En un viaje que hice a Ecuador visité el volcán Quilotoa ubicado en la provincia Cotopaxi. Además de la belleza del paisaje y de la hermosa laguna del mismo nombre, nunca puedo olvidar a los burros conducidos por guías turísticas de la zona. Es impresionante, que a pesar de lo encumbrada de la montaña (antiguo volcán), tanto los cuadrúpedos y los bípedos que los conducen, suben y bajan el empedrado camino sin ningún problema. Si un turista común remonta el empinado sendero en una hora, el jumento, junto con el guía, lo hace en quince o veinte minutos sin descanso y sin traspiés. Es envidiable la sabiduría del asno, que no se tropieza con ninguna piedra que ponga su vida en peligro, dado que ha transitado ese camino muchas veces.
No sé porque me empeño de realizar comparaciones que aparentemente no están vinculadas. No es culpa mía, es responsabilidad de los duendes digitales que me mueven los dedos sin mi voluntad. El gnomo de las teclas me constriñó a comparar los burros de Quilotoa con los opositores de Chávez y ahora de Maduro. Estos escuálidos tienen veinte años transitando por el mismo camino y cometen los mismos deslices. Aquellos suben y bajan el volcán sin ningún tropiezo, estos, no paran de repetir sus equivocaciones. Finalmente, debo concluir que los asnos de Quilotoa son más avispados o más inteligentes que nuestros opositores, si lo dudan los invito a leer.
El 11 de abril de 2002 las fuerzas oscuras de la oposición venezolana, empresarial, medios de comunicación, iglesia católica, en alianza con un pequeño sector militar dieron un golpe de estado contra el presidente Hugo Chávez, el cual colocó en la presidencia al empresario Carmona Estanga. Por fortuna, el golpista no logró calentar la silla presidencial, dado que el 14 de abril en la madrugada el pueblo venezolano en la calle logró que el golpista saliera de Miraflores como botellazo de meretriz.
La experiencia anterior no les sirvió de nada. El 30 de abril de 2019 el partido Voluntad Popular dirigido por el orate Leopoldo López continuó con la conspiración. Esta fue la famosa "rebelión de los plátanos", cuando se pretendió sacar de Miraflores al presidente MM. Tal intento no contó con el apoyo del pueblo ni tampoco con el estamento militar. Esto condujo al fracaso y la frustración de Leopoldo, que del susto y el miedo (se cagó) no le quedó más remedio que esconderse en la embajada de España.
Los opositores del gobernó de MM no ven las piedras y cada vez más se tropiezan con estas, a pesar de los trancazos anteriores. De la rebelión frustrada de los plátanos continuaron con el Macutazo y la invasión vergonzosa de Chuao en mayo de 2020. En esta oportunidad un grupo de militares retirados y mercenarios norteamericanos, en una práctica de aprendiz de conquistador, intentaron derrocar el gobierno sin ningún tipo de apoyo, ni popular ni militar. Resultado de tal fracaso, lloriqueos en grado de frustración. Tampoco aprendieron de los fiascos pasados, se volvieron a golpear con la misma piedra. Los burros de Quilotoa le llevan una morena.
Los náufragos opositores no descasan y sobre un fracaso construyen otro fracaso. Es bueno recordar las huelgas petroleras; las marchas tumban gobierno que nunca logran su objetivo; las guarimbas en la clase media que lo único que sirvieron fueron para secuestrar a sus vecinos, contaminar y deteriorar sus urbanizaciones y Maduro en Miraflores. Siguen los ataques tanto desde exterior, como desde el interior. Amenazas desde la OEA a sabiendas que Venezuela no pertenece al ministerio de las colonias, nombran al gafo e inepto Guaidó como presidente interino o presidente encargado o no sé qué carajo, que se va aplicar el TIAR porque esto si es efectivo y Maduro en el poder. Que se va a denunciar la administración de MM ante el tribunal de La Haya; que el gafo Guaidó recorre el mundo cual miss Universo para recibir el apoyo internacional; que van a acusar al gobierno de MM ante CDI; que van a incriminar al gobierno de Venezuela ante la Consejo de Seguridad de la ONU y MM ahí, en Miraflores, como debe ser. Que el cartel de Lima se va a quejar y la va a meter el chisme a su patrón, el rubicundo y amargado Donald, y MM en el mando, al lado de su pueblo soberano.
