que José María Aznar. Todos, como es lógico, con apoyo de la CIA, que tiene allí a uno de sus más legítimos representantes: el tristemente célebre terrorista Carlos Alberto Montaner, y su segundona Adrián Oliva. En ese siniestro cónclave el tema electoral venezolano y la Revolución Bolivariana fueron el tema principal. ¿Cómo evitar el triunfo de Nicolás Maduro? se plantearon y ya se está viendo las líneas subversivas adoptados en la reunión de los fascistas apoyados por el gobierno norteamericano.

¿Qué otras tácticas de sabotaje electoral se plantea la derecha en día de las votaciones?

Tienen preparado una trampa que consiste en que sus activistas lleven una especie de copia de la boleta que arroja la máquina después que se ha sufragado que llevarán oculta en la correa del reloj o en otra parte, introducen dos boletas “pegadas” en la urna; cuando se dé el conteo de los votos emitidos y aparezcan más votos que los inscritos en esas mesas gritarán: “fraudes, “fraude”. Habrá un complot ya planificado con presidentes de Mesa, testigos, etc., todos militantes de la contrarrevolución.

En cuanto al uso de las redes sociales el comando derechista tiene todo un plan igualmente siniestro que busca el sabotaje del proceso. A ello se debe agregar y denunciar la abierta injerencia del gobierno norteamericano en los asuntos exclusivos de los venezolanos. La diplomática yanqui Roberta Jacobson, pone en duda la transparencia de los comicios del 14 abril y los caprilistas salen a las calles a hacerle el coro y a cantar fraude. No dice que se ha reunido con la derecha para actos de sabotaje eléctrico en el estado Bolívar, y de su gobierno proviene toda la estrategia subversiva que hemos visto en estos días.

La denuncia es oportuna, necesaria para estar alertas y conjurar la ofensiva derechista.


(humbertocaracola@gmail.com) (@hgcaracola) (Con Chávez, Maduro y la Revolución bolivariana, todo)