Señor Raúl Bracho
Me he tomado el tiempo de escribirle a usted y discúlpeme al no referirme a usted como compañero porque esa categoría solo la utilizo cuando estoy convencido plenamente que mi interlocutor es un compañero de verdad, (en Colombia, mi país, tiene el significado de revolucionario, de pareja o consorte). Aunque en apariencia suene algo agresivo, quiero recordarle que Usted fue uno de los primeros y vehementes defensores del derecho del Estado venezolano a no dar explicaciones por el secuestro del revolucionario y guerrillero de las FARC-EP, Julián Conrado, según Usted “dada la necesidad del gobierno del presidente Chávez de defenderse de los radicales que “conspiraban contra la revolución” por pedir la libertad de Julián, y del periodista Joaquín Pérez Becerra editor de ANNCOL; según su parecer eran nada menos que posibles contrarrevolucionarios al servicio de la CIA que contribuían a desestabilizar el proceso.
Por tal motivo quiero que Usted que hoy se ha convertido en un decidido defensor de la libertad de Julián el revolucionario y cantante, quien hasta asumió su nombre de lucha, lea un articulo de mi autoria escrito al respecto en vida y plena salud del presidente Chávez que creo lo puedes buscar por el titulo: “Ideología y política, Julián Conrado y la desnudez de los eclécticos”, en donde hago un análisis de las debilidades ideológicas y políticas del presidente en sana critica respecto al caso Julián y me refería a Usted precisamente como la representación de todo aquello nefasto e incoherente del proyecto Bolivariano, paradójicamente es lo mismo que hoy Usted critica con toda razón.
Me surge una pregunta obvia: ¿Qué hay detrás de ese cambio? Si es un cambio porque ha habido un avance en su nivel de conciencia y de reflexión política sobre el proceso y Colombia Bienvenido sea, y mis respetos pero ¿sino….?
Tengo mis dudas de que esta carta sea reproducida en Aporrea.org, pues Aporrea tampoco se ha especializado en educar u orientar hacia la formación política científica e ideológica de la gente, allí siendo un escenario valiosísimo ganado a pulso, la gente opina de pero no siempre con el mayor rigor investigativo y académico. Y entre tanta y abundante heterogeneidad lo verdaderamente valioso y formativo que también valga decir es considerable, lastimosamente es lo que la gente menos lee.
Lo leo a usted de lamento en lamento sobre el no comprender por qué un revolucionario como Julián Conrado permanece aun preso allá, obvio que Usted no sale de su asombro pues intenta ver el mundo no como el mundo es; es decir, estas pensando con el deseo, Hegel nos enseño que la realidad suele expresarse en su negatividad o sea en su contrario, es dialéctico; hay que conocer las leyes de la dialéctica para no perderse en la nebulosa del idealismo religioso y burgués, y ello es debido a que la "revolución" que se les vendió al pueblo venezolano no maduró lo suficientemente para dar el salto cualitativo en cuanto a la batalla de ideas que tanto defendía el maestro de maestro Fidel, ahí si que hizo falta muchos comandantes Chávez, el comandante materialista y no tanto el idealista), para que su dirigencia siquiera abrazara el materialismo histórico y dialéctico como su arma o pivote de sustentación y o por lo menos, como herramienta, para que en el nivel teórico se comprendiera las leyes de la teoría materialista marxista para entender como opera la lucha de clases, la teoría de la revolución y así poder identificar a los amigos y enemigos de las transformaciones.
Obviamente la gran oligarquía imperial y latinoamericana estudia el marxismo a profundidad únicamente para contrarrestarlo y aplicarlo en su sentido contrario, precisamente para impedir que se hagan las revoluciones socialistas y proletarias mediante su falsificación y para que estas se transformen en rosaditas o de colores primaverales. ¡Cuanta falta hace Lenin¡ en el discurso de los proletarios y revolucionarios que escriben angustiados viendo como “todo lo sólido se desvanece en el aire”, entonces, su prioridad es dividir y dividir y excluir a las fuerzas revolucionarios y progresista mientras alistan el zarpazo saliendo del closet.
