Como candidato a la Asamblea Nacional con la tarjeta del Partido Poder Laboral y respaldo de Marea Socialista y MVR-200, considero que se incurre en tentaciones totalitarias cuando se quiere obligar a los electores a que voten por un solo tubo, como si la supuesta disciplina partidista fuera camisa de fuerza que impida que los electores ejerzan libremente su derecho de manera razonada. Debo recordar que el chavismo en ningún momento se concibió como una alianza de borregos, sino como la unión de clases explotadas que buscan construir el socialismo a la venezolana, por lo que resulta errático pensar que somos un rebaño de ovejas mansas que obedecen a un padrote. ¿O acaso olvidamos que fue el propio Chávez quien nos enseñó a no ser sumisos, acríticos ni perros falderos de nadie?
A mi modo de ver los escrutinios del 6D van a sorprender a quienes no quisieron entender que el chavismo crítico, insobornable y combatiente es como una procesión que va por dentro de la sociedad venezolana, y que será cuando el CNE anuncie los resultados que podrá conocerse que Chávez en ningún momento aro en el mar, que él nos quitó las gríngolas del puntofijismo y que sus enseñanzas estarán siempre por encima de las tumbas pues los pueblo nunca olvidan a sus verdaderos líderes. Y después no digan que no lo advertimos, pero todo parece indicar que esta vez prevalecerá el voto conciencia y no las imposiciones a dedo que burlan la autonomía de la voluntad.
En cuanto a ese grosero derroche en publicidad electoral, sostengo que en tiempos de vaca flaca, cualquier exceso en gastos de campaña es contraproducente pues termina convirtiéndose en un bumerang. También este modesto combatiente tiene sus razones para discrepar de los mensajes contenidos en la publicidad que a veces falsean la verdad, pues se inventan cualidades a candidatos que aún no calzan los puntos para representarnos en el parlamento, sobre todo en una Asamblea Nacional que tendrá una composición altamente conflictiva.
En otro orden de ideas, no oculto mi preocupación por el hecho que vamos a una contienda electoral en condiciones que no favorecen al nuevo sistema republicano, pues factores externos en complicidad con sus lacayos están aprovechando los efectos causados por una guerra económica que se reflejan en el desabastecimiento inducido por esa oligarquía golpista que no disimula su odio contra las conquistas sociales de la revolución. Sin embargo, queremos pensar que los venezolanos no se dejaran meter gato por liebre, pues saben que la MUD es solo un club de oportunistas que carecen de proyecto de país, y que solo reciben órdenes de Washington.
Cuando apenas faltan dos semanas para realizarse el acto comicial, se observa un reacomodo de fuerzas, pues importantes sectores de la vida nacional están convencidos que la polarización solo prolongaría esta pelea de perros y gatos que degrada el debate que debe existir en un país que abrazo el siglo XXI. Por ello, insistimos en que el 6D debe surgir una fuerza emergente que se preocupe más por resolver los problemas y que no derroche tiempo en inútiles discusiones bizantinas.
Igualmente, exhorto a los electores a poner bien la lupa sobre el tarjetón a la hora de seleccionar a los integrantes del nuevo parlamento, pues así evitaremos que se infiltren mediocres y obstruccionistas que solo se dedican a echarle más leña al fuego, en vez de comportarse como verdaderos demócratas, dando buenos ejemplos y respetando la majestad del Poder Legislativo.