A la mesa de redacción de “ El Arado y el Mar” llegó un informe de una de las más prestigiosas oficinas de análisis de riesgo del mundo, hace una prospectiva política estratégica por encargo de una compañía minera china preocupada por sus inversiones en Venezuela. Trascribimos fragmentos del informe:
“1.- El país esta sometido a un proceso enbrutecedor que desmonta la peligrosa conciencia colectiva alcanzada con el gobierno anterior. Esta conciencia colectiva es germen de regímenes socialistas, que caen en la tentación de proteger a trabajadores y al ambiente, son un peligro para la inversión minera, no la hacen rentable, por lo menos a los niveles necesarios por la competencia mundial, donde estas limitantes no existen.
2.- El gobierno, si bien mantiene su ataque a la oposición, lo hace de tal manera que forma parte activa y principal del proceso embrutecedor. Su principal argumento en los dos días que en el campo se recogió material para este informe, fue la aventura de uno de los líderes de la oposición en un carro estacionado, muy buena para un chisme de farándula pero inocuo para formar o mantener la conciencia colectiva; al contrario, contribuye a desligar los problemas de Estado (el arco minero) del pensamiento cotidiano de la masa sumergida en la trivialidad. La oposición no se diferencia, sus ataques carecen de profundidad argumental, de base ideológica y se mantienen en la misma calidad farandulera. Los dos bandos se demandan en los tribunales, en el Tribunal Supremo, llenándolo de prestigio para decidir la vida política.
3.- El gobierno desgasta sus argumentos principales, llama a enfrentar una guerra cada cierto tiempo y luego olvida el llamado, y se abraza con los supuestos enemigos. En una de estas oportunidades recogió 13 millones de firmas contra Estados Unidos que hasta hoy no se saben donde reposan, algunos aseguran que las lanzaron al Guaire, un río que atraviesa la capital; se dice antiimperialista pero mantiene fuertes relaciones con las compañías imperiales, se dice anticapitalista pero vive en la contradicción de estimular al capitalismo de tener en el gabinete a connotados capitalistas, sus ministros declaran diariamente a favor del empresariado; amenaza con tomar las fábricas abandonadas pero esto no debe preocupar, se trata de un método usual de pasar los pasivos de la burguesía al Estado.
4.- La economía influye sobre la política, la conciencia individualista que avanza no posibilita el menor sacrificio a la masa fragmentada; el gobierno sustentado por esta masa oportunista, clientelar, acostumbrada a apoyar a cambio de dádivas confina al gobierno a movimientos cautelosos, siempre, cada vez más, hacia el capitalismo; el apoyo a otras acciones de movilización política se ven mermados dramáticamente.
5.- El mundo de la comunicación, de la manipulación de las masas es un seguro para cualquier inversión. En ese mundo el capitalismo reina casi por unanimidad, ya nadie impulsa valores socialistas, todo se reduce a elevar la conciencia individual, el miedo al despojo, a la inseguridad individual, quién da más, quién ofrece más es el centro de esta batalla. El gobierno insiste en su papel de proveedor y deja a la oposición la creación de la conciencia capitalista.
6.- La masa cada día está más confundida, fragmentada. En conclusión, la inversión en Venezuela es una de las más seguras del mundo, allí existe hasta un ministerio encargado de facilitar todas las operaciones de las compañias extranjeras, creemos que no hay peligros a la vista por lo menos durante doscientos años. Con seguridad habrá en algún momento cambio de gobierno, pero no de sistema.
No sabemos de dónde viene este informe, quizá viene de la misma fuente que filtró el informe del comando sur. No importa, lo cierto es que es, sin dudas, una alerta sobre lo que está pasando; es, como decían en las novelas de Radio Rumbos, sacado de las entrañas de la vida real.