Después del día 11 de abril de ese mismo año, cuando María teresa empieza con la pesadilla, fue herida mortalmente, no en los hechos históricos de esos días, fue en las entrañas de su alma y su corazón, la misma cúpula oligarca representadas en FEDECAMAS, CTV, LOS PARTIDOS POLITICOS TRADICIONALES, juntos a personajes como Ignacio Salvatierra, Miguel Ángel Martínez, la jerarquía de la Iglesia Católica, representada por Zamuro Negro, el gobernador de Carabobo con su corrupto padre, el del Zulia y los innombrables representantes de los medios de comunicación que todo el mundo conoce, Judas conocidos por todos.
Ese día 12 será imborrable en el pensamiento de muchas Marías Teresas. Al ver constituida la nefasta Junta de gobierno del dictador Carmona Estanga, el diablo presente con sus voceros principales, hizo un disparo perfecto al centro del corazón de todos los revolucionari@s que se hicieron dueños de este proceso, esto no es una ideología, esto se volvió un sentimiento, un sentimiento nacional que viene arrastrando muchos errores, no es perfecto, eso lo hace ser mas humano y por eso lo queremos, será por eso que se hace tan largo el camino, pero es el camino.
Cuando aquel mono de ceremonia, leyó el dictamen de esa dictadura, le aplicó una carga de corriente eléctrica o le dio los primeros auxilios a un corazón sin palpitaciones, hizo reaccionar del limbo en el que encontraban miles de almas adormecidas por el ataque hipnótico de los medios de comunicación asesinos, que postrados en cada unos los hogares tenían una pistola sobre las mentes de todos los venezolanos.
Es cuando María Teresa sale a la calle, sola, desorientada, buscó al vecino, a su amigos, a sus amigas, sus hermanos, pues el marido en un ataque de consumo etílico, dormía una placida rasca estranochada, aludiendo que no tenía cargos en el gobierno y no iba a perder tiempo por esos cagones, esto no amilanó a esta humilde mujer, heroína anónima de estos hechos, que hicieron patria en Venezuela, salió en cambote a rescatar su sueño.
El día 12 de abril cuando sacrificaron al pueblo estos fascistas, María Teresa creyó, que moría y efectivamente, por un momento se sintió en el limbo, la luz alumbró a este pueblo, quisieron matar al líder de este sueño que ama María Teresa. La posición de María Teresa fue firme, ante su líder, sus Ángeles de la guarda, su amor, sus sueños, sus esperanzas estaban gravemente heridos, pero su fe nunca se fue.
Este pueblo, junto a miles de mujeres como María Teresa, embargados de amor y coraje hicieron resucitar este sueño, representado en nuestro presidente, y fue entonces que al tercer día bajo de los cielos, montado sobre águilas de hierros, rodeado de Ángeles verdes, lleno de amor, sin odio, sin rencores y una sonrisa en su rostro del tamaño del sol al amanecer, como siempre aceptando con humildad los errores cometidos., un volvió, volvió recorrió toda Venezuela, para darle la bienvenida.
Luego, reunido con los que escribirían la historia, dio su valioso testimonio, una periodista que no quería creer lo que veía, le preguntó por las torturas recibidas durante su secuestro, por las huellas de sus costillas rotas, el tiro en a pierna, a todos estas inquietudes, la invitó a acercarse, para que lo tocara, así mismo se quitó el saco para que se cerciorara de sus dudas, preguntándole que cual otra parte quería tocar.
Este pueblo que habían matado de hambre, de sed, huérfano todavía de justicia, está vivo y lleno de amor, ha renacido como el monte en la sabana después que pasa la candela y vienen los humedales del invierno, Así llegó el invierno, lleno de esperanzas, lleno de sueños, lleno de ilusiones, lo que se fue volvió, lo trajo un hombre parecido a ese invierno, lleno de fe, de amor por la patria.
Hoy María Teresa sigue su vida como siempre la ha tenido, lleva los muchachos todavía, a una escuela bolivariana, otros están en un liceo también bolivariano, cerca de su casa, lava y plancha ajeno, el marido sigue vendiendo verduras en el puesto que tiene en el mercado, y ella dispuesta a salir de nuevo si se meten con su presidente y su sueño.
Por eso es que mas nunca volverán y se lo intentan los barreremos de nuevo.
Patria socialista o muerte… de verdad que seguimos venciendo.
Norma.rojita@hotmail.com
