A veces no sé si reír o llorar.
Nada destruye como la mentira. Sin embargo, mas devastadora es la práctica
de mentirse a si mismo.
Un respetado Blogger, fanático
anti-chavista, escribió lo siguiente en inglés:
“Un estudiante
líder del chavismo, Robert Serra,
anunció sin
pestañear que la enmienda para reelegir a
Chávez beneficia a la oposición ya que
esta necesita mantener a Chávez en el poder para garantizar que el
80% pobre de la masa venezolana no proteste
y tome de los ricos todo lo que les pertenece.”
Luego, todavía en inglés,
enfatizó:
“Así
es. Lo que lee es correcto. Para que no crean que estoy confundido,
aquí les pongo las palabras originales en español.”
Seguidamente presentó las
palabras textuales de Robert Serra en un acto insólito de voluntaria
inmolación testimonial:
“Es el liderazgo del presidente
Chávez el único muro de contención para que ese 80% de excluidos
no se enfrente por otra vía a ese otro 20% de acomodados, de incluidos,
de incorporados o que sí estuvieron en la repartición de las piñatas
que se entregaban en este país.”
No pude resistir la tentación.
“OK, panita”, le
dije. “¿Qué parte de la versión en
español se traduce a, ‘y tome de los ricos todo lo que
les pertenece’?”
“Elio”, me contestó
con convicción, “yo no traduje el texto”. Con petulancia
agregó, “tú necesitas leer mas cuidadosamente”. “Yo
interpreté las palabras de Serra”.
¡Interpretó que Serra anunció!
¿Necesito decir más?
Mientras la oposición, sus
líderes y simpatizantes, continúen cometiendo impunemente estos pequeños
errores de interpretación, para mí y muchos otros, siempre estarán
en segundo lugar. Nada bueno considerando que en la Venezuela actual
existen solo dos adversarios políticos.
Respecto a la reelección presidencial,
hay quienes argumentan que el presidente no puede ser candidato indefinidamente
porque esto supuestamente viola el Artículo No. 6 de la Constitución
de la República Bolivariana de Venezuela:
“El gobierno de la República
Bolivariana de Venezuela y de las entidades políticas que componen
es y será siempre democrático, participativo, electivo, descentralizado,
alternativo, responsable, pluralista y de mandatos revocables.”
Dicen que la supuesta violación
de la constitución ocurre al derogarse el aparente carácter “alternativo”
del gobierno.
Veamos… Al gobierno lo nombra
el pueblo. Esto lo establece el Artículo 5 de la Constitución:
“La soberanía reside intransferiblemente en el pueblo, quien la ejerce directamente en la forma prevista en esta Constitución y en la ley, e indirectamente, mediante el sufragio, por los órganos que ejercen el Poder Público.
Los
órganos del Estado emanan de la soberanía popular y a ella están
sometidos.”
O sea, el gobierno es “alternativo”
si así lo decide el pueblo a través del sufragio. La mayoría del
pueblo, por supuesto…
No obstante, hay disociados
sin fronteras que consideran que es un derecho constitucional el votar
en contra de las autoridades de turno para que de esa manera el gobierno
pueda conservar su perfil “alternativo”.
¡Échele coco!
A veces no sé si reír o llorar…
¡Uh! ¡Ah!