Definitivamente que la política en Venezuela la han convertido en un gran negocio en perjuicio de las mayorías.
De nada vale diferenciar la política de la politiquería mientras la primera sirva de escalafón para el gran negocio. Un negocio donde el más insignificante ratero se erije por encima de la sociedad exhibiendo riquezas, autos importados, haciendas, avionetas, hatos, quintas y negocios de variadas especies.
La política como ciencia ha sido desvirtuada en lo más profundo del concepto. La política, dijera el maestro Luis Beltrán Prieto Figueroa es:
“un quehacer social o arte de dirigir por medio del cual la
sociedad entera alcanza los beneficios indispensables para la felicidad”
Practicar la política alegremente para lograr beneficios particulares no es un acto político propiamente dicho sino un acto de politiquería.
ser politico-dijo el maestro - es ser un hombre o mujer entregado al servicio de todos y comprometido con la realizacion de sus actos con el beneficio colectivo”
Tenemos así,al político y al politiquero; el primero entregado al servicio de todos y el segundo habilidoso para transformar aquello en un gran negocio para sí y su entorno. El gran negocio de vivir de la política sin importar un carajo la moral que tanto reclaman en la tribuna: “CON QUE MORAL FULANO “se gritan y acusan entre ellos como ladrón que huye entre la multitud gritando ¡¡Allá va el ladrón!!! ¡¡¡Agarren al ladrón!!!
“no puede la dirigencia politica mostrarse como ejemplo a imitar en lo que ha capasidad se refiere y ese divorcio de l a dirigencia y las instituciones lleva al pais por un despeñadero, y si en esa confusion pierde el apoyo popular lo unico que nos queda habra llegado la hora final para los partidos y de la democracia misma”
ironías politiqueras….esto no lo dijo el maestro prieto …jà, jà, jà, lo dijo el pelucón nicomedez zuloaga (alias el nico), al salir de la cárcel del junquito por ladròn 9-8-89.
“el reto del proceso es rescatar la politica del gran
negocio”