Para quienes no conocen el término que aparece en el epígrafe de este artículo les informo: un pudridero es el sitio o el local donde los antiguos y todavía en nuestra época, trasladaban o trasladan los cadáveres para que la naturaleza, a través de los gusanos necrófagos, realice su trabajo. A este depósito se transfieren los cadáveres para ser descarnados, es decir para que tales bichos dejen al infortunado finado en el hueso blanco y pelado. Algunos vetustos clanes, después de retirar del pudridero los restos del finado, quemaban el esqueleto y una vez reducido a cenizas podrían, en honor al difunto, ser ingeridos por parientes y amigos. En otras etnias los huesos eran convertidos en instrumentos musicales, por ejemplo el fémur se transformaba en una armoniosa flauta o en un mazo para tocar el tambor. Otras culturas, recolectaban los huesos del esqueleto y los colocaban en un cofre para rendirle los solemnes honores funerarios.

El más famoso de los pudrideros es el "real pudridero del Escorial", al cual se remiten los reyes de España una vez que abandonan el mundo terrenal. En ese sitio pasarán uno 30 0 40 años en la espera de eliminar los nauseabundos olores emanados por el real cadáver. Porque, aunque la gente no lo crea, los aristócratas muertos, al igual que cualquier mortal, también hieden. Una vez que el linajudo esqueleto está desodorizado se le envía a un hipogeo lujosamente ornamentado, posiblemente de mármol, para mostrarlo a los incautos turistas. Dejemos de lado, por los momentos los pudrideros, para retomarlos en un próximo párrafo.

Desde el momento del ascenso de Chávez al poder de una vez comenzaron las insolentes coaliciones para minar el gobierno de la revolución bolivariana. Una cáfila de políticos se alió para intentar el derrocamiento del presidente Hugo, en menoscabo de la tranquilidad de pueblo venezolano. La oposición conformada por los más sórdidos personajes de la política, por diversas vías, pretendió el derrocamiento y el fracaso de la Revolución Bolivariana. Era ineludible la "salida de Chávez" por cualquier vía. Utilizaron la huelga general, el paro cívico, el sabotaje petrolero, el intento de la huelga tributaria, la solicitud de renuncia o elecciones anticipadas, tentativas magnicidas, el malhadado firmazo, la deslegitimación del gobierno, el golpe militar, el bloqueo informativo, la guerra financiera, el referéndum, el insulto mediático (mico, gorila, caudillo, mesiánico salva patrias, demagogo autoritario, iluminado líder bolivariano, criminal totalitario, desgobierno, gobierno de buhoneros, populista, dictador castro-comunista, gobierno que secuestra los poderes…), movilización social insurreccional, denuncias en el ámbito internacional de crímenes de "lesa Humanidad"…Es decir, cualquier fórmula política constitucional o no, era válida para salir de Chávez y borrar su revolución del escenario político venezolano y latinoamericano.

En alguna parte leí, dado que mi cerebro degastado no es capaz de crear un aforismo de tal trascendencia, que existen tres tipos de hombres y mujeres: los(as) que hacen que las cosas sucedan, los(as) que esperan que las cosas sucedan, y los(as) que jamás se enteran de lo que sucede. Por fortuna Hugo Chávez perteneció a la primera categoría y por eso la Revolución Bolivariana de una idea se trasformó en una realidad.

En las hemerotecas, en los videos, en numerosos libros publicados, entre tantas evidencias encontramos corporaciones y homúnculos responsables de conspirar para derrocar a Chávez. Entre dichas organizaciones debo nombrar: la jerarquía de la Iglesia Católica, ciertos sectores de las universidades autónomas y privadas, empresarios, algunos sindicatos, medios de comunicación privados, y la llamada "sociedad civil". Todas estas instituciones y otras de carácter internacional (de EEUU, España y Colombia) se confabularon para acabar con el gobierno de Hugo. Se estaban fraguando los pudrideros de la política venezolana de donde emanaban y emanan aún los olores mefíticos.