Entonces la pregunta que surge es por qué el conjunto de la dirigencia del proceso venezolano ha desdeñado el camino al socialismo científico en función del hombre nuevo? pues señor Bracho, parte de la respuesta esta en conocer la diferencia entre la moral revolucionaria y humanista respecto a las demás ramas filosóficas de la moral: La moral religiosa, la moral burguesa, la moral esclavista, la moral autoritaria, la moral del reaccionario, la moral de los amigos etc., etc.; entendiendo que la moral(los actos humanos), son el Facttum o campo u objeto de estudio de la disciplina filosófica llamada Ética. El Ethos de los pueblos, su cultura, su cosmogonía, cómo somos, cómo sentimos y cómo actuamos, etc.
Apoyándome en nuestro amigo idealista, Emanuel Kant, para adentrarnos en el asunto que pretendo abordar a la luz de Julián Conrado, este filosofo desentraño dos grandes campos de la ética: La ética de Fines versus la ética de Medios; la primera es profundamente revolucionaria y era el eje del actuar del comandante Chávez, como lo fue de Fidel, de Farabundo Martí, del Che, de Carlos Fonseca, de Sandino, de José Marti, de Manuel Marulanda Vélez y sus Hijos, de Camilo Torres Restrepo y por supuesto de Simon Bolívar y de los miles de revolucionarios que ha parido estas mestizas tierras latinoamericanas; en la segunda, subyace todos las deformaciones humanas, el hombre utilitarista posesivo, la ética del egoísmo, del imperio y del crimen.
Dentro de esa lógica y ética pequeño burguesa es natural que esta promueva la amistad con Fidel pero realmente sin llegar a conocer y seguir a Fidel, su verdadero pensamiento y aporte a la humanidad, hablan timoratamente del Che pero no “practican” al Che. Le aclaro que cuando digo que no conocen es porque conciencia y conocimiento son sinónimos y para ser como el Che el mejor ejemplo es parecerse por ejemplo a Chávez, Allende, Julián Conrado, Ali Primera, que bien saben que es la ternura de los pueblos; y la revolución venezolana ahora no tiene suficiente estatura moral para que ideológicamente se oriente a su pueblo hacia el verdadero Bolivarianismo humanista, que vibre en la construcción del hombre nuevo, es decir, practique al Che Guevara.
Así que si somos objetivos y hacemos análisis desprevenidos sobre lo que pasa día a día con las decisiones y acciones incoherentes por ese entramado de veleidades que subyace al presidente Maduro preso a su vez de su idealismo y voluntarismo que le incapacita para ver como sus áulicos y competidores temporales le preparan desde diferentes tribunas su caída, necesariamente ese proceso implosionara.
No es suficiente convidar al pueblo a permanecer en la lógica electorera si paralelamente no se enfrenta con el pueblo que aun esta a su favor, al gran capital; es indecente que por ejemplo un avance pequeño como lograr el control obrero de una fabrica tenga tantos conspiradores desde dentro y desde afuera, y la gente impotente no sepa por qué los sueños se desvanecen sobre la inercia y complicidad gubernamental, así se diga todo lo contrario, porque la boli burguesía y la derecha abierta, el imperio, la ambigüedad ideología, las taras y prejuicios políticos han ido secuestrando y e inmovilizando a los verdaderos revolucionarios con la apropiación indebida de preceptos revolucionarios para falsearlos.
Muchos hombres buenos ayudan a la decadencia con su ignorancia política y otros porque nunca fueron revolucionarios y en esencia son iguales a los oligarcas de la llamada cuarta republica que hoy esta más viva que nunca en la "quinta" republica.
La una no ha nacido definitivamente mientras la otra tampoco ha muerto definitivamente, de ahí que los cambios no pasen mas allá de la cosmética que facilita la renta petrolera; obviamente aquello produce angustia colectiva en los mas conspicuos, y que Usted señor Bracho, un hombre preparado también la expresa algo tardía a la luz de la trampa cometida contra Julián Conrado.
La única forma de detener la destrucción de ese proceso es que desde abajo surja con decisión y fuerza una revolución dentro de la "revolución", pero para ello hay que imponer grandes cambios que transformen la conciencia de las masas y se recomponga la dirección de ese proceso, no sin denunciar con nombre propios a los hombres medio de infiltrados y traidores.
