1. 1. "Descolonizarnos para ver de nuevo lo que hay en este otro lado del océano". Consigna del Primer Congreso Indígena Nacional de CONIVE. 1989

(Propuestas a la Mesa de descolonización: breve resumen del final de nuestra intervención . Caracas,jueves 20 en el mes de la Resistencia Indígena. Octubre 2016).

1.-La propuesta de una descolonización profunda y sostenida, formulada por el camarada Presidente Nicolás Maduro el Día de la Resistencia Indígena, señala este proceso como fundamento de una revolución cultural y educativa, como acompañamiento indispensable de la revolución política, económica y social en el país y en el continente para la construcción del socialismo del siglo XXI. Revolución que pasa por un restablecimiento previo de sus historias y de sus espacios geográficos-territoriales con sentido de independencia de nuestros países frente a los imperios y sus nuevas formas de conquista y colonización. Siempre situando nuestro análisis y compromiso político-cultural, partiendo de la coyuntura concreta en la actual situación continental y mundial, de insurgencia del capitalismo financiero neoliberal y el imperialismo occidental, especialmente contra los pueblos y gobiernos

independendientes y de avanzada del continente.

2.-Representa un reto histórico y político para los pueblos y comunidades indígenas el hecho de que el Presidente Nicolás Maduro haya confiado a los los pueblos indígenas la responsabilidad de darle cuerpo organizativo y sostenimiento filosófico, ideológico y político a esta Comisión Nacional de la descolonización bajo la dirección de la Ministra del ppp de los pueblos indígenas, la camarada Aloha Nuñez.

2.1.- Este reto político-cultural, involucra a los pueblos comunidades indígenas, autoridades legítimas de cada pueblo y al movimiento indígena nacional, comprometiendo además las distintas modalidades de la indo-descendencia del pueblo venezolano y del continente,en las múltiples manifestaciones políticas, sociales y culturales de lo que el Comandante Hugo Chávez denominó, como parte de su legado, las diferentes fuentes históricas y sociales, corrientes y movimientos constituyentes del socialismo del siglo XXI. Ellos son, entre otros, siempre fraternamente entrelazados y comunicados por el espíritu intercultural en la unidad y diversidad del género humano y en sintonía con el universo, sin desconocimiento de los antagonismos sociales y el antagonismo con la naturaleza por parte de la cultura dominante, mediadas por relaciones de trabajo :

-Los indosocialismos del pasado y del presente histórico, que no son sólo utopía, ni tampoco se limita a la ideología colonialista del "buen salvaje" ; son experiencias históricas concretas en distintas modalidades de las sociedades mesoamericanas y andinas, pero también en las microsociedades caribes, arahuacas y de lenguas independientes. Todas ellas como parte de lo humano, con sus virtudes y defectos, con sus aciertos, potencialidades y limitaciones.Pero siempre dotados de sus cosmogonías específicas y formas de trabajo colectivo.

-Los ecosocialismos, que de algún modo son inseparables, aunque no reductibles a los indosocialismos. Ello sin desatender el llamado de la Madre Tierra a los Estados Nacionales a combinar la geoestrategia con las políticas de la vida, para la vida y de defensa total del planeta, fortaleciendo la cultura de paz y la diplomacia de los pueblos.

-Los afroamericanismos y su diáspora continental y caribeña a partir del esclavismo de la conquista de América que se hermanó en alianzas secretas con la esclavitud y resistencia indígena prolongada iniciada en el siglo XVI.

-El feminismo revolucionario contra los estados patriarcales racista-clasistas y etnistas que nos envolvió en la sociedad de castas de la colonia y en la limpieza étnica y de sangre, proyecto todavía en pie por parte del Occidente capitalista (y que encuentra en la verguenza de la madre india, negra, indo-mestiza y blanca de orilla, el asiento del racismo, del machismo y de la discriminación étnico-territorial, social y linguística en nuestras sociedades colonizadas.

-El papel de la juventud en el diálogo de civilizaciones e inter-generacional con los sabios y sabias de sus pueblos y comunidades para el fortalecimiento de la memoria histórica y del compromiso social con sus pueblos y comunidades.

-El Bolivarianismo revolucionario, integracionista y emancipador, destacando su anti-imperialismo, su rechazo de lo monárquico, su sentido independentista, cuyo proceso de integración continental no convirtió los ejércitos libertadores en los territorios liberados en ejércitos de ocupación; mientras que la resistencia indígena frente a la continuidad del colonialismo interno antepuso siempre lo que el maestro César Rengifo llamó la Anticonquista, como complemento del anti-imperialismo y la descolonización. Esto sobre la idea de que la legitimación de cualquier conquista del pasado, legitima las nuevas formas de conquista de los imperios e imperialismos occidentales (o de colonialismo interno como ocurrió con la primera independencia).

-Las teologías de la liberación: contrapuestas, con sus iglesias de base a las altas jerarquías al servicio del gran capital, del imperialismo y de los imperios europeos. Más en un momento en el cual la derecha católica y el capitalismo mundial parecieran estar presionando y desinformando al Papa Francisco, especialmente sobre Venezuela para tratar de derrocar al gobierno revolucionario y bolivariano del Presidente Nicolás Maduro.(ver nuestra Carta al Papa Francisco)

.-Las filosofías de la liberación, de las cuales forman parte indiscutible las filosofías indias del Buen Vivir que involucran a todos los pueblos indígenas del continente.

-Las pedagogías de la liberación; que no se quedan en los valiosos aportes de Paulo Freire, César Rengifo entre otros maestros lúcidos y comprometidos, sino que debemos incluir el aporte colectivo a la descolonización de nuestros sistemas pedagógicos nacionales por parte de los pueblos y comunidades indígenas de cada país del continente, sin negar por esto el aporte colectivo de otros pueblos constitutivos de las nacionalidades.

-El marxismo-crítico y constituyente en un espacio geográfico, histórico y cultural específico, en proceso de descolonización anti-imperialista, hacia el proceso de construcción del socialismo del siglo XXI con el movimiento de los trabajadores. Se trata de una referencia fundamental e irremplazable, pero llamado por la historia a complementar sus fuentes a la luz de la complejidad del siglo XXI y en el propio terreno indoamericano y caribeño, en compromiso orgánico con sus pueblos, culturas y civilizaciones propias para la construcción de otros mundos posibles en el socialismo del siglo XXI. Sin detrimento del aporte descomunal de sus padres fundadores.

3.-Unidad cívico-militar independentista, bolivariana y anti-imperialista: plantea -en el caso venezolano- una revolución pacífica, pero no desarmada.

4.-Generar con los pueblos marcos teórico-prácticos y metodológicos abiertos, de construcción colectiva al calor de las luchas políticas y sociales y la resistencia cultural. Los mismos deben ser de naturaleza intercultural, inter-civilizatorios, con la finalidad de favorecer el diálogo de los pueblos indígenas consigo mismo, las políticas de alianza con los movimientos sociales y políticos, con los gobiernos de avanzada y de carácter

revolucionario.

Dicho marco referencial, teórico-práctico y de construcción colectiva debe proporcionar a los pueblos y movimientos los insumos básicos para avanzar en el proceso de descolonización y en el desmontaje crítico de los proyectos históricos de la dominación cultural, educativa y espiritual; en el empeño de restablecer a los pueblos, comenzando por sus pueblos originarios, su propio ser histórico, social y espiritual, su visión unitaria dentro de la diversidad de la naturaleza, de las culturas, sociedades y pueblos en cada país .