Aventis

Primates y colonizadores, encuentro de la economía

Nos encontramos en la antesala de un stock ideológico, las ciudades de los primates empiezan a florecer, como consecuencia del embrujo de las riquezas y la adquisición de dinero fácil. La riqueza presente es solo para pocos ciudadanos que pueden ejercer control sobre ellas y entra en escena la desvalorización, que siempre ha sido negativa para cualquier país y reduce progresivamente los modos de producción.

Hay algo implícito, más allá de las necesidades básicas y los gastos vienen sustentando la calidad de vida de los venezolanos hacia el empobrecimiento. Los productos de la cesta básica, aumentan sus precios sin un valor relativo que permita describir sus actos de compra y venta.

El capitalismo, suscribe al hombre y mujer a una cadena de trabajo muy específica y el gobierno chino está exigiéndole a Venezuela proyectos específicos para darle racionalidad a los préstamos dados para la producción y diversificación del campo industrial. Nos encontramos ante la mirada ciudadana y una sociedad de consumo que crece vertiginosamente para crear caos en hogares humildes y con mucha prole. De verdad es un campo minado que crece vertiginosamente para regir la libertado de trabajo y las actividades rutinarias de esa verdad.

Esta etapa de infradesarrollo económico viene creando un flanco de guerra bajo distintas modalidades y nos lleva a tomar una piedra de escándalo entre el gobierno oficialista y la misma oposición que da origen a los principios de crítica en las gestiones administrativas departamentales. Los motores de desarrollo, siempre han existido, La Corporación de Economía Básica en el gobierno de Rómulo Betancourt y el siguiente período gurnamental creó y organizaron tres fuerzas productivas, una de producción agropecuaria, otra pesquera y finalmente, la de semillas. La pesquera fue la más importante y se ocuparía de extraer, conservar en modernos frigoríficos los productos del mar, luego expenderlo racionalmente a precios al alcance de toda la población consumidora, se crearon viveros marítimos y fluviales en los grandes ríos del llano venezolano y, lo más importante, en ese período democrático de inicio democrático se formaron distribuidoras de alimentos que, conforme al sistema en cadena se encargarían de llenar los anaqueles en supermercados, bodegas y abastos.

Ahora le llaman Claps, Sundee y Casa.

Desde 1948, el debate sobre la alimentación en Venezuela es un tema vigente y las páginas de la prensa nacional e internacional dan a conocer sus impresiones Es un vértigo retórico éste debate, declaraciones e insultos van y vienen, los huecos económicos por el despilfarro y la acción del bachaquero son testigos mudos de esa gran verdad, e militarismo y las empresas fantasmas arropan las fallas administrativas de las corporaciones y el ciudadano común, los niños y el Estado constituyen los grandes perdedores de éste fracaso en la proyección económica, no importando la vertiente política en que se maneja esta realidad.

Solo, los privilegiados se benefician por sus articulaciones con las empresas del exterior y las regionales, las transnacionales determinan un criterio malicioso desde la visión contabilista.

Con franqueza, debemos admitir el fracaso en pleno del desarrollismo empresarial que sin una política adecuada ha dañado los sistemas de engranaje de las industrias de producción agrícola y las empresas del Estado que tienen una década arrancando y no terminan de manejar el mercado venezolano bajo una concepción netamente socialista.

El manguareo, nos destruye y las dificultados crecen, ante el conocimiento de una realidad que hoy devasta Europa y en el futuro nos tocara vivir esas experiencias bajo condiciones deprimentes. Solo, debe existir un interés económico que legitime esta nueva etapa en la política venezolana, donde se exigirá recursos propios y técnicas para interpretar la afirmación de un capital al servicio de una comunidad bolivariana, nosotros



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Emiro Vera Suárez

Profesor en Ciencias Políticas. Orientador Escolar y Filósofo. Especialista en Semántica del Lenguaje jurídico. Escritor. Miembro activo de la Asociación de Escritores del Estado Carabobo. AESCA. Trabajó en los diarios Espectador, Tribuna Popular de Puerto Cabello, y La Calle como coordinador de cultura. ex columnista del Aragüeño

 emvesua@gmail.com

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