Voz por Venezuela

Con sumo estupor, en Venezuela y, prácticamente, el mundo entero, pudimos observar imágenes televisivas mostrando como, por órdenes del (en estos días condenado y expulsado por corrupción) gobierno de Mariano Rajoy, electores en Cataluña eran brutalmente golpeados y detenidos por la policía española, que además de destruir urnas electorales, también lo hacía con los centros electorales.


Ninguno de los eventos señalados ha ocurrido en las elecciones que se han realizado en Venezuela en los últimos 20 años. Por el contrario, todas estas elecciones se han realizado en un ambiente de paz y armonía, con la excepción de la elección de la Asamblea Nacional Constituyente en que (sin éxito) la oposición intentó impedir que los electores ejercieran su derecho a votar. No obstante, en lugar de mirar los hechos de Cataluña y condenar al gobierno de Mariano Rajoy (inmerso en terribles actos de corrupción), con sumo descaro el Parlamento de la Comunidad Europea promueve y aprueba sanciones para bloquear la entrada de medicinas y alimentos a Venezuela, bajo el supuesto falso de que no se han realizado elecciones libres en el país.


Por otra parte, mientras los representantes del movimiento independentista en Cataluña y Puerto Rico soportan con estoicismo las arremetidas de los gobierno de España y Estados Unidos, permaneciendo en sus países haciendo el trabajo de convencer y reconvencer a sus coterráneos de las bondades de ser independientes, representantes de la oposición en Venezuela andan de turistas por el mundo negando la función intelectual que les corresponde al hacer la función (de la cual desconocemos antecedente alguno) de apátridas, pidiendo la intervención militar del país, mientras se beben y gastan los dineros que se robaron del país cuando ejercieron funciones gubernamentales, e igualmente se beben y comen los dineros que reciben de la Comunidad Europea y de Estados Unidos para hacer trabajo político no violento en el Venezuela.


En efecto, estos pseudo políticos lo que andan es huyendo por ser violadores de los Derechos Humanos del pueblo Venezolano: abusaron de niños y adolescentes usándolos comobarreras de choque en manifestaciones violentas; son los autores intelectuales de actos terroristas mandando a quemar escuelas con niños de dos y tres años en clase y llegaron al extremo de ejecutar las dantescas prácticas de la Santa Inquisición de quemar a personas vivas por el solo hecho de parecer Chavistas, al igual que auspician la persecución y acoso de todo inmigrante que les parezca Chavista. Y tienen años practicando y promoviendo estos crímenes de odio, con un sin fin de otros actos criminales contra la población Venezolana.


Ciertamente, bajo tal panorama, debemos coincidir en que NO es accidente el que los asesores de esos representantes de la oposición en Venezuela sean figuras inmersas en corrupción y otros delitos comunes como Mariano Rajoy, Pedro Pablo Kuczynski, Marco Rubio, o Alvaro Uribe, reseñado con el reseñado con el número 82 en un documento desclasificado de la DEA (página 10).


Es innegable que el gobierno del Presidente Nicolás Maduro en Venezuela ha cometido innumerable fallas y violaciones, maltratando el llamado de mano de hierro que contra la corrupción le hiciera alguna vez el líder Hugo Chávez, amparándose en discursos esperanzadores, que nunca se materializan consecuencia de la corrupción que ha creado el reciclaje de personeros preñados (demostrado por gestiones en los cargos que han ocupado) de desidia e indolencia y por la falta de mecanismos serios y concretos de denuncias que permitiría detectar y corregir (si en verdad fuese ello la intención, como lo establece el mandato de Revisión, Rectificación y Reimpulso) tales irregularidades a tiempo. Por referir algunos ejemplos al respecto, reiteradas denuncias sobre irregularidades (que rayan en corrupción) sobre la prestación de servicio de la telefónica del Estado Venezolano CANTV se han presentado (sin aun ser atendidas) en la oficina del Despacho de la Presidencia de la República para el Seguimiento de la Gestión del Gobierno y, por ser un hecho de violación a los Derechos Humanos, también se han presentado, de acuerdo al Derecho de Petición, consagrado en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, artículos 51, 285 (numeral 5) y 281 (numerales 1, 2, 4, 6 y 10), respectivamente ante la Fiscalía General de la República y la Defensoría del Pueblo. Otras denuncias que se han presentado también atañen a la violación de los Derechos Humanos de las personas con discapacidad por distintas comercios, incluyendo entes del Estado como lo es la Alcaldía Guaicaipuro, en Los Teques, Estado Miranda vía las denominadas Ferias Guaicaipuro, caso que el mismo Conapdis ha ignorado. No obstante estas desalentadoras experiencias, que niegan el accionar que debe acompañar el discurso esperanzador ( la palabra motiva,pero el ejemplo convence, repite constantemente Diosdado Cabello) sugerencias para corregir efectivamente estas faltas también se han presentado.


Ahora, estas y muchas otras fallas y violaciones de gobiernos, en menor o mayor grado, son el drama de muchos países (como ejemplo podemos mencionar Canadá con su genocidio de los pueblos indígenas y la negación de la independencia de Quebec; Méjico con el caso Ayotzinapa, el asesinato de periodistas y el asesinato de candidatos a cargos de elección popular;Grecia sumida en corrupción; España con sus desahuciados; Honduras con su fraude electoral; Argentina con su Presidente, como Pedro Pablo Kuczynski, envuelto en negocios de fraude y estafa; Colombia y su aumento de la producción de cocaína (a pesar de contar con bases nueve militares Estadounidenses para controlar tales cultivos); Brasil con el golpe de estado de corruptos; Estados Unidos de América y el asesinato racial, etc.). Y son los pueblos de cada país los que están llamados a cobrar vía elecciones tales fallas y violaciones. De hecho, ninguna oposición de los referidos países anda por el mundo auto vejándose (como lo hace la oposición dominante en Venezuela), pidiendo que bloqueen los dineros y la entrada de alimento y medicinas a sus respectivos países.


Y así, quien debe cobrar las faltas y violaciones del gobierno de Venezuela es el pueblo de Venezuela en elecciones, como lo hizo en diciembre de 2015, cuando la oposición ganó la Asamblea Nacional (AN), pero que con torpeza dejaron de administrar para provecho político decente y compenetrarse con la población mayoritaria que los llevó a estar en la AN. Afortunadamente, en lugar de ello, a los pocos días lo que hacen es pasear por el mundo, bebiéndose y comiéndose el financiamiento que han recibido para avanzar políticamente a lo interno, mostrándole así a esa población mayoritaria sus verdaderas malas intenciones para con el país y las empresas básicas del mismo, por lo que esa población mayoritaria les ha negado (y seguirá haciéndolo) cualquier apoyo subsecuente.


Y en este devenir de errores y desaciertos, es el pueblo de Venezuela quien tiene el derecho de seguir ejerciendo esa libertad de elegir su Presidente y Legisladores en Paz, sin intervencionismo extranjero, como ya lo han expresado intelectuales del mundo, incluyendo un pronunciamiento directo contra el intervencionismo de extranjero en Venezuela cuyo bloqueo de alimentos y medicinas sólo causan muertes en el país, de una población que tiene derecho a decidir su futuro en santa Paz.

Sergio Rojas

Correo/E-mail: rr.sergio@gmail.com

 



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