Finalmente el Departamento de Estado gringo se llevó a tan preciada carga, allá llegaron sus esbirros a las mazmorras donde lo tenían secuestrado; a pocas horas de celebrarse elecciones, el cual el pueblo caboverdiano le pasaría factura, votando por otros candidatos y dejando por fuera a estos guiñapos; Ulises Correira y José María Neves, máximas autoridades de ese país. Por su villanía y cobardía, pisotearon el acuerdo de la CEDEAO, dónde Cabo Verde es firmante y no contempla la extradición a EEUU.
Alex Saab fue trasladado nada menos que a la Florida, donde está la cuna de la podredumbre más rancio y maloliente del fascismo, de la gusanera cubana y del sector más explosivo de la oposición de la ultraderecha venezolana. Es tal la importancia de ese estado, por el nidal de víboras, el poder económico y decisorio; que es allí donde se decide quién es el ganador en las elecciones presidenciales. A Alex Saab fue llevado a comparecer ante un juez venal, escogido para estos menesteres, para acusarlo de cualquier delito infundado tomado al azar. Cuál es su delito, burlar a los gringos que se consideran los gendarmes del mundo. Buscando agujeros donde violentar las criminales sanciones, que permitieran llegar aquí los alimentos, las medicinas y la gasolina y además buscar vías para librarnos del asfixiamiento, el asedio y estrangulamiento de nuestra economía.
La presencia de Alex Saab en la Florida ha despertado todo un tsunami, que al criminalizarlo como pretende hacerlo, se va a revertir en contra de ese gran monstruo que son los EEUU. El aparato mediático mundial se soltó las amarras apelando a las más inverosímiles acusaciones. La revista Semana de Colombia, donde tiene metida la pezuña el narco presidente Duque, ha escrito que la pareja presidencial venezolana tiene secuestrada a la señora Camila Fabri, esposa de Alex, para que no salga a mal poner al dictador. Tamaña mentira. Otro tanto han hecho al salir de sus escondrijos, las infamias del Diario de las Américas, CNN, la Voz de América. Hasta Eva Golinger, aquella dama de aspecto cándido, escribió unos libros y estuvo cerca del presidente Chávez, abrió el ventilador y desatando los demonios salió con unas aseveraciones bastante disparatadas, atacando alevosamente a Saab. Por la Patilla salen a destilar su odio, otro tanto hacen los cagatintas por todos los medios y las redes sociales; todo adosado bajo el conjuro del odio. Lo que no le perdonan a Saab, repetimos, es haberse burlado de las sanciones gringas y haber permitido que el CLAP llegará a todo el mundo; chavistas y opositores; para muchos es un héroe, un ídolo, un patriota, un diplomático corajudo, que no se inmuta a pesar de las torturas y vejaciones que está recibiendo del imperio más grande del mundo; Detrás de la supremacía que gobierna esa nación, hay un pueblo, que por los momentos calla y observa; cuando se percate de la existencia de un sesgo que pretenda criminalizar o victimizar a un inocente puede explotar. De ahí que me atrevería a decir que están provocando a un volcán que puede entrar en erupción en cualquier momento. Este es solo el comienzo, los pueblos no se han manifestado. Las malas decisiones serán como un boomerang en contra del gobierno y sus lacayos
Rusia, China, Irán, Cuba entre otros se han pronunciado y la opinión pública norteamericano está al tanto. Alex Saab es solo una pieza política en el ojo del huracán, que le están fabricando un expediente para llegar al objetivo central que es sacar a Maduro, valiéndose de lo impredecible, desacreditándolo y fabricarle delitos, utilizando la mediática internacional. Hasta aquí nos ha conducido el odio exacerbado del poder imperial.
La política en EEUU es bastante impredecible, ya he oído de algunos analistas y no está lejos que pueda suceder, ya lo han empleado en otras oportunidades. Utilizar a Alex Saab como un canje.