LAS COLAS, LUGAR PROPICIO PARA ENFRENTAR LA MENTIRA
No falta que, en las colas, que por fuerza se forman ante las taquillas de los bancos o al acudir a cancelar los servicios, al echarle gasolina a su carro, entre otras, haya un escuálido que aprovecha la oportunidad para despotricar en voz alta contra el gobierno, con la clara intención de soliviantar a la gente.
Se pueden oír comentarios de todo tipo, hay desde los que pretenden echarle la culpa al gobierno por la cola que les esta tocando hacer, hasta los que repiten cual loros los mensajes de globoterror y todavía a estas alturas, como si sus neuronas se hubiesen quedado paralizadas en la parte del cassete, en que el canal jefe de la oposición, montó su estrategia mediática de mentiras sobre el desabastecimiento achacándoselo al gobierno, a sabiendas de que fue una canallada más de los oligarcas de este país y entonces se consigue uno con cada vieja cacatúa, quien moviendo su trasero prominente denota que es muy poca el hambre que aguanta, lanzando sandeces casi a gritos: que si “el INDECU cerró la panadería donde ella compra su pan” y acababa de afirmar que el pan estaba agotado, que la harina de trigo se había esfumado; pero no dice que el cierre es porque estaba estafando al pueblo vendiéndole el pan con menos peso y cobrándole más; pareciera que son personas entrenadas por la derecha para que vayan a tofos lados repitiendo lo que ven y oyen por los canales de la canalla, son estas personas disociadas y a punto de infarto cuando hablan, de las que hay que cuidarse porque no falta quien les preste atención y hasta les crea las barbaridades que vocifera, pero los revolucionarios, que también hacemos cola, y vamos al mercado y que sabemos exactamente lo que está sucediendo, no podemos quedarnos callados, hay que enfrentar este tipo de personas, eso si con propiedad y mucho respeto, sin perder la compostura y de la manera más educada posible, esto es algo que debe tenerse en cuenta en las reuniones de nuestros batallones para que cada compatriota esté presto a defender y convencer en cada sitio, en el bus, en el taxi, en la fábrica, en el mercado, incluso en el templo, no olvidemos que hay curas que se aprovechan del privilegio de la palabra en una misa para lanzar dardos contra el gobierno, allí también no puede faltar un chavista católico, pues somos muchos que esté en capacidad de levantar su voz y reclamarle al sacerdote se ocupe del evangelio y no de desviar el sacramento hacia temas que no son propios de una celebración eucarística y más si son descaradamente falsas.-
BOLIVIA
Ahora es el querido Bolivia, el país que nació de la espada libertadora de Bolívar y Sucre, hija predilecta del Libertador, donde también existen como aquí los Ledesma, “cabezas de motor”, los Ortega, el Pineda ( ex embajador que pareciera se olvida que fue y ya no es) quien añora la ”dolce vita” que disfrutó en la IV, los Poleo, Ramos Allup, Rosales, Miros Alcalá o Aalcalai, eso no importa, Ísmaeles, Leopolditos, los Capriles Radonski, los “matacuras”, los Nitu, los Goicochea, y toda esa caterva de desalmados que aquí han hecho tanto daño y que pareciera han sido clonados en la hermana Bolivia para llevar a cabo los perversos planes del Imperio.
Esos clones de allá, bajo el mandato del Departamento de Estado y la CIA se aprestan a dar un paso anticonstitucional, van con todo en la búsqueda de dominar los departamentos en los cuales están las riquezas que Dios le asignó a ese país, con las aviesas intenciones de colocarlas al servicio del demonio del Norte. Ante esas pretensiones, nosotros los revolucionarios por cuyas venas corre sangre y no horchata, debemos hacer todo lo que esté en nuestro alcance, porque no basta rezar, para evitar otro zarpazo imperial que frene la posibilidad de libertad que la inmensa mayoría del pueblo boliviano decidió darse en libres elecciones hace apenas dos años.
El Gobierno gringo sabe bien que una fractura en Bolivia es como una fractura al cuerpo de la América Libre y como no ha podido lograr sus aviesas intenciones por la vía electoral porque los pueblos han madurado y abierto sus ojos, le queda como recurso la fuerza, sabe bien que los bolivianos conscientes que son la mayoría no se van a quedar de brazos cruzados y eso es precisamente lo que busca el demonio del Norte en su avidez de dominación y colonización.
Los escuálidos de allá fueron tierra fértil para que el gobierno gringo sembrara sus mala hierva y ahora esté aupando una intentona por dividir al país boliviano; no perdonan a un pueblo que decidió ser libre y colocó al frente de sus gesta libertaria del siglo XXI, a un indígena, uno de los suyos, apegado a su tierra, no contaminado e incondicional amante de la Libertad, heredero de quienes ofrendaron su sangre contra el coloniaje usurpador.
Los venezolanos inspirados en Bolívar y Sucre y todos los compatriotas que dieron libertad al Alto Perú, hoy Bolivia, no podemos dejar pasar con indiferencia lo que allá sucede, ni siquiera nos debemos contentar con rezar, eso no basta, “hace falta mucha gente para conseguir la paz” como nos cantó el gran Alí y como Venezuela en esta Nueva Era es pueblo y milicia, como uno solo debemos estar dispuestos a lo que sea necesario para defender a la amada y sufrida Bolivia de las garras del imperialismo que pretende engullírsela para saciar su hambre de hegemonía.
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