El Arco Minero del Orinoco comprende tanto la margen derecha como la margen izquierda del Orinoco y va desde el río Apure, tierra de la comunidad indígena Pumé, pasando por Palital reconocida zona de los indígenas Kariña hasta el límite con el Estado Delta Amacuro en Barrancas, es decir, zona de los Warao, por la margen izquierda. También, el Arco entra hacia la margen derecha del Orinoco, hacia el río Cuyuní, en el que habitan los Arawk, Pemón y Kariña; así como a la zona de influencia del Parque Nacional Canaima, donde puebla los Pemón. Continúa el Arco y se superpone al río Paragua afluente del Caroní, en los que se encuentran los Sapé, y tierra de los últimos Uruak y Arutani, y luego cae al río Aro, también zona Kariña, desde donde avanza hacia la cuenca del Caura, característico territorio Yekwana. Es decir que más de diez comunidades indígenas coinciden con la actividad extractiva minera, porque se ubican, desde tiempos ancestrales, en el área delimitada y llamada hoy Arco Minero del Orinoco.
En las minas a veces suceden accidentes por desprendimientos de tierra, o asesinatos y enfrentamientos entre bandas mineras ilegales, esto hace que las mujeres queden abandonadas con sus hijos y algunas veces nunca reciben algún beneficio, es el costo social de la minería del minero ilegal. Para los pueblos indígenas el oro era concebido como una ofrenda de los Dioses, que representa del Sol que les da vida, aquí podría entenderse que hay una relación mítica, pero, el oro existe en la realidad, como existen otros minerales. Para ellos, el oro sirvió sólo para realizar obras de arte, de orfebres aborígenes. Por cierto para los Akawaios, el oro y el diamante son riquezas malditas. No obstante la minería ilegal tiene más de 50 años en el territorio guayanés y ha trastocado los sistemas de vida de los pueblos autóctonos, siempre afectados por la minería ilegal. Esta clase de minería siempre la jefatura dirigentes políticos venezolanos anti patria y por ello sacan clandestinamente de Venezuela estas riquezas.
Los mineros ilegales creen que con el oro, o demás minerales valiosos, pueden adquirir todo, incluso el sexo forzado de jóvenes mujeres, casadas o no, que se dejan seducir y siguen siendo fáciles presas de hombres hábidos de aventura y sexo y continúan con esa forma de vida por necesidad, en San Martín de Turumbán en el Municipio Cedeño del Estado Bolívar, este es un ejemplo palpable y así se van degradando los pueblos y las relaciones sociales de todo tipo. La zona que hoy se conoce como Arco Minero del Orinoco, desde hace mucho tiempo, se vivía en un ambiente de rivalidad y conflictos criminales por las pugnas entre criollos, extranjeros y garimpeiros, que penetrarán más la tierra del Dorado, No así ahora con el Arco Minero que pretende acabar con la minería ilegal realizada en territorio venezolano por parte de brasileños, colombianos de otros países y criollos, extrayendo el oro y diamante desde el Imataca por la zona del Esequibo. Y esos productos del tráfico ilegal salen por Georgetown, capital de la República Cooperativa de Guyana, y es por estas razones que hay enfrentamientos y matanzas, como ocurrió con hace pocos años con la masacre de Tumeremo. Este proyecto, debido a su amplitud y método de realización, generará efectos muy necesarios y urgentes en la conservación del ambiente en una región que comprende buena parte de reservas de agua dulce en el mundo. En este año 2017, hasta agosto, el Banco Central de Venezuela había recibido más de 7000 kilos de oro, además de diversas cantidades de otros minerales extraídos utilizando las técnicas más modernas y con el trato debido para la conservación del ambiente de la zona.
