A veces se peca por omisión, otras veces con intención, otras veces por pendejo. Pero pecado es pecado, y de todo pecado hay que arrepentirse, hay que hacer un acto de contrición, sea éste venial, mortal o capital,.
El día martes, 7 de octubre del año 2014, siendo Ministro de Interior y Justicia el General Miguel Rodríguez Torres, en un enfrentamiento entre funcionarios del CICPC y miembros de varios colectivos, acontecido el Edificio Manfredir, situado en la avenida Sur 4 de Quinta Crespo, fueron "dados de baja" varios de los militantes de esas organizaciones políticas.
Según información extraoficial, el Cicpc realizaba un allanamiento a un edificio tomado, en la Torre Manfredi y, posteriormente, se escucharon los disparos. Fuentes informaron que los detectives Hender Hernández y Carlos Moncayo, de la División de Capturas del Cicpc, además de Frank González, de la División Contra Homicidios, fueron tomados como rehenes por integrantes de colectivos en el edificio Manfreddy, ayer al mediodía.
Estos hombres fueron sometidos a torturas psicológicas y les fracturaron dedos de las manos. Al ser rescatados se produjo el enfrentamiento con funcionarios del grupo BAE. En la mañana de ayer hubo un primer tiroteo, en el que murió Carmelo Chávez, responsable del colectivo Escudo de la Revolución.
Odremán, que era sargento de la extinta Policía Metropolitana, y otros cuatro integrantes de su colectivo (Maikol Contreras Bernal, Carmelo González, José Ángel Tovar Contreras y Jesús Ramírez Riera) murieron en el procedimiento poco claro ejecutado por el Cicpc el pasado 7 de octubre en el Centro Manfredir, en Quinta Crespo.
Los hombres fallecieron en dos incidentes (uno a las 5:00 am y otro a las 11:30 am). Primero fue el allanamiento al edificio donde funciona la sede del Colectivo Escudo de la Revolución, que dejó dos víctimas. A las 11:45 am, luego de un supuesto secuestro de funcionarios del Cicpc, se registró otro presunto enfrentamiento que se prolongó hasta las 2:00 pm, y en el que murieron otros tres integrantes del Frente 5 de Marzo. A las 11:55 de la mañana aproximadamente, comienza a correr un rumor: "mataron al sargento Odremán".
Los funcionarios supuestamente dispararon a diestra y siniestra contra quienes se encontraban en el inmueble, denunció ante los medios nacionales José Miguel Odremán, vocero del colectivo y jefe del colectivo 5 de Marzo, quien advirtió que si algo le sucedía el responsable sería Miguel Rodríguez Torres, ministro de Interior, Justicia y Paz. Minutos después de su declaración, el líder cayó muerto por las balas. Según los familiares de Odremán, éste fue asesinado de 32 disparos después de haber sido detenido.
Seis funcionarios del Cuerpo de Investigaciones, Científicas Penales y Criminalística (Cicpc) fueron privados de libertad por los hechos ocurridos la mañana del martes 7 de octubre en Quinta Crespo, donde resultaron abatidos en un presunto enfrentamiento cinco sujetos, entre ellos José Odremán, miembro del colectivo Escudo de la Revolución.
Posteriormente al hecho, el Ministerio Público, a través del Tribunal Trigésimo Séptimo de Primera Instancia, dictó 6 órdenes de aprehensión contra varios funcionarios del Cicpc como parte de la investigación por el allanamiento y enfrentamiento en Quinta Crespo, que dejó un saldo de 5 muertos.
Las medidas privativas de libertad para un comisario, un inspector y otros cuatro detectives del Cicpc, adscritos a las Divisiones de Homicidios, Vehículos, Robo, Eje Central y Hurto.
Se les imputarían los delitos de homicidio calificado por motivos fútiles, uso indebido de arma orgánica, quebrantamientos de pactos y convenios internacionales, y simulación de hecho punible.
Luego de estas acciones del Ministerio Público el subdirector del Cicpc, Douglas Rico se dirigió hasta la sede de la Fiscalía General de la República donde se reunirá con los policías detenidos por el asesinato de José Odremán y otras cuatro personas.
Rico informó en ese que los funcionarios tienen todo el respaldo de la institución y se mantienen trabajando con normalidad. "Esta es una situación normal donde hay que investigar los hechos ocurridos. Ellos van a ser puestos a la orden de los tribunales y se buscarán los mejores abogados para que sean defendidos", dijo antes de ingresar al MP.
