De que eliminen algunos partidos que jugaron un papel fundamental en el país, eso no importa, ya hicieron plena alianza con el Psuv y controlan las bolsas CLAPS programadas y sus cajas. Así que, en la vieja Lima, en época de José Carlos Mariátegui, hubo una alianza siniestra de españoles y encastados que liderizaron las peores injusticias a los indígenas y pueblo llano de esas comunidades peruanas. Abusos, no solo contra los indios, sino también con otras poblaciones que fueron importadas de Asia y África para trabajar la agricultura y crear herramientas fuertes para el trabajo duro.
Esto, convierte a las haciendas en autocracias en medio de un supuesto clima democrático. Los hijos de ciertos hacendados, viajan a Francia, Inglaterra y España, vuelven al Perú con apariencia de gente civilizada, más apenas se confinan en sus tierras y pierden el barniz europeo y asumen una conducta inhumana y la violencia, se hizo sentir contra los hombres y mujeres de poncho y sombrero. Aparece la autocracia y este intelectual de izquierda empieza una campaña de saneamiento ideológico desde esas bases populares aisladas, hasta conformar un movimiento de moralidad y en estas sucesivas apariciones, surge la imagen de Alberto Fujimori y su hija Keiko, que pronto gobernara al Perú.
Hay muchos oprimidos en el Continente Latinoamericano, una tierra virgen con una diversidad de aristas que recibe violencia y lucha a su vez, contra la violencia. En el caso nuestro, los adecos gobiernan el país y, ahora incorporan las viejas bases populares hacia la estructura del sector económica, aunque la socialdemocracia cristiana asesora a través de los yuppies españoles, el proceso de asentamiento bursátil y que, ahora con la firma de sacar el féretro del Generalísimo Francisco Franco del Valle de Los Caídos, remueven el sentido franquista del pueblo español y abre nuestras venas a un campo de incertidumbre y escarmiento social. El viejo comunismo aplastará el concepto de libertad y, el caudillismo dará paso a la tiranía.
El Socialismo, encuentra en América Latina un nuevo terrateniente, es el ala militar, que se esconde en los artificios de la política para avanzar en el control de las haciendas agrícolas y fincas ganaderas, más el mercado interno de combustibles y comestible pactando con esos viejos terratenientes sacados por Ezequiel Zamora, José Antonio Páez en su primer ciclo, Sebastián Francisco de Miranda, Simón Bolívar y luego Antonio José de Sucre para allegarse hasta el Perú y Bolivia que conformaba una gran meseta o planicie con tierras frescas.
Carlos Andrés Pérez, Hugo Rafael Chávez Frías y Ernesto Guevara de La Serna, trataron en este último ciclo sembrar una nueva conciencia socialista, una orden dada desde Alemania dio ese criterio y cuando ya tenían toda la programación dada, fueron asesinados unos, bajo las balas de personas conocidas y cubanas y el otro vilmente envenenado por inoculación electrónica y cibernética. Una modalidad moderna del crimen junto a los juegos de drones.
Carlos Andrés, aunque tenía en Fidel Castro y Daniel Ortega Saavedra, grandes aliados, fue enjuiciado por las mismas fuerzas izquierdistas de su partido y, que ahora aparecen liderizando al Psuv junto a Diosdado Cabello, inteligente líder civil y militar, cuyas raíces son socialdemócratas. Adecas.
Mariátegui, tuvo que superar esta difícil etapa peruana y su gestión fue conquistar esta civilización izquierdista que se avecinaba y que cayo bajo la influencia de Lula Da Silva en Odrebeth y que aceleró la caída de Dilma en Brasil y el ataque contra una mujer trabajadora como Cristina, pero fue salpicada y ahora debe responder ante un neofascismo italiano que hunde a Argentina bajo la bandera del neoliberalismo y hará caer a Venezuela, al pactar Nicolás Maduro Moros con empresarios e industriales ligados a los grandes capitales bancarios y financieros, incluyendo a Rusia, cuyos mentores originales del Petro son de esta procedencia.
Venezuela, esta muy debilitada, no hay telefonía, cable televisivo y los resguardos de seguridad no son custodiados por las fuerzas militares, la electricidad deprimente al regalarle a países centroamericanos los viejos motores Caterpillar de fuente Diesel y que todavía tienen repuestos, compraron plantas chatarras de China con poca capacidad de sustentación y acoplamiento energético.
Mariátegui y Chávez Frías, se adelantaron a la traición comunista en América Latina, carreteros disfrazados de socialistas, asumen su dimensión histórica para jugar con nuestras fuentes energéticas y agotar la capacidad de adquisición de alimentos del venezolano y de los sureños.
Gracias, Perú, por permitir la entrada de nuestros jóvenes, hombres y mujeres preparados para asumir nuevos ciclos de responsabilidades en tierras lejanas, pero conquistadas en aras de una libertad plena.