Recientemente, un amigo muy cercano que vive en Barquisimeto nos contó el drama que está atravesando, luego de montar un negocio de venta de comida en el Centro Comercial Cosmos de esa ciudad, debido a que los dueños de este último establecimiento decidieron cerrar violentamente el espacio conocido como la “feria de la comida” impidiéndole que pueda desarrollar la actividad económica que le provee el sustento económico para su familia.
Desesperado y con lágrimas en los ojos el amigo nos refirió que hace casi un año los propietarios del Centro Comercial decidieron, unilateralmente, que él, junto a otros inquilinos debían desalojar los locales donde funcionaban varias ventas de comida rápida, desconociendo así el derecho de los comerciantes, y violando, incluso, los contratos de arrendamiento firmados por ambas partes.
El amigo que invirtió sus ahorros de toda la vida en esa pequeña venta de comida durante el año 2012, ahora está sufriendo una verdadera tragedia familiar ya que está desempleado y no cuenta con los recursos necesarios para cubrir las necesidades básicas de su esposa y sus hijos.
Esta persona que es un venezolano honesto y trabajador, y que de una u otra forma estaba haciendo una pequeña contribución al desarrollo económico del país, resulta que ahora es víctima del abuso, la irresponsabilidad y la soberbia de los dueños del Centro Comercial Cosmos, que haciendo ostentación de su poder económico y apoyados en un bufete de abogados, no menos inescrupuloso, y un sistema de justicia corrompido cometen todo tipo de atropellos contra gente humilde y trabajadora.
Además del viacrucis que ha tenido que vivir este amigo por la falta de empleo, resulta que hasta este momento no sabe dónde fueron a parar todos los materiales que utilizaba en la elaboración y conservación de los alimentos, por cuanto la entrada a la llamada feria de la comida fue clausurada y los dueños impiden que los inquilinos entren a conocer qué ha pasado con sus bienes.
Cuenta además el amigo que junto a otros afectados está siendo asistido por un abogado, pero lamentablemente a pesar de que se han aportado todas las pruebas suficientes para demostrar el delito que se comete contra ellos los fallos siempre han sido en contra quizás por influencia de algunos jueces corruptos.
Sería interesante que instituciones del Estado que están encargadas de velar por la justicia y el derecho de los ciudadanos investiguen el caso y puedan ayudar a que ceses este tremendo atropello.
Queremos aclarar que por razones obvias en este escrito no revelamos la identidad de nuestro apreciado amigo.