El único pronunciamiento oficial sobre el hecho fue un tweet del Ministro de Relaciones Interiores, a las 12:12 del mediodía. "@RodriguezT_MIJP: El #Cicpc efectuó procedimiento policial en la Avenida Baralt. El hecho no guarda relación con el homicidio del diputado Robert Serra", ratificando las declaraciones que desde Valencia había hecho el director del Cicpc, comisario José Gregorio Sierralta, quien informó que cinco miembros de una organización delictiva cayeron abatidos en un enfrentamiento con funcionarios del Cicpc en la avenida Lecuna de Caracas. Explicó que integrantes de la División Contra Homicidios llegaron al edificio ubicado en la esquina Glorieta, para detener a los integrantes "de una peligrosa banda". Sierralta informó que hubo "un fuerte intercambio de disparos que concluyó con un balance de cinco individuos abatidos, integrantes de la banda del Odremán. Este individuo que lideraba la referida banda es un ex policía metropolitano que dirigía el referido grupo delictivo".
Poco después circularon videos caseros que mostraban cómo José Odremán fue ejecutado por funcionarios policiales. Declaraciones de testigos y vecinos del lugar confirman que él y otros dos compañeros fueron ajusticiados por funcionarios del CICPC frente a los presentes y que en el lugar no ocurrió ningún intercambio de disparos.
El ministro Miguel Rodríguez Torres guardó silencio hasta el miércoles 15 de octubre. En una rueda de prensa en la sede de la ONA, al ser consultado sobre este hecho dijo: "Esas personas estaban involucradas en varios delitos. Eran parte de una banda que cometió varios homicidios. No podemos llamar colectivos a cualquier grupo armado que comete delitos. Por ahí hay un montón de grupos que ahora se llaman colectivos y lo que hacen es cometer asesinatos y robos. La gente tiene que saber diferenciar y saber lo que son los colectivos. Los colectivos son una expresión popular para la paz. Aquí en esta reunión hay colectivos".
El miércoles 8 de octubre en la mañana, Delcy Rodríguez, que para el momento era la ministra para la Comunicación y la Información, difundió un comunicado mediante el cual el presidente Nicolás Maduro pedía una investigación "completa y exhaustiva" de los sucesos de Quinta Crespo.
Horas después el Ministro de Interior, Justicia y Paz, General Miguel Rodríguez Torres estaba fuera del cargo.
Ahora bien, después de este recuento de lo que fue un trascendentalmente grave, en el cual, el mismo General Rodríguez Torres en funciones de Ministro, guarda silencio, acusa, ofende y sataniza los ciudadanos asesinados, sin pruebas fehacientes de sus acusaciones, ni siquiera dar una orden para abrir una investigación de las denuncias hechas por los mismos colectivos, familiares testigos y los videos en los cuales se muestra el ejecutamiento de Odremán y la violencia con que actuaron los funcionarios del CICPC, en el cual se violaron los derechos humanos, tanto de los fallecidos, heridos, detenidos y familiares de las víctimas.
Resulta que el exministro encubridor de los funcionarios del CICPC que participaron en la operación de marras ahora se presenta como el adalid de los terroristas que robaron un helicóptero del CICPC, que dispararon contra gente inocente ( incluso contra una guardería) que lanzaron granadas contra la ciudad, que asaltaron un puesto de la GNB ubicado en Los Altos Mirandinos, robando armamento militar, que fueron cómplices del asalto al Fuerte Paramacay que costó la vida a dos personas y 7 más resultaron heridos y en el cual robaron vehículos y armamento de guerra además de amenazar con derrocar el Gobierno Democrático, que protagonizaron un enfrentamiento armado con la FANB en su guarida en El Junquito poniendo en peligro la vida y bienes de los vecinos de la urbanización, y que "según" el nuevo defensor de los "valientes luchadores de la Resistencia" (de los que intentaron usar como salvoconducto a una mujer embarazada para evitar ser detenidos, que dispararon armamento de guerra contra los efectivos militares y además asesinaron a 3 funcionarios de la PNB con disparos y explosivos a mansalva) se les violentaron sus derechos humanos, ya que no se les dio oportunidad para su rendición, se masacraron implacablemente y alegremente afirmando que se les dio un tiro de gracia, que se les impidió la participación a sus familiares en el sepelio, así como otras "irregularidades" más.
Qué puede reclamar aquel que fue incapaz de dar la cara a los familiares y al pueblo de Venezuela por la muerte de los militantes de los colectivos en los acontecimientos de Quinta Crespo, que guardó silencio ante las acusaciones a las cuales fue sometido por negligencia, irrespeto a los fallecidos y a sus familiares.
Ahora habla de irregularidades, las mismas que el cometió al no estudiar los videos, ni asumir el liderazgo de la operación, ni hubo fiscales del Ministerio Público en el hecho, ni de la Fiscalía, ni se grabaron los sucesos, ni explicaron nada, ni él personalmente como se recomienda que debe hacerse ya que es el Funcionario de mayor jerarquía, ni siquiera alguien por él autorizado.
O sea, que en Quinta Crespo no hubo excesos. ¡No me lo escarapele a besos¡
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