Al culminar la Campaña del Sur, con la Batalla de Ayacucho, el Gran Mariscal Antonio José de Sucre, cuenta solamente con 29 años, no se envílece con el triunfo.
Ya consideraba el cumanes, que la tarea por la libertad por Hispanoamérica ya había finalizado.
Su gran victoria había retumbando en todo el continente, terminaba la historia de 300 años de hegemonía española.
Sucre escribió al Libertador en los siguientes términos:
"...me atrevo a suplicar a usted mi relevo y el permiso de regresar a Quito".
Bolívar conocía la verdadera razón de este procedimiento. Era una hermosa mujer, la Marquesa de Solanda, la razón, pero no lo deja ir, por el contrario le comanda para marchar hacia la futura Bolivia.
El Libertador se niega a dejarle partir, no podía prescindir de los valiosos auxilios de Sucre en la acción de ocupar el Alto Perú.
En su recorrido en Potosí, la Paz, Chuquisaca es recibido con alegría y solemnidad Sucre. Los pueblos salen a recibirlo y existe una anécdota que describe la personalidad del Mariscal.
Instan al cumanes a subirse a una carrozan que tiran un grupo de damas, para hacer la entrada a un pueblo.
El paladin venezolano desenvaina su espada, colocándola en el asiento de la carroza, demostrando su alma generosa.
No olvidemos que el territorio del Alto Perú pertenece a la Confederación Argentina o a la República de La Plata y por esta razón, Sucre, el 9 de enero de 1825, convoca a una Asamblea Constituyentes.
Para Simón Bolívar, el triunfo de Ayacucho, recompensaba sus esfuerzos y de allí comenzaba una nueva época histórica.
A pesar de que el Libertador no había dudado nunca del triunfo, la victoria se le había adelantado.
La capital de la nación en el Alto Perú, sería al constituirse, llamada en honor de Simón Bolívar, Bolivia.
El 26 de marzo del año siguiente es nombrado por el Congreso Constituyentes como Presidente de la nación.
En poco tiempo el futuro Abel de América le extiende el Congreso el cargo vitalicio de acuerdo con la Constitución Bolivariana, pero Antonio José , rehúsa señalando que solo ejercerá la alta magistratura por dos años.
La acción ejecutiva del Gran Mariscal se dirigirá a dos campos , Hacienda y Educación.
Pero la oligarquía militar prepara planes de desprestigio en contra de Bolívar y Sucre, utilizarían hasta el asesinato con la intención de acabar con la vida republicana en Bolivia.
Dos intentos de muerte contra el joven guerrero venezolano fallarían, entonces sublevarian el Cuartel de Chuquisaca, dónde el cumanes es herido, siendo a pesar de todo magnánimo con sus enemigos y eso los envalentona.
Es detenido un Capitán de nacionalidad suiza, de nombre Uclés, que intentó envenenarlo, el extranjero se reconoce culpable, eso no impide que se le perdone y se deje libre pudiendo alejarse para donde quiera.
Al Capitán Matos, convicto de querer asesinal al Mariscal venezolano, le concede Sucre pasaporte para que abandone Bolivia y le da dinero.
Cómo los planes de magnicidio fracasan , se intentaría el golpe de Estado.
El 18 de abril de 2828, es el día donde se alza la Guarnicion de Chuquisaca, dando muerte al Coronel Contreras, su Jefe.
Sucre sale personalmente a contener la insurrección , solamente acompañado por sus edecanes y un Ministro de apellido Infante.
Arenga a la tropa, tratando de adentrarse en el alma de los alzados.Uno de los conspiradores ante que se volviese contra ellos la sedicion, da la orden de disparar y Sucre es herido.
Al genio de Junín y Ayacucho le embarga un gran pesar en su alma, nunca fue herido en combate, pero ahora es herido por sus propios hombres, que nunca pensó que pudieran alzarse en su contra.
El ejemplo de Chuquisaca no se impone y el gobierno queda restablecido en tres días.
En su convalecencia Sucre escribe el mensaje que leerá ante el Congreso Boliviano para entregar la Presidencia.
Con su espíritu virtuoso se dirige al Congreso y a sus enemigos que a pesar de intentar el asesinato, no logran desaparecerlo, los perdona.
No quería, sino que le dejasen partir rumbo a Quito, dónde se encontraba la Marquesa de Solanda, con la que se había casado por Poder.
No pasaría mucho tiempo dónde es perturbada su tranquilidad por una carta de Bolivar, atendiendo sus órdenes retorna a campaña.
Sale a enfrentar al General La Mar, su compañero de Ayacucho, que con una División peruana intenta invadir Colombia, aduciendo el pretexto de reinvindicar a Guayaquil y pasar esa provincia a dominio peruano.
No habían transcurrido cuatro meses después de la unión con la Marquesa, cuando parte Sucre, otra vez a la guerra.
Su renuncia a la Presidencia de Bolivia, la realizó para evitar una guerra civil entre Perú y Bolivia y ahora debe marchar por la senda de la guerra, a enfrentar dos alas del ejército patriota , que triunfaron en Ayacucho.