Pero, en lo personal veo que la ideología imperante al interior del PSUV, le ha hecho tanto daño al proceso sucumbiendo y minimizando la política al estrecho y desgastante y nimio escenario electoral que va atrofiando e imponiendo la representación burguesa como la gran panacea hacia los cambios o reformas democráticas, de ahí que no haya movilización de masas exigiendo los cambios, como las hay hoy en Colombia, ¿verdad?
Las elecciones generalmente se convierten en un distractivo que en lugar de politizar despolitizan a la gente y les van quitando los escenarios de lucha social y política a los revolucionarios
Lo más agresivo contra el proceso y los logros acumulados, es el uso y abuso mediante la retórica “revolucionaria” demasiado pobre en contenidos, pero muy ambiciosa en irle cambiando el sentido a los símbolos y categorías del lenguaje para devaluar los verdaderos objetivos de esa luz que representaba el compañero presidente Chávez...
Y quiero resumirle algo, la lucha por la libertad de Julián e Ilich Ramírez no ha tenido éxito porque esa revolución en su conjunto ya no la dirigen revolucionarios comprometidos con la revolución, y menos revolucionarios socialistas que entiendan a plenitud como es la lucha de clases en Colombia; Porque esa revolución es soterradamente anticomunista y Julián viene de la entrañas Comunistas; Porque allá no han entendido la dialéctica de las luchas populares de los pueblos de aquí y de allá, por eso el presidente Maduro en su soledad, se convirtió en un salvavidas del criminal Santos para mencionar solo el paro agrario colombiano y Santos es el salvavidas de un proceso incapaz de poner a producir los campos y las fabricas venezolanas, puesto que no ha hecho una verdadera revolución agraria que le de tierra a quien quiera trabajarla, ni le ha entregado los medios de producción en manos de la oligarquía al pueblo;
Julián sigue preso porque los artistas venezolanos revolucionarios y los medios mas avanzados no han politizado suficientemente la lucha por Julián e Ilich Ramírez, de ahí su bajo nivel de convocatoria, ello implica su intención infantil y superficial por no “ofender al soberano”, intentando mostrar a Julián no como un guerrillero y revolucionario como lo es, sino como un cantor derrotado que ahora es bueno porque ya no habla con el fusil de los grandes temas de la revolución, es lo mismo que la reacción de “izquierda” y derecha ha intentado hacer con la imagen del Che al desnaturalizarlo, castrándolo, escondiéndole su verdadera potencia, sus principios, para después comercializarlo como una mercancía devaluada de guerrillero bueno que nada tiene que ver con la lucha revolucionaria de los pueblos sino que pretenden mostrarlo como parecido a Gandhi, el idealista feliz de poner la otra mejilla para que le sigan dando por la jeta.
Julián e Ilich siguen presos porque los “revolucionarios gubernamentales moderados” de allá aun fantasean con que ese es el camino para mantener contentos a los poderes reales de adentro y afuera mientras creen que ampliando la cobertura de la renta petrolera y mantienen su retórica antiimperialista, es decir, posan de estar enfrentados al imperio mientras se valen de los secretos de Estado que como todos sabemos encubren todas las hipocresías del mundo y hoy son también potestad de los revolucionarios;
Julián e Ilich siguen presos por ese idealismo religioso que destruye al humanismo y lo suplanta por la moral religiosa burguesa que impide acercarse a las organizaciones populares colombianas privilegiando los vínculos con el régimen fascista colombiano;
Julián sigue preso porque el aparato de justicia venezolano es reaccionario, estamental, feudal que ni idea de justicia revolucionaria, esa justicia es burguesa clasista, Pro imperial, condonativa y permisiva con los crímenes oligárquicos pero ambigua con los pobres, la maldición de Malinche en pleno;
Julián e Ilich siguen presos porque no han entendido el valor del internacionalismo proletario profundo, y porque se penaliza al secularismo o al ateismo, que son la forma más desarrollada y evolucionada del pensamiento libre;
Pero fundamentalmente Julián sigue preso porque las FARC-EP en Venezuela para el gobierno y los partidos políticos excepto el partido comunista, son un tabú, y ese tabú ha sido alimentado permanentemente desde Colombia, porque ese proceso cree que mantener a Julián preso les “garantiza” que los ejércitos paramilitares colombianos no actúen en Venezuela y la desestabilicen, por ello sus cúpulas no reconocen abiertamente a las FARC-EP y al ELN como organizaciones surgidas contra la expresión mas violenta del régimen asesino colombiano, asimismo desconocen por prejuicios moralistas vergonzantes el valor histórico de la lucha guerrillera colombiana, que hoy tiene en la mesa dialogando de tu a tu al mismo régimen, y por no valorar en el sentido histórico el esfuerzo que han hecho los revolucionarios colombianos que han impedido que desde Colombia se de el zarpazo a las esperanzas de ese proceso, manteniendo ocupado a las hordas de asesinos a lo largo y ancho de la geografía nacional, en una heroica guerra de resistencia.
