La peor decisión que se está tomando en los temas productivos es no hacer nada. Así lo expresa una Camarada y experta en los temas industriales del país, al señalar que el Gobierno está tomando la peor de las decisiones al no hacer nada con respecto a los gravísimos y urgentes problemas que tenemos. Y aunque semánticamente lo que se quiere decir es que el Gobierno está haciendo nada, se comprende perfectamente la preocupación que se tiene en torno a la toma de decisiones. Por ejemplo, ¿para cuándo se va a dejar el aumento de la gasolina? ¿Para cuándo se va a reestructurar el Partido? ¿cuándo van a caer los que se llevaron gran parte de nuestras divisas? ¿cuándo van a terminar las amenazas a Lorenzo Mendoza para transformarse en acciones? ¿cuándo vamos a tener la debida transparencia en la información de nuestras empresas?
Aunque el Gobierno si esté haciendo muchas cosas, la sensación que se tiene en la inmensa población chavista es la de una parálisis alarmante. Dejamos la ofensiva hace mucho tiempo atrás y estamos actuando de manera reactiva, siempre detrás de la Derecha, quien paulatinamente se recupera luego de más de 15 años de derrotas. El Gobierno solo aparece para declarar lo que hará, pero muy poco, para informar lo que hizo.
Pareciera que se le olvida al Gobierno las grandes reservas morales y la gran disposición que tiene el pueblo chavista de acompañar a nuestro Presidente en acciones que permitan tomar nuevamente el control político y productivo de nuestra Revolución ¿Acaso el Gobierno no se da cuenta de que la inmensa manifestación del 4F o las concentraciones espontáneas a las puertas de Miraflores son gritos del pueblo que le dicen a nuestro Presidente que actúe que aquí lo respaldamos totalmente?
Si hoy el Presidente Nicolás Maduro convoca a todo el pueblo venezolano, hablándole no de lo que hará, ya eso lo ha hecho demasiadas veces, sino que lo convoca para anunciar medidas concretas y que además necesita que lo acompañemos en la defensa e instrumentación de las mismas, entonces puede estar seguro que obtendrá un rotundo respaldo, porque entiende que las mismas serían parte del legado de nuestro Comandante Eterno. Si el Presidente decidiera por ejemplo, el nuevo precio de la gasolina, la reestructuración del tipo de cambio, la caída de la página de Dólar Today, la territorialización de la distribución de los alimentos con el Poder Popular como protagonista de esa distribución, la diversificación de las reservas internacionales, la reestructuración inmediata y real del PSUV con separación del Gobierno del Partido, y si además establece acciones contundentes y ejemplarizantes contra la delincuencia, contra la corrupción, la impunidad y contra la conspiración, pues tenga certeza nuestro Presidente que recibirá el apoyo inmediato del pueblo en la calle, manifestando un total respaldo del poder popular.
El Presidente, haga lo que haga, o deje de hacer, siempre va a ser atacado por los medios de comunicación nacionales e internacionales. Entonces, ¿por qué no actuar? ¿esperamos a que las cosas se arreglen por si solas? ¿esperamos a que los grandes medios se convenzan de la justeza de nuestra Revolución? ¿por qué no se mete preso a Capriles Radonski o a María Corina, Mendoza, Borges y otros, si sabemos que mienten, conspiran y traicionan a la Patria? Ya el pueblo no quisiera ver más videos en VTV que muestren las mentiras y traiciones de estos personajes, el pueblo quiere verlos presos. Acciones, se requieren acciones claras, contundentes, ingeniosas y audaces que nos saquen de la inercia en la que hemos caído como Revolución.
