Me he reído bastante
con el nuevo rapero de la oposición, Ramos Allup. Hasta lo tengo de
tono del celular. Cuando ya esperaba un nuevo remix u otro éxito
musical, sale a dárselas de serio y de honesto analista del resultado
referendario, con la misma sabiduría de un mercachifle de Wall
Street.
Utilizó una frase que
me llamó la atención y que da título a este escrito. Aunque queda
mejor comparsa a baile, en esa cueva opositora no solo hay arácnidos,
también hay ofidios y batracios, así como varias especies de mamíferos
cuadrúpedos.
Animalizados por la pervertida genética imperial, su comportamiento es instintivo, de modo que este alacrán florido no está dando muestras de sindéresis, sino que ese instinto le dice que empiece a abrir los brazos o los glúteos ante la pendejada esa de “tender puentes”.
Hay suficiente material
audiovisual de sus desmanes y arremetidas, como para saber que si la
derecha vuelve, lo que ellos van a tender serán nuestros cadáveres
en bolsas negras negritas. Es verdaderamente incomprensible se envíe
este tipo de mensajes a una oposición que si algo la caracteriza es
su aversión a la Patria. Particularmente, yo no tengo que ver videos.
Muchos hemos sido testigo de lo que son capaces. Pero los carajitos
y carajitas quinceañeras de hoy serán votantes en las próximas elecciones
presidenciales y están inermes y sin memoria frente a la jauría
fascista.
Lo dije hace poco y lo
repito para los “puenteros”. En aquel baking estaban plasmadas sus
aspiraciones. El Líder Comandante fue a venenovisión a sabiendas
de que son ponzoñosos e irreductibles, más el fuego que sale de su
boca calcinó la mala intención, trocándola en tiro por la culata.
El camina descalzo sin temores junto al Pueblo; por eso le dijo a los
alacranes (probablemente también aquellos, advertidos por Müller Rojas)
que las puertas de Miraflores están abiertas, pero que eran sus acciones
las que les permitirían estar allí. Ese mensaje es un látigo flamígero
para los mercaderes del templo.
En sus albañales las
alimañas están concentrando sus venenos, atormentados por la derrota.
Los más infectos siguen siendo los mediáticos, verdaderos escondrijos
políticos cuyos dueños son los perdedores absolutos. Se desataron
como nunca antes, pues salieron ellos mismos a aguijonear a los electores
y perdieron pero no como siempre ¡Como nunca, compa!
No nos equivoquemos.
No andan apesadumbrados, andan iracundos; no están reflexivos, están
al acecho; no quieren entablar diálogo, quieren lanzar proclamas. Anhelan
ir a las puertas de Miraflores, pero a sacar a Chávez. Sabemos muy
bien que la contrarrevolución siempre quiere montar su merequetengue,
pero ¿Por qué ofrecerles salones de baile? ¿Quién quiere echar
un pie con ellos?
¡Revolución, revolución, revolución! O el Líder Comandante se consumirá y no tendremos Patria.
pladel@cantv.net