¿Verdad que muchas manos en el plato ponen el caldo morado? Algo de eso pudiera estar interfiriendo en las decisiones del inquilino de Miraflores, pues hemos visto que no quiere dar pie con bola. Y para que no digan que es algo personal cuando criticamos los errores, entonces quisiéramos pensar que no es culpa de Nicolás Maduro, sino de esos sesudos asesores que no están en sus cabales y que solo han embrollado más el cuadro político. Por ejemplo, ¿Qué sentido tuvo otorgarle medida de gracia a un psicópata de probada conducta golpista? ¿Acaso no basto que el juez de la causa lo condenara por el delito menor, y que de ñapa lo recluyeran en una celda cinco estrella, con gimnasio privado, full cocina, biblioteca, fax, celular, internet y demás hierbas aromáticas?
Con todas estas vainas tan locas que están ocurriendo y que confunden a cualquiera, ya vemos porque dicen que la vida te da sorpresa. ¿Quién podía creer que el principal responsable de esas guarimbas que causan muertes y daños a la propiedad, ahora muy orondo y de manera desafiante pretende igualarse al gobierno, y que no conforme pasándose de frescolita, también tenga el tupe de condicionar una supuesta tregua mediante un vulgar chantaje que pone en tela de juicio el imperio de la ley? . Igualmente cabe preguntarse: ¿Por qué el gobierno pontifica el relajo al permitir que el monstruo de Ramo Verde se reúna en su residencia con el ex presidente español, Rodríguez Zapatero, quien por cierto ha resultado ser otro de esos canta mañana pues descubrió demasiado tarde que el dialogo no prosperaría porque murió al nacer?
Y mientras continúa enrareciéndose el clima político y los actos terroristas queden impunes por la flagrante complicidad del Ministerio Publico, también va creciendo en el país un peligroso descontento, ya que el gobierno no decide actual con autoridad y para colmo se deja intimidar con un vaso de cartón. ¿Y será que los factores de poder son tan despalomados que piensan que nuestras FANB están pintadas a la pared y que no tienen doliente sus oficiales y soldados cuando son linchados y quemados por criminales terroristas que mantienen en jaque la paz de todos los venezolanos?
Después no digan que no se lo advertimos, pero todo apunta a que este conflicto no tendrá un final feliz, y todo por culpa de un gobierno que no se apreta los pantalones porque le teme incluso a su sombra. ¡Que vaina la que nos echamos!, pues muchos creíamos que todos los negros eran arrecho.