El 31 de mayo se cumplen dos años del injustificado encierro en Venezuela del músico colombiano Julián Conrado.
Desde la Coordinadora Que No Calle el Cantor-Canarias, nos sumamos a la campaña internacional que en estos días se intensifica a objeto de que el gobierno Bolivariano deje en libertad Conrado y le otorgue -con plenas garantías- el asilo político que le corresponde como perseguido político.
Son distintas las acciones que estamos emprendiendo, y entre ellas, este escrito que dirigimos al Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela, único órgano que tiene la potestad (y la responsabilidad) de resolver la inadmisible situación del cantor insurgente.
Animamos a esta organización a que suscriba el documento que les enviamos, escribiendo a libertadyasilojulianconrado@gmail.com
Igualmente, les instamos a que difundan el texto entre otras organizaciones hermanas que entienden el necesario reclamo del que nos hacemos eco.
Las Palmas de Gran Canaria, a 24 de mayo de 2013
Dra. Gladys Gutiérrez Alvarado
Presidenta del Tribunal Supremo de Justicia de la República Bolivariana de Venezuela
Saludamos la nueva andadura que comienza el Poder Judicial en Venezuela tras los recientes nombramientos efectuados en dicho órgano. Con absoluto respeto, nos dirigimos a usted en ocasión de cumplirse este mes de mayo dos años de encarcelamiento de Julián Conrado, actualmente en el Hospital Militar Carlos Arvelo de Caracas. Apelamos al buen hacer y la sensibilidad del Ministerio Público para la pronta solución de un caso que preocupa también a nivel internacional.
El proceso revolucionario venezolano ha sido sin lugar a dudas un referente de máxima significación en la lucha de los pueblos contra el sistema de dominación imperialista, concitando además un extenso ejercicio de solidaridad internacionalista a su alrededor en los momentos más álgidos que le ha tocado vivir en su aún corta trayectoria.
El giro radical que Venezuela viene encabezando en el continente es acogido con beneplácito por las diversas fuerzas políticas y sociales que durante muchas décadas han tenido que librar -y libran aun hoy- cruentas batallas contra la ignominia y la opresión, como ocurre en la hermana Colombia.
La lucha del pueblo colombiano también merece la solidaridad que tanto ha arropado al proceso venezolano por parte de otros pueblos, el colombiano, entre ellos. En honor al internacionalismo entre los pueblos y en coherencia al espíritu bolivariano, estimamos que Venezuela debe hoy ser tierra de abrazo para los perseguidos políticos colombianos.
En esa lucha de los pueblos, un significado personaje es el cantor revolucionario Guillermo Torres Cuéter. Guillermo Torres es un cantor popular, que desde su pronta juventud participa en el movimiento estudiantil, y refleja en sus canciones las reivindicaciones del pueblo colombiano por la justicia social; lo anterior le valió la persecución del Estado colombiano, siendo encarcelado, sufriendo tortura, y una vez en libertad, escapando varias veces de ser asesinado durante el genocidio estatal contra la Unión Patriótica. Por su condición de perseguido político, Guillermo Torres ingresa a la insurgencia colombiana y se convierte en Julián Conrado, miembro de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo. Desde esa condición de perseguido político es que hoy requiere asilo en Venezuela.
Basta conocer la trayectoria vital de Conrado, la profundidad de su pensamiento y su profusa obra poética y musical, para comprender su profunda vocación y acción bolivariana, enfrentando la barbarie y el terrorismo de Estado que ha padecido el pueblo colombiano durante demasiadas décadas.
Julián Conrado ha permanecido dos años detenido en Venezuela, desde el 31 de mayo de 2011, cuando fue apresado en circunstancias francamente vejatorias en el estado Barinas. Todo este tiempo ha transcurrido a la espera de que los órganos competentes venezolanos le otorguen la libertad y el asilo político que requiere, en coherencia con los principios de la Constitución y las leyes bolivarianas, los tratados y convenciones internacionales y la ética revolucionaria que prevalece en el país. Conrado no puede ser entregado, bajo ningún concepto, al gobierno colombiano.
Numerosos son los llamados, tanto de dentro de la República Bolivariana, como de otras latitudes del planeta, para devolver a la libertad, con garantías plenas para su integridad personal, a quien denodadamente ha luchado por defender los ideales de hombres y mujeres que han apostado sus vidas por la emancipación definitiva de sus pueblos.
Insistimos, siempre con el mayor respeto, en instar a la máxima autoridad judicial venezolana, a no demorar más la puesta en libertad y el otorgamiento de asilo político al cantor insurgente, bolivariano y aliprimeriano, Julián Conrado.
Esperando pronta y positiva respuesta a lo aquí planteado, reciba un atento saludo.
FIRMANTES
- Que No Calle el Cantor-Canarias