Derrota a La Mar en el Porte de Tarqui, había salido el Mariscal de Ayacucho, en busca de La Mar y Gamarra.
Los ejércitos cambian de posición, avanzan , retroceden, vuelven a avanzar, no se sabe por dónde comenzará el combate.
Están quince días en este asedio hasta que la noche del 26 de febrero de 1829, cuando Sucre decide atacar.
Se enfrentará a 8.000 peruanos con solo un ejército de 3.600 combatientes.
El venezolano es el único general entre todos los presentes. Al llegar al Portete de Tarqui a tiro de fusil de los peruanos, espera a la Segunda División y la Caballería, que no ha llegado.
Falla el elemento sorpresa, las avanzadas de Sucre han sido descubiertas.
Al amanecer los ejércitos se enfrentan a las siete de la mañana, ya no había peruanos en el campo.
Se para la persecución de los peruanos cuando había entre muertos y heridos, más de 1.500 hombres, entre ellos 60 jefes y oficiales.
De esta manera los peruanos pagan en Tarqui, las ofensas realizadas por sus caudillos a Colombia y a Bolivar.
Sucre envía a La Mar, que se encontraba a la salida del desfiladero, una capitulacion honrosa, describiendo la frase bolivariana: "Como vencedor fuiste la clemencia!
La derrota de La Mar y su destitución del cargo de Presidente logra una cierta paz y estabilidad en el Perú.
Pero Páez y Santander conspiraban con un grupo de enemigos de Bolívar para dar en su contra un golpe mortal.
Ya para principios de 1830, se instala en Bogotá el Congreso conocido como Admirable o como de la Gran Colombia, ya comienza a verse con claridad las dos viejas tendencias, federales y centralistas.
El Congreso Admirable sería el espacio para la pugna entre los santanderistas juntos al paecismo y los que comulgaban con la unidad.
Desde Venezuela conjuraban contra la integración desde 1821, año del Congreso de Cúcuta, dónde Bolívar y Santander habían sido elegidos Presidente y Vicepresidente de Colombia.
Sucre es el encargado , junto al Obispo Estévez y el Licenciado Aranda, para dirigirse a Venezuela, con la finalidad de tener una entrevista con los emisarios venezolanos Martin Tovar, Miguel Peña y el General Santiago Mariño, para un entendimiento pacífico para salvaguardar la integridad colombiana.
Presidido por Sucre, los comisionados colombianos exponen sus puntos de vista en una reunión en El Rosario de Cúcuta, tratando de salvar la unidad de Colombia.
Exponen que es segura una modificación de la Constitución, refrendada en Cúcuta en 1821, la cual acusaban de centralista, defienden al Libertador a quien acusan de establecer en Colombia una monarquía.
Los venezolanos venían con órdenes para separarse de Colombia, piden que les reconozca al gobierno de Caracas la posibilidad de darse su propia Constitución.
Mariño comienza a lanzar injurias contra Bolívar y acusa a Sucre de hipócrita y de ser instrumento del Libertador.
Se cierran las conversaciones en un ambiente de hostilidad, los emisarios, comandados por Peña; tremendo antibolivariano; no produce ningún beneficio en la reunión.
El 1 de Marzo de 1830, Bolivar renuncia ante el Congreso.
Simón le escribiría el 28 de abril a José Fernández Madrid:
" Este paso lo he dado porque estoy persuadido que es imposible que un hombre solo sea capaz de contener la inmensa anarquía que devora el Nuevo Mundo. Usted es poeta y me entenderá con la imagen siguiente: Este es un navío combatido por las tempestades y las olas, sin timón, sin velas, sin palos, que podrá hacer el piloto?
Necesita quien remolque el buque y lo lleve al puerto. Yo soy el piloto que nada puedo."
El día 30 , Sucre renuncia por carta a la Presidencia del Congreso, no puede apartar de su mente el fracaso de su misión ante Venezuela.
El 22 de septiembre el Congreso de Valencia, sancionó la nueva Constitución quedando separada de la Gran Colombia.
Ese mismo mes Bolívar en Cartagena prepara su viaje a Europa.
Sucre llega a Bogotá y no lo encuentra, le dirige una carta, llena de tristeza y dolor, fechada el 8 de mayo de 1830 que concluye así:
" Adiós mi General, reciba usted, gaje de mi amistad, las lágrimas que en este momento me hace verter la ausencia de usted. Sea feliz en todas partes, cuente con los servicios de su más fiel y apasionado amigo."
No pasaría ni un mes, el 4 de junio de 1830 cae asesinado el Mariscal de Ayacucho en su paso por Berruecos, Bolivar al enterarse de la infortunada noticia exclama:
Santo Dios! Se ha derramado la sangre de Abel!
Cinco meses después el Libertador Simón Bolívar acompañaría al Mariscal de Ayacucho Antonio José de Sucre a las posteridad.....