Si, Sabino, somos uno cobardes y yo soy uno de ellos, nada hicimos para impedir tu muerte anunciada por ti mismo cuando te entrevistaron los camaradas de Aporrea en Caracas. Te dejamos solo en tu lucha solitaria contra los terratenientes del pasado y contra los nuevos terratenientes. Te dejamos solo en tu titánica campaña para recuperar las tierras que les pertenecen a los Yukpas y solamente a ellos. Se nos fue el tiempo denunciando la persecución y amenazas de muerte que había en tu contra. Se nos enfrió el guarapo de tanto hablar y hablar y no actuar.
Si, Sabino, mientras perdíamos el tiempo de denuncia en denuncia en los medios de comunicación del estado, de la Fiscalía, de la Defensoría del pueblo, la AN y en los organismo de seguridad, la guardia y los terrófagos zulianos planificaban tu muerte. Pudo más eso que llaman, Guardia Nacional Bolivariana (pá más vaina y que del pueblo) la primera responsable de tu muerte. Pudieron más el poder y los malandros de la burguesía vieja y los boliburgueses civiles y militares que les quieren poner las manos a las tierras donde habitan tus hermanos indigenas: Las tierras de Perija. El Gral. Francisco Salcedo Alcalá, es uno de ellos. Este general fue denunciado por ti en una entrevista que te hicieron los camaradas de Aporrea, como el principal sospechoso de tu futura muerte.
Sabino, yo no estoy triste por tu muerte, no. Lo que estoy es arrecho conmigo mismo por no haberte dado una mano en tu insobornable lucha contra los que se creen amos de las tierras más fértiles del estado Zulia. Contra los que trafican droga entre ambas fronteras. Contra los que pasan de contrabando hacia Colombia gasolina y alimentos de Mercal. Contra las transnacionales que les quieren meter las manos a las minas de carbón para dañar el ecosistema Perijuanero. Siento una tremenda rabia contra la GNB que ayudó a apretar el gatillo de la pistola del sicario que te mató. Rabia que se acrecenta cuando recuerdo a la malinche Dilcia Maldonado que núnca dejó de ser lo que es: una indigena esclava al servicio del español que ahora lo llamamos boliburgueses por que se pronuncia mejor.
SI, Sabino, somos unos cobardes. No hicimos nada de nada cuando asesinaron Aléxander Fernandez y cuando asesinaron a uno de tus hijos y a otros cientos dirigentes indigenas cuyos asesinos materiales e intelectuales aún se se encuentran libres, porque en este país la justicia sigue en manos de los ricos y de los delincuentes. Ya verás Sabino, como nuevamente saldran tanto Nicolás Maduro y Diosdado Cabello, todos los diputados del PSUV, la fiscalía, la defensora del pueblo, el ministro de la defensa en nombre de las FANB, la presidenta de la TSJ y demás instituciones del estado a rasgase las vestiduras diciendo a gritos que cada uno de ellos investigará tu asesinato y que este no quedará impune y toda la habladera de paja que hacen después que suceden estos horrendos asesinatos.
La muerte tuya tiene muchos culpables, pero los principales somos nosotros que hemos mirado pasivamente como han acabado con toda familia y contigo como si fuera una película y nada más. Por eso te digo que no merecemos tu perdón, nuestra inacción, nos hizo complice de tu muerte. Por culpa de nosotros tus asesinos se salieron con las suyas. Merecemos estar jodidos como estamos por no hacer nada. Ellos, nos arrebataron a un verdadero camarada que dedicó toda su vida por la recuperación del territorio Yukpa que por derecho les pertenece. La vieja y nueva godorria zuliana, nos arrebataron al Guaicipuro del Sol y del Tukuko. Lo siento por nosotros, ya que lo más seguro es que nuevamente nos dediquemos a gritar: Sabino vive: la lucha sigue. O pendejadas como: Sabino, camarada tu muerte será vengada. Y así seguiremos sin mover el culo esperando que otro hermano Yukpa u otro dirigente campesino que reclame sus derechos y luche contra el latifundio sea acribillado.
Mientras tanto Sabino el gobierno y la mayoría del pueblo solo está pendiente de la salud del presidente y si regresa a gobernar o no. Los artículos de la Constitución que protegen los derechos indigenas son letra muerta. Que importa para ellos un indígena más muerto, total en este país a los indigenas siempre los han marginado. Indigena que luche por sus derechos, puede considerase muerto. Que importa una muerte más, si tenemos más de cuatrocientos semanales. Que importa Sabino que el ejército haya disparado contra el hijo de Carmen Fernández. Que importa que millones de venezolanos cada día coman menos porque la devaluación asesinó su salario. Que importa la corrupción civil y militar. No Sabino, a ellos les importa un carajo. Lo importante es que ellos sigan mintiendo y la oposición siga jodiendo.
Por eso te pido que no nos perdones, ya que lo que hicimos contigo no tiene perdón. Unos por acción y otros por omisión. Y sin hacer nada se nos pasa el tiempo viendo como poco a poco estamos volviendo al tenebroso pasado del puntofijismo. Nuevamente estamos viendo como nombran comisiones y comisiones que no investigan nada, que no hacen nada de nada, para que la impunidad siga reinando y los flojos gobernando.
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