Los esquemas teóricos están acabando con el chavismo de tanto pragmatismo burdo para plantearse los problemas del país, hasta el financiero. De allí que muchos pensadores, preparados en la gavilleria de un local nocturno confeccionan a su manera la dirección del país, obviando el Legado del Comandante Hugo Chávez Frías.
La realidad de nuestra historia es obviada y la oligarquía venezolana es quién rige el curso de lo que por naturaleza siente el pueblo, los impulsos creadores de una cultura nueva se han paralizado en manos de quienes motivan un pragmatismo en las filas del chavismo, lo demás es ignorancia.
Estamos en decadencia política e ideológica, los cimientos del progreso nacional se desmoronan porque hay carencia de decisiones. Por ejemplo, el Consejo Comunal La Arboleda Florece incumple con su circuito de trabajo las metas que deben ejercer y los teléfonos enviados por Movilnet y los bombillos ahorradores son vendidos a terceras personas a un precio inflado que cae en la corrupción.
Esto, evidencia la caída del chavismo, no del Legado como tal, cada día menos personas asisten a las reuniones de ciudadanos. En los Centrales Madeirense de Carabobo, controlados por los sindicatos del chavismo, la corrupción es letal.
Los intelectualismos viciosos se constituyen en una especie de snobs, obviando los deberes sociales a que fueron llamados y por su parte crean una doctrina que afecta hasta la misma presidencia de la república, léase Nicolás Maduro Moros. Por lo tanto ser chavista es un peregrinar en colas y se constituye en una excelente fórmula para entender los mitos de Europa y la valentía de Cristina en Argenta para expulsar a los inmorales y la decisión de Santos de colocar en un muro a quienes no desean trabajar por la institucionalidad de Colombia y lo desplaza hacia Cúcuta y Maicao para que Venezuela, los mantenga.
Esto no es una novela, es una realidad. Hay una rebeldía por la ideología, para algunos, esto no interesa. Lo que interesa es las facilidades que proporciona el gobierno para bachaquear, más allá de las cédulas y el captahuellas, es una simple broma de internet y se cierra. Denis, tiene razón, el entusiasmo por el chavismo se pierde, no lo que teorizo mi Comandante, sino las prácticas de los Consejos Comunales y la desobediencia al pueblo, quién dijo que al pueblo se le daba poder, cuando estamos insertados por un número exagerado de extranjeros, reflexionemos sobre éste punto de la batalla del Sur.