Una vez más, quedaron sellados los derechos inalienables, para afirmar que si estamos en una transición socialista. La alocución del Presidente Maduro la noche del miércoles 22 de enero del presente año, estuvo enmarcada en la vía de continuar profundizando la instauración de una revolución económica, social, política, ética y cultural. Las premisas socialistas, se vieron expuestas: defensa a la familia; fortalecimiento del salario; plan estratégico con bases científico- sociales, mediante censo para la protección de la seguridad social de la familia venezolana; la búsqueda de una optimización de la funcionalidad del sistema cambiario y su arquitectónica financiera. La derecha política internacional; la seudo inteligencia mediática; los académicos conversos a la derecha y la vieja dirigencia sindical-patronal del país; la oposición venezolana casi inexistente, se quedaron con los “crespos hechos” ante su sed de “caos social”, “noticias” de endeudamiento, “la devaluación” y el “paquetazo” que no llegará.
El Presidente Maduro, respondió con esto: incentivos a la Misión Alimentación para erradicar el desabastecimiento (33 obras de abastos bicentenario-pdval-mercal) en todo país; incorporación de 300.000 mil nuevos pensionados; aumento salarial (15%) a 5.622,47; incremento en las becas estudiantiles a 550.000 educación media y universitaria. Una parte del financiamiento externo irá en una significativa inversión en Infraestructura y vialidad como la culminación de la Línea 5 del Metro de Caracas; 5 Estaciones del Metro de Valencia y MetroCable La Dolorita; 57 soluciones viales y fábrica de autobuses Yountong. construcción de viviendas que alcanzaría 400.000 programadas para el 2015.
En cuanto a la optimización del sistema cambiario, se mantiene para el mercado de alimentos y el sistema de salud, como sectores prioritarios con un cambio de 6.30 y el Sicad I atenderá la base industrial y las fuerzas productivas, un tercer mercado, que girará en las subastas a través de la banca, las bolsas públicas y privadas.