Debemos comprender nuestra realidad histórica para redescubrir el socialismo democrático que sienta sus nuevas bases a partir del año 1999. Es un proyecto de largo alcance bajo una estructura pragmática llamada Simón Bolívar y que conlleva a acogernos como ciudadano al nuevo orden moral, donde es necesario asumir con responsabilidad el nuevo rol histórico de la nación ante el fascismo y terrorismo motivado por fuerzas extranjeras que hacen vida activa en nuestro país.
Los venezolanos tenemos que aprender que caminar juntos nos afianza en el camino, la potestad de Dios. Y es el momento de interpretar nuestra historia bajo los preceptos racionalistas de nuestros batallones. Solo hay una misión, sembrar el país de una semilla que empieza a germinar y fortalecerá nuestra alma, me estoy refiriendo a las doctrinas y símbolos que aplicó nuestro Libertador Simón Bolívar durante su espejismo y trayectoria política.
Es necesario ir a las urbanizaciones e ir programando una serie de coloquios y foros, donde el único fin seria discutir de una amplia, las nuevas leyes que son necesarias anexarles a nuestro cuerpo constitución y que tienen relación con el código de comercio y la reelección presidencial. La democracia nos despierta grandes emociones y somos parte directa de ella., porque, precisamente cada ciudadano es su protagonista.
Estamos ante el despliegue de una serie de transformaciones de índole político donde el discurso político es la expresión primaria para lograr los cambios políticos que el país necesita y lograr la inclusión de muchos venezolanos al sistema sanitario nacional. Lo cierto es que debemos preparar al ciudadano con la mejor intención para cumpla su ejercicio comunal y rompa con el dogmatismo que origina algunas disciplinas partidistas vacías.
La democracia en nuestro país tiene su propia historia y deseamos contabilizarla en pro de la comunidad y con intuición visionaria trabajar por la nueva república y sus reformas por venir, las cuales deben ser adaptadas a nuestra Constitución Bolivariana para darle una verdadera vigorosidad socialista que es justicia para todos.
