Gracias, a las nuevas tecnologías en comunicación tenemos una gran oportunidad de comunicarnos. Más allá de los índices poblacionales, tenemos buenas expectativas para lograr buenas noticias y matizar criterios ante todo conflicto, porque nos manejamos bajo un solo concepto universal que es el capitalismo. De allí, la importancia de mover nuestra sensibilidad hacia otras magnitudes que moderen sus excesos o corrijan los defectos.
Venezuela, últimamente nos ha enseñado mucho, hasta llegar a las mentiras colectivas, en una campaña bien programada y publicitada hacia los pobres, solo espero la reconstrucción del país, porque muchos camaradas han fallado en su intento, eso, de inventar cobas ya no basta, los sistemas de redes sociales desbancan esos postulados.
No quiero sustituir mis sueños, basta recordarlos. Lo único impactante en mi vida es escribir en base a mis estudios filosóficos y tener a mano, los mejores docentes de la universidad complutense de Madrid, Juan Nuño y Federico Riu de la UCV de Venezuela, Javier Sasso y Pérez Esquivel, el nobel de La Paz, y otros que compartimos experiencias en el lapso 19879- 1985., en el curso de especialización jurídica.
Por esto, algunas veces pierdo el ritmo y veo a Caracas muy agitada, me parece una ciudad agitada, pero simpática, pero, me he dispuesto al diálogo en las colas, son ocho horas diarias en las mismas, investigando, son la misma gente que se reparte en cinco supermercados en mi ciudad adoptiva, Valencia. Lo que implica un diálogo repetitivo y espeluznante, nadie desea trabajar en las factorías, torrefaceras y empresas. Prefieren comprar a bajo costo un producto regulado para triplicarlo en precio al consumidor.
Veo al presidente Nicolás Maduro Moros, rompiendo el cristal de mi ciudad con sus discursos ambivalentes, pero, el país con sus recursos todavía no se encuentra despedazado y, estoy leyendo mucho la historia de Cuba y la agilidad de su actual presidente, Raúl Castro, en juntarnos de nuevo con estados Unidos, porque la hermosa isla caribeña abrirá sus puertas a las multinacionales y le ha entregado a España sus hoteles para que administre sus recursos en turismo y se esmere por la atención de sus visitantes.
Venezuela, es una vitrina para políticos y militares emergentes que utilizan al pueblo como carroña, utilizando su propia cultura, lo mantienen en colas de horas como arreo de mulas y es muy fácil culpar a la empresa privada de desconcertar al país, cuando muchas fábricas construidas por los iraníes, jamás han prendido sus motores y calderas en las plantas para ver a la luz un producto, salido de ellas, me pregunto, que pasó con Rualca? Deseo una respuesta.
En nuestro país hay buenos diseñadores, ejecutan buenos trabajos desde sus tiendas particulares, pero, preferimos importar y ganarnos una buena tajada de dólares a costa del erario público. El venezolano es muy inspirador como creativo, gente como la nuestra necesita multiplicarse en el país, antes de entregárselo a las troikas, carteles y paracos.
Por eso, es bueno leer e intercambiar ideas, hacer de la palabra una fiesta de lectura en nuestras juntas comunales y hacer encuentros de dirigencia política, escritores y pensadores, manejamos el concepto, pongamos en práctica las ideas del Comandante Chávez, Uslar Pietri y los documentos emanados por la Cancillería Venezolana cuando hubo el primer intento de reforma al Estado, el cuál fue iniciado por Carlos Andrés Pérez con la asesoría de la socialdemocracia internacional, cuya sede era Alemania. Sin egoísmo, Hugo Chávez Frías lo replanteó y prosiguió estas andanzas
Por lo expresado, el presidente Nicolás Maduro Moros, debe exigirle a sus contemporáneos del diseño lingüístico más afinación en sus apreciaciones, esta , por ejemplo, en lo cierto en el manejo de cajas en Farmatodo, pero, la gente que hace cola allí los fines de semana, se desplaza en la semana a los supermercados Madeirense y San Diego, excepto los jueves y viernes que están acantonados en el Kromi Market desde muy de mañana, dañando nuestras urbanizaciones, porque Pdval y Mercal no los surte de comida en sus campamentos, caseríos y urbanizaciones populares. El treinta por ciento,(30), de esta población cólera envía a sus familiares a Colombia y Perú con remesas y comida por vía terrestre.
Venezuela, llena de sueños y fantasías, desea otra piedra de la suerte y escuchar a la gente, esos ancianos que recorren la ciudad, llenándonos de historias, tenemos nuestras historias con arraigo popular, como en San Blas. Tenemos nuestra geografía.
Algunas veces, deseo irme a Cuba, muy cerca de París y Estados Unidos, me voy aponer de nuevo las chaquetas como signo de rebeldía, porque, éste Socialismo dirigido por anarquistas no lo quiero, me recuerdo a Juan Carlos Monedero, debemos levantarnos de nuevo bajo el verdadero Plan de La Patria y los escritos de Chávez Frías, y obviar estos parlanchines del país que anida al Estado hacia la injusticia, apoyemos a Freddy Bernal en su buena intención, montaron mi chevette sobre otro chevette, lo pintaron con mis piezas y un sopero tuvo más poder que un policía, quería llamar a la Ciptj, me dijeron que dejara eso así, que era un hombre de bien, allí toman licor, supuestamente viejos comisarios de ese cuerpo y ese es mi carro, pero no lo es. Acá avalan el delito, que hacemos?. Morir lentamente bajo la expansión extranjera y delictiva en el país.
El presidente Maduro, debe manejar otro discurso, los venezolanos somos ávidos, ya no ignorantes. Estamos frente a una realidad convergente de una acción política globalizada que vigoriza el delito en toda su dimensión.