Ya todo está listo a MM le queda poco tiempo en el poder. El gafo Guaidó, Julio Borges, Carlos Vechio, María Corina Machado tenían la solución para sacar a MM de Miraflores. De rodillas le solicitaron al gordinflón del imperio, el colorado Trump, y a UE la aplicación de sanciones económica y financieras, bloqueo petrolero, incautación de los bienes de los de Venezuela en EEUU y en Europa, robo de las finanzas del país depositados en la banca extranjera, robo del oro de nuestra reservas confiadas en UK, boicot a las transiciones monetarias desde y hacia la banca extranjera, imposibilidad de solicitar préstamo a los organismo internacionales para solventar problemas que acosan al pueblo de Venezuela, entre tanto castigos que los traidores solicitaron a los criminales que nos han saqueado nuestra riquezas desde hace más de cien años. Sin embargo, los sicofantes, "preocupados" por la salud metal de sus compatriotas le hicieron otra súplica al colorado: que dichas sanciones solo afectaran al presidente MM y a los líderes principales del PSUV. Palabra cierta, como diría una bruja amiga mía.
Hoy por hoy los venezolanos opositores y chavistas, hombres y mujeres, feligreses de cualquiera fe, ricos, pobres, miembros de la clase alta y media casi extinta, extranjeros, naturales, comerciantes, personas saludables, personas enfermas, dueños de carro y camionetas, hombres y mujeres de a pie, profesionales de todo tipo, en fin, treinta millones de personas que pisan tierra venezolana son víctimas de la sanciones que una cáfila de vende patria solicitaron, en un acto de besamanos, a su patrón.
Cada venezolano que pierda varias horas para recibir el beneficio de llenar el tanque de gasolina de su auto, no le debe mentar la madre a los responsables de tal aberración, las pobres damas no tienen la culpa de esta depravación, pero si deben tener siempre presente los nombres de los causantes de que Venezuela no tenga el combustible.
El lameculismo, ahora en grado de frustración, tuvo consecuencias. Aquellos venezolanos que gritaban ¡sanciones! en las manifestaciones, aquellos líderes que mostraban su cara sonriente frente a la cámara de la tv pidiendo de rodilla la aplicación de sanciones, son los causantes de la crisis económicas y financiera que vive el país. Que no haya gasolina, que la inflación no se detenga, que el sueldo no alcanza para comprar alimentos y medicinas, que la familia venezolana se esté desperdigando, que algunas empresas estén quebradas, que los comerciantes cobren en dólares y la miseria de sueldo lo paguen el bolívares, que los repuestos de los autos no se consigan, que las medicinas desaparezcan, que miremos hacia el cielo sin esperanzas y que el mundo se nos haya caído encima es responsabilidad de esos canallas. Están son las consecuencias de las sanciones ¿qué les parece? Me quedo con el burro de Quilotoa.
Desconozco cuál de estos sicofantes o socios aspiran conseguir una curul para las elecciones de 6-12-20, pero en el momento de marcar el voto se debe ser muy reflexivo y pensar en Venezuela. Tener siempre presente que hombres como Guaidó, Borges, Vecchio, Guevara y otros, así mismo, la señora María Corina Machado representan la escoria, la traición, la entrega, el colonialismo servil entre tantos calificativos denigrantes que se les puede endilgar para definir lo que no es ser venezolano o venezolana. Siempre será bueno recordar las palabras de Frantz Fanon escritor martiniqueño (1925-1961): "Nuestra misión histórica, para nosotros que hemos tomado la decisión de romper las riendas del colonialismo, es ordenar todas las rebeldías, todos los actos desesperados, todas las tentativas, abortadas o no o ahogadas en sangre". Lee que algo queda.