¿Se pueden imaginar compañero Bracho, por si ha llegado a esta parte de la lectura, que Cuba ante un eventual rompimiento de los diálogos de la Habana entre las FARC-EP y el régimen colombiano, decida mantener en prisión por orden del gobierno colombiano a los delegados de las FARC-EP, mas de 40 delegados, a quienes no pudieron doblegar en el marco de las ideas y los principios; algunos de ellos condenados a centenares de años de prisión y por los cuales el gobierno colombiano y el imperio ofrecen millones de dólares por su extradición.? ¿Se ha puesto a pensar en esa opción? En primera instancia, con Cuba esa opción es inimaginable, como es inimaginable que el mismo gobierno colombiano sea capaz de plantearla al pueblo y gobierno Cubano, por una razón fundamental: Los principios (ética de fines), están por encima de todas las vicisitudes del mundo, y de todo el oro del mundo y ellos son las esperanzas para que en el futuro el mundo sea distinto a la barbarie de hoy.
En ultimas, Ilich Ramírez, Julián Conrado y Joaquín Pérez Becerra siguen secuestrados en Francia, Venezuela, y Colombia porque a la dirigencia “Bolivariana”, le importa un bledo la dinámica de la geopolítica global y la lucha por los principios mas allá de la retórica democratera y antiimperialista. Sobre esa realidad qué importancia subyace a que Colombia tenga 6 millones de desplazados internos por la guerra, que Colombia tenga, una diáspora de colombianos en el mundo que supera los ocho millones de colombianos excluidos en este país, de los cuales la mitad vive en suelo Venezolano, que en las cárceles haya mas de 10,000 presos políticos de conciencia, luchadores contra la injusticia y la barbarie; mucho menos habría el interés de comprender por qué la lucha armada revolucionaria es la respuesta de un pueblo sojuzgado y vilipendiado por las armas del régimen y que corresponde al derecho universal de los pueblos a la rebelión consagrados en los estatutos de las Naciones Unidas y en las mismas constituciones de los países civilizados. Es el derecho que tienen los pueblos dignos que luchan por liberarse de la opresión.
En fin, cuanto deseara que la realidad fuera distinta y el pueblo venezolano desenmascara rápidamente esa farsa seudo revolucionaria para proseguir por las nuevas victorias y nuevos caminos que bien señalara el comandante Chávez; acaso los rosaditos pensaran salvarse de las garras imperiales y de la furia asesina de la derecha que clama la sangre de los mejores hijos de esa patria que también es nuestra. Ningún traidor es bienvenido en ninguna parte, pero la realidad es concreta y paulatinamente la revolución venezolana a pesar de que tiene aun mucho Chavismo, misteriosamente los pocos revolucionarios reconocidos por el país político se van replegando sin dar la pelea en lo publico, obviamente con sus excepciones, cuando deberían convertirse en fuerza revolucionaria que reoriente el camino. Entonces la mentira se sigue imponiendo y entretanto los revolucionarios seguirán presos.
“Hay dos cosas infinitas, el universo y la estupidez humana, y del universo no estoy seguro”. Albert Einstein