Era necesario que el pudridero tomara forma y esto lo forjó la "coordinadora democrática (CD)", la cual congregó en su seno a ciertos partidos políticos, a fedecámaras, a la CTV, a ONGs, a comprometidos sectores de la iglesia y otros opositores cuyos único interés era la "salida de Chávez". Durante todo el tiempo las organizaciones acomodadas en la CD insistían en el final del mandato de Hugo sin importar la legalidad del mecanismo que permitiera su salida del poder. Para lograr este objetivo se valieron de los medios de comunicación en el ámbito nacional e internacional. El objetivo era minar el gobierno y materializar la caída de Chávez a través de una soterrada campaña difamatoria.

Como se podrá ver mediante este pequeño resumen la oposición no ha cambiado nada, las mismas tácticas y otras nuevas están utilizando para la "salida de Maduro", tal como lo sentenció el monstruo de Ramo Verde. Ahora disponen de una Asamblea Nacional y su gamonal, el adeco Ramos Allup, cuyo único interés no es legislar, sino acabar con el legado de Chávez en un tiempo perentorio. De aquellos pudrideros de la época de Chávez están resucitando algunos muertos, los palingenésicos están convencidos que ahora si van acabar con la Revolución Bolivariana. Por su mayoría circunstancial los opositores parecen unas quinceañeras que viven de pletóricas ilusiones. La experiencia no les sirvió de nada, no han cambiado una pizca.

Lamentablemente la MUD (antigua coordinadora democrática) llevó a la AN algunos gandules provenientes de la CTV, de AD y Copey, de fedecámaras, de las guarimbas, de los aberrantes medios de comunicación…También incorporaron a golpistas, empresarios corruptos, traidores, terroristas, entre otros, es decir, todos proceden de los inicuos pudrideros de la política nacional. Es evidente que la AN no legisla para el beneficio de todos los venezolanos sino para individualidades, para grupos económicos y para ciertos sectores que pretenden convertir a Venezuela en parte de una negociación. De allí que las primeras leyes introducidas en el congreso es la "ley estafa inmobiliaria" y la "ley del autoperdón o ley de la amnesia criminal". De aprobarse esta última estaríamos en presencia de la impunidad del delito, vale decir de los asesinatos, de la especulación y acaparamiento, del terrorismo, del financiamiento al terrorismo, de los intentos desestabilizadores, de la estafa, de la violación de los derechos humanos, de los atentados, de la destrucción de los bienes públicos, del fraude, del robo, del cohecho, del desfalco, del dolo, de la malversación, de la calumnia, de las ofensas…Por lo tanto los autores de tales transgresiones no podrán ser condenado. Estaríamos en presencia de una ausencia de gobierno legislativo, mejor dicho, de un vacío de poder legislativo. La misma razón que esgrimió la CD para derrocar a Chávez. Este mismo argumento podría servir para destituir la AN.

Para completar los funestos episodios que en la actualidad estamos viviendo los venezolanos en la AN, los ediles de la MUD invitaron a un cantante en calidad de tribuno, muy lejos de representar a un modelo de juventud. Este adulto mayor (nada joven), procede de otro pudridero como es el mundo del espectáculo y del entretenimiento. Como el adeco HRA quedó tan complacido con el "cantante tribuno" por su "pieza de oratoria" prometió que lo invitaría en un futuro para que los venezolanos disfruten nuevamente de la elocuencia y la facundia del fulano juglar. De seguro sus compañeros del pudridero se deleitarán con una de las canciones más popular del repertorio melódico del "orador", Así mismo, el adeco curaca podrá cantar junto con los otros compañeros el estribillo: "tienes ese cuerpo bien durito/ tienes esos muslos bien duritos/ mami a ti te gusta bien durito/ bus bus, enterito". Imagino a HRA mirando con lascivia legislativa a las bailarinas del cantante, meneando sus ojos al compás del trasero de las bayaderas y de los afinados aplausos de los "egregios" ediles. Estamos en presencia de una extravagante obra de la lírica venezolana que ofende a nuestras heroínas de la patria. ¿Qué les sucedió a ciertos políticos venezolanos?