Viernes, 17 de diciembre de 2021. Las tradiciones elemento fundamental, casi esencial del devenir de los humanos, suele tener un peso sustancial en nuestra percepción del mundo y de la realidad que nos circunda.
Son piedra fundamental para elaborar parte del edificio que significa el darle sentido a muchas acciones de nuestro presente y de nuestro futuro.
Sin tradiciones, sin un pasado en que apoyarnos, sin esa base necesaria para desplazarnos en el diario vivir, el movernos se torna mas áspero y lento, pero siempre nos movemos.
Los caraqueños y los que en esta ciudad vivimos, tenemos, y como todas las agrupaciones humanas, gozamos de algunas de ellas, nos referimos a la de la Cruz de El Ávila, o Waraira Repano, ese tradicional alumbrar de la Cruz en las alturas de nuestra montaña hermosa, allí ha estado esa cruz vigilante acompañando año tras año a la ciudad de Caracas.
Sin esa luz alumbrando sobre nuestras cabezas, la navidad caraqueña quedaría como mocha.
Una persona me mencionó recientemente, que este diciembre no iban a alumbrar la Cruz disque porque Nicolás estaba molesto con la gente por el resultado de las elecciones recientes, que este año no tendríamos luz que nos iluminara.
Yo, personalmente, no creo que esto esté pasando, no creo que una reacción de ese tipo esté en el ambiente navideño capitalino, que aunque bastante flojo, no se alumbraron las calles como solía hacerse y las tiendas no están abarrotadas como en otros momentos, reflejo de la crisis, que parece que va cediendo y se está activando la economía.
Consulté con mi hermano y mi cuñada, quienes viven en Parque Central y me dijeron que si han visto La Cruz encendida, pero últimamente no la han chequeado, esta noche no la pelan y yo también miraré a las alturas de la montaña.
Reforcemos nuestras tradiciones, con las limitaciones que nos arropan mantengámonos unidos y miremos hacia adelante con fe y esperanza.
Los invito a que nos ayuden y la observen.
Háganlo en familia o solos y disfruten de la vista.
Tenemos que cuidar nuestras tradiciones.
Feliz Navidad, Venezuela